AgenciasJerusalén.- Los bombardeos israelíes en Gaza y las salvas de cohetes palestinos sobre Israel siguieron, y en Cisjordania se recrudeció la violencia, lo que aumentó el número de víctimas, mientras la comunidad internacional intensificó sus esfuerzos, con una resolución presentada por Francia ante el Consejo de Seguridad de la ONU.Los palestinos de Cisjordania ocupada mantuvieron una de huelga y de “ira” en solidaridad con Gaza. Al margen de estas protestas, que degeneraron en enfrentamientos con el Ejército, murieron cuatro palestinos y varios soldados israelíes resultaron heridos por bala.Y los bombardeos prosiguieron en Gaza, destruyendo cada vez más edificios. “No hay electricidad ni agua, no hay tejado, los cristales y las puertas están rotos”, explicó Kamal Harzalá, cuya casa quedó destruida en un bombardeo.El enfrentamiento se cristalizó en torno a la apertura de un punto de paso hacia el enclave palestino, destinado a hacer entrar una primera entrega de ayuda humanitaria, “indispensable tras nueve días de crisis” según la ONU.Pero el cruce de Kerem Shalom sólo se abrió unas horas y luego fue cerrado por Israel tras el lanzamiento de proyectiles palestinos.58 mil desplazadosDesde que empezó este nuevo ciclo de violencia entre Israel y los grupos armados de la Franja de Gaza, el 10 de mayo, al menos 230 palestinos –incluyendo a decenas de niños- han muerto en el enclave y más de 1,440 han resultado heridos.Del lado israelí, dos obreros tailandeses murieron por disparos de misiles desde Gaza.En Israel, 12 personas murieron (entre ellas, un niño) y 294 resultaron heridas por cohetes.En nueve días, 3,500 cohetes fueron disparados desde Gaza, indicó el Ejército israelí, el 90% interceptados por su sistema de defensa.A la crisis de seguridad se suma el riesgo de una crisis humanitaria, con cerca de 58 mil palestinos desplazados y 2,500 personas que han perdido su casa en los bombardeos, además de la escasez de comida y de equipos médicos.El presidente estadounidense, Joe Biden, acusado por su propio partido de falta de firmeza frente a Israel, expresó el lunes su apoyo a un “alto el fuego”, en una nueva llamada telefónica con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.“Continuaremos el tiempo que sea necesario para traer la tranquilidad a los ciudadanos de Israel”, zanjó Netanyahu.El movimiento islamista Hamás, en el poder en la Franja de Gaza, amenazó con disparar más cohetes contra Tel Aviv si la aviación israelí “no deja de apuntar a civiles”. Decenas de sus misiles cayeron sobre el sur de Israel.El Ejército israelí afirma haber apuntado a lo que denomina “el metro” –túneles subterráneos que permiten al movimiento islamista trasladar sus municiones– y a las casas de comandantes de Hamás, porque asegura que “almacenaban armas”.Diplomacia “discreta” en ONUEl Consejo de Seguridad de la ONU se reunió por cuarta vez para una sesión de emergencia, pero EE. UU. sigue oponiéndose a una declaración que llame al “cese de la violencia”.Francia presentó anoche una resolución ante el Consejo, en coordinación con Egipto y Jordania, que pide un alto el fuego en el conflicto.La propuesta llega en un momento en el que el Consejo lleva ocho días bloqueado por EE. UU. “Apoyamos todos los esfuerzos que faciliten el fin de la crisis y el restablecimiento de la paz en Oriente Medio”, declaró a la prensa el embajador chino ante la ONU, Zhang Jun, presidente del Consejo durante el mes de mayo. El embajador chino precisó que el texto de una declaración propuesta por su país, Noruega y Túnez, rechazada por Estados Unidos desde hace más de una semana, sigue sobre la mesa del Consejo de Seguridad.LC