“Las feministas no nos valoran”, lamenta obispo de Irapuato frente a pintas por 8M
El obispo de Irapuato defendió el trabajo que la Iglesia ha hecho a favor de las mujeres, pero que “las feministas no nos valoran”
Nayeli García
Irapuato.- El obispo Enrique Díaz Díaz defendió el trabajo que la Iglesia hace a favor de las mujeres, pero que, acusó, “no valoran las colectivas feministas”. Así respondió cuestionado sobre las pintas realizadas en el Tmplo de San Francisco. Esto, además, lo llamó ‘ataque a la Iglesia’ por su oposición al aborto y acusó: “como si la dignidad de la mujer radicara en su capacidad para abortar”.
“El problema es que esos aspectos no nos valoran las organizadoras del 8M; no son visibles. Y siguen denunciando la oposición de la Iglesia al aborto, como si la piedra angular de la dignidad de la mujer sea su capacidad de abortar”, criticó.
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Por el Día Internacional de la Mujer, las manifestantes aprovecharon para imprimir sus mensajes en el Templo de San Francisco. Sin embargo, ello no lo recibió con la misma mirada el obispo, quien los calificó de vandálicos y llamó a la reflexión. Asimismo, destacó el trabajo de la Iglesia “que se ha hecho por y para dignificar a la mujer”.
“La Iglesia y el Vaticano luchan por la dignidad de la mujer en diversos importantes sectores del mundo. Por ejemplo, la lucha casi personal de Francisco contra la trata de personas, la oposición a los vientres de alquiler por considerarlos nocivos para la dignidad de la mujer. O, por ejemplo, la lucha contra el aborto selectivo de niñas en China y la India, el rechazo de la pornografía. Son sólo algunos de los rubros en los que la Iglesia presenta diariamente la batalla por la dignidad femenina”, enlistó.
Y es que al final de la marcha de la mujer en Irapuato, los mensajes para denunciar abusos y exigir justicia impregnaron las paredes del Templo en San Francisco. Ahí, uno a uno exhibían a abusadores, violadores, secuestradores, feminicidas y todo aquel que las ha vulnerado.
Una de las paredes del costado del templo, inmueble catalogado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, terminaron con múltiples pintas.
Finalmente, recordó que en Irapuato fueron los católicos quienes más promovieron la educación de las mujeres de la ciudad. Hoy en día la Presidencia Municipal es la escuela.
No se olvidan de Jorge Romero
Uno de los nombres más recurrentes fue el de Jorge Romero, a quien acusaron de abuso sexual (o violación espuria) en contra de la exreina de Irapuato, Regina Irastorza.
En más de una veintena de veces apareció su nombre escrito en las paredes donde exigían que regresara a la cárcel.
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Por su parte, el Municipio ya inició las labores de limpieza de las pintas.
¿Por qué las pintas feministas?
Las pintas proviene de una postura iconoclasta. Un iconoclasta, en su sentido original, es una persona que se opone al culto de imágenes sagradas. Etimológicamente, la palabra, proveniente del griego εἰκονοκλάστης (eikonoklástes), significa ‘rompedor de imágenes’.
Hoy en día, por su parte, se reconoce como iconoclasta a quien va a contracorriente de las convenciones sociales y de los modelos estatuidos. Precisamente, la manifestación iconoclasta es el romper y destruir las imágenes, monumentos y símbolos de estas.
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La historia de la iconoclasia es extensa y por oleadas, y está relacionada con la protesta feminista desde hace más de un siglo. Para muestra, en 1914, la sufragista Mary Raleigh Richardson mutiló de siete cuchillazos la obra ‘La Venus del Espejo’, de Velázquez, en Londres.
Si estás interesado en la historia de la iconoclasia, puedes consultarla aquí y aquí. El vandalismo es otra cosa: simple destrucción sin motivo, vandalismo como principio y fin en sí mismo que se produce de forma incontrolada por razones individuales “sólo por hacer el daño”.
El vandalismo está ahí, a diario, pero de fondo lo que molesta no son las pintas ni los vidrios reventados. “Lo que molesta es que quien ejerce esta forma disruptiva y controversial de protesta sea la mujer exigiendo derechos y justicia”, aseguran organizaciones internacionales.
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