¿Quién era Salvador Almaraz y cuáles fueron las obras que dejó en Irapuato?
Las obras de Salvador Almaraz y sus murales quedaron en Irapuato y el mundo como la huella imborrable del artista
Nissandra Del Río
Irapuato.- Salvador Almaraz López ha muerto hoy. Tras de sí, deja una amplia cantidad de obras no sólo en su natal Irapuato o Guanajuato, sino en México y hasta en Cuba.
El amplio repertorio de obras de Salvador Almaraz incluye desde retratos y dibujos, hasta litografías y, por supuesto, sus famosos murales. Todos, en un compilado de 70 años de carrera artística.
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Almaraz es digno heredero de tres generaciones de muralistas que precedieron. Fue discípulo de José L Gutiérrez en el Instituto Politécnico Nacional y participó con Francisco Cornejo en el llamado ‘Rancho del Artista’.
De igual manera, fue ayudante de Rolando Arjona, Ángel Boliver y Jorge González Bocanegra. Este último muralista y escultor de talla internacional y del que se pueden observar impresiones en el trabajo del artista irapuatense.
El maestro Salvador Almaraz suma entre sus reconocimientos la medalla Diego Rivera en 1998 y el laurel de oro a la calidad pictórica en el 2004.
Murales de Salvador Almaraz
Almaraz tiene en su lista más de 40 murales. En su totalidad, ponen su nombre entre los grandes representantes de la corriente como David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco y Diego Rivera. De este último, el mismo autor llegó a considerarlo como un gran apoyo para continuar su carrera.
Las producciones monumentales de Almaraz comenzaron en uno de los salones del Rancho del Artista en 1953. No obstante, estos se destruyeron cuando también así pasó con el inmueble, por lo que continuó su trabajo en otros espacios.
Las técnicas que más ha utilizado son el óleo, el fresco, acrílicos y mosaicos con piedras naturales. Sus murales se localizan por diversos lugares de México:
- Ciudad de México
- Irapuato, Guanajuato
- Saltillo, Coahuila
- Jalapa y Tuxpan, Veracruz
- En el extranjero, en Concepción, Chile, y en varias ciudades de Cuba.
Con su técnica de piedras y mosaicos en lozas precoladas suma más de 2 mil 500 m2, entre los murales producidos en Irapuato, Jalapa, CDMX y Cuba.
Entre 1954 y 1955 dejó siete murales en la CDMX: ‘Alegoría del Vino’, ‘Danza Moderna’ y ‘La santísima trinidad’. Así como: ‘Construcción de las pirámides de Egipto’, ‘Danza de México y alegorías del vino’ y cuatro murales en un restaurante.
Para 1957 dejó tres murales en Irapuato: ‘La primavera’, ‘La tierra de las fresas’ y ‘El ángel’, de los que ya sólo permanecen dos. Y aunque de ahí sus pinceles se movieron a Coahuila o a Veracruz, regresó a Guanajuato con el mural ‘Los Fundadores’.
Finalmente, para el 2015 entrega su famoso obelisco en el parque Irekua.
Otras obras de Salvador Almaraz
Así como inmortalizó en retratos a presidentes como Adolfo López Mateos, José López Portillo, Luis Echeverría y a artistas como Lola Beltrán. También una caricatura de Cantinflas fue muy celebrada.
Esta la realizó cuando se estrenó la obra Yo, Colón, “se me ocurrió hacerle una caricatura como de tres metros de altura. Entonces en lugar de la escultura de Colón, estaba la figura de Cantinflas de frack, con la mano levantada sosteniendo un corazón. Además, con los calzoncillos de lunares asomándose del pantalón no bien fajado”.
Lamentablemente, la caricatura al temple se perdió, pero Cantinflas quedó muy conmovido.
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