Sábado, 11 Enero, 2025

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EL ZAPOTILLO: A LEÓN… SI ALCANZA, DICE AMLO

Opinión

Miguel Zacarias - Polvora e Infiernitos

EN POCAS PALABRAS. “Hay que invertir para hacer unos bordos y proteger a la población, y luego hay que resolver a quién beneficia el agua, lo que estás planteando, si es a los pueblos de Los Altos de Jalisco, a Guadalajara o a León, si alcanza”.

DIRECTO. Esta fue la respuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador a un cuestionamiento sobre la continuidad del acueducto El Zapotillo ayer en la conferencia mañanera.

UN HECHO. El pronunciamiento del presidente confirma que la discusión sobre el mismo se ha reactivado y que el inquilino de Palacio Nacional está abierto para que esto ocurra aunque ello no necesariamente significa que se va a concretar.

CONTEXTO. Acostumbrado Guanajuato a ir a contracorriente en este proyecto, la esperanza de que se puede reactivar se mantiene. Antes de que le plantearan la pregunta, López Obrador había dicho que este gobierno no quería dejar obras heredadas por otras administraciones en el abandono y que la intención es que se concluyan. No era solo el tema El Zapotillo pero ahí queda esa postura.

INVARIABLE. El gobierno federal parece patear el bote y llevar al límite de la no realización de la obra. Pero no hay que buscarle mucho. El presidente dijo que se pretende llegar a un acuerdo mediante el diálogo pero ya está clara la postura entendible de los pobladores de Temacapulín que no ceden a aceptar la construcción del acueducto y menos la de la cortina de la presa a 120 metros de altura.

INSISTENCIA. El propio López Obrador citó en 2 ocasiones las objeciones legales para que la cortina sea de 120 metros de altura y quede en 80 metros,

INSUFICIENTE. Este es el típico caso del dicho aquél que reza que “cuando hay para carne es vigilia”. El acuerdo que han alcanzado Guanajuato y Jalisco para el reparto del agua que venga de la cuenca del Río Verde y se almacene en El Zapotillo, inédito porque nunca antes los gobernadores de ambos estados se habían puesto de acuerdo en el tema.

EN VEREMOS. En una primera lectura del discurso presidencial, pareciera que la postura del gobernador Diego Sinhue está en desventaja y que no será fácil que León mantenga la dotación que le corresponde.

DIFÍCIL. Los técnicos han dicho que aun con la cortina a 80 metros de altura, se requeriría la construcción de bordos o muros de contención para proteger a Temacapulín, Acasico y Palmarejo de venidas extraordinarias de agua. El futuro sigue siendo oscuro.

 LA DEL ESTRIBO…

“Mira, yo no voy a opinar de Sophia, entrevista a Sophia”, repuso ayer el secretario de Seguridad del Estado Alvar Cabeza de Vaca cuando una reportera ni siquiera terminaba de formular una pregunta en la entrevista que dio ayer el funcionario estatal.

Bastó para que el secretario escuchara el nombre de la secretaria ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad para que mostrara sin ambages que no le agrada el tema.

¿Pues por qué tanta animadversión del secretario de Seguridad a su compañera de gabinete cuya misión central ha sido atemperar los obuses mediáticos que van dirigidos al dúo dinámico? Le salió del alma.

EL SISTEMA PENAL ACUSATORIO: A 5 AÑOS, EL MISMO ENTORNO

“Hoy la ciudadanía está molesta porque nos han llamado, por qué los liberan, que porque la Policía falló en un procedimiento, no es justificable. Hoy la ciudadanía exige resultados pero a todos parejos si es la Procuraduría, si son los jueces; la Policía municipal está trabajando, ya van dos bandas que sueltan, sí estoy de acuerdo en que deben de poner más atención y en eso se están capacitando, pero muchas veces los tiempos son los que los limitan porque hay una detención el momento de tener se llevan a disposición, si el tiempo se pasa ya falló la policía”.

La frase es del entonces síndico panista del Ayuntamiento de León, Luis Ernesto Ayala Torres pronunciada hace exactamente 5 años luego de que se decretó la liberación de una banda de asaltantes que operaba en esta ciudad.

La impunidad ha sido la gran queja de ciudadanos y gobernantes en Guanajuato durante los últimos 6 años.

Hace 4, el entonces gobernador Miguel Márquez comenzaba a desesperarse por el deterioro de la seguridad en Guanajuato, repartía culpas y comenzaba a hablar de la puerta giratoria que detenía a los presuntos delincuentes solo para liberarlos a las primeras de cambio.

Ese sería el argumento favorito del exmandatario hasta el cierre de su mandato para evadir los cuestionamientos sobre el incremento de la criminalidad en el estado

Ese mismo día, Márquez encabezaba una reunión junto al director de Pemex José Antonio González Anaya para dar un balance de las acciones contra el robo de combustible.

Una balacera que arrojaba 6 muertos en Apaseo el Alto y el homicidio de una menor de 3 años en Silao, obligaban como pocas veces había ocurrido en el sexenio, al entonces procurador de Justicia Carlos Zamarripa a aparecer 2 veces en una misma semana ante los medios de comunicación para hablar de estos hechos.

El entonces jefe de la Policía Federal en Guanajuato Miguel Simental lamentaba que un juez determinara que el poseedor de un arsenal que incluía armas de uso exclusivo del Ejército, podía seguir su proceso con el pago de una fianza.

Zamarripa sigue siendo el Fiscal y Simental es el responsable de la seguridad en Celaya. El entorno, ellos y nosotros lo sabemos, no ha cambiado mucho.

ZAMARRIPA Y ALVAR CABEZA DE VACA: LA INSEGURIDAD Y EL VASO MEDIO LLENO

Como pocas veces en este sexenio, los responsables del combate a la inseguridad en el estado, Alvar Cabeza de Vaca, secretario de Seguridad y el Fiscal Carlos Zamarripa aparecieron ayer en un evento de Coparmex, dispuestos a responder con más amplitud de la acostumbrada los cuestionamientos de los medios.

Dos cuestionamientos sobresalieron en las entrevistas por separado. El primero sobre la posición que ocupa Guanajuato en homicidios dolosos en el contexto nacional y de manera particular lo que ocurre en León.

Pero fue más llamativa la declaración del Arzobispo de León, Alfonso Cortés quien pese a compartir mesa con el Fiscal Carlos Zamarripa con quien charló un momento, comparó la violencia que se vive en Guanajuato con la de Tamaulipas.

Alvar Cabeza de Vaca rebatió los números que colocan a León como uno de los municipios más violentos del país de acuerdo al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

El funcionario dice que el dato es relativo porque en incidencia, León sí ocupa un lugar preponderante pero pide que sea medido por índice por cada 100 mil habitantes. Por entidades, Guanajuato es el primer lugar en números absolutos pero el sexto en incidencia.

Pero habrá que recordarle al secretario que el factor que hace que León esté entre los más violentos según ese recuento del gobierno federal es que mientras en 9 ciudades de las 15 que concentran el 27% de los homicidios dolosos a nivel nacional, han ido a la baja en el último año, en los otros 6 se manifiestan en aumento.

Es decir, la medición original no es la incidencia en el contexto nacional sino una a la que se someten los 15 municipios con más delitos de esta naturaleza.

Puede ser cierto el razonamiento de Alvar pero lo que es irrefutable es que a nivel Guanajuato, mientras Salamanca, Celaya e Irapuato han visto descender la incidencia de este delito, en León aumenta.

En otras palabras, hay algo que está ocurriendo en esa ciudad que hace que la violencia se mantenga o empeore justo cuando las cifras del estado van a la baja.

Ese es el punto clave. Desde el año pasado León ha mostrado una mayor violencia criminal. El mismo Fiscal Carlos Zamarripa ofreció en su entrevista un dato interesante: que en León, el porcentaje de homicidios dolosos relacionados con el crimen organizado, es menor que el de otras ciudades.

Alvar y Zamarripa destacaron por sobre todas las cosas la disminución de homicidios dolosos del 24% de noviembre a la fecha. El dato duro ya ha sido reconocido pero los mismos funcionarios hablaron ayer de esos hechos colaterales que hacen que la disminución en cantidad de estos delitos deba ser tomado con cautela y con reserva.

Las cifras de León, el decreto que protege a policías estatales ante eventuales amenazas y el blindaje que se perfila para colectivos de personas desaparecidas, son botones de muestra.

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