Celebran 461 años del ‘Señor del Hospital’ con aforo controlado
Yadira Cárdenas
Salamanca.- Con un aforo controlado la comunidad católica celebró los 461 años de la llegada del cristo del ‘Señor del Hospital’ a Salamanca, con una celebración eucarística encabezada por el Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, quien resaltó los tiempos difíciles que se están viviendo por la pandemia y la seguridad.
Los fieles católicos celebraron al patrono de la ciudad, el también llamado ‘Cristo Negro’, con una ceremonia realizada en su parroquia, que abrió sus puertas a los fieles que alcanzaron a entrar debido a las restricciones y a los pocos lugares permitidos, por lo que también fue transmitida por distintas plataformas digitales.
Durante la homilía el Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, habló sobre los tiempos difíciles que se están enfrentando, al igual que en otros tiempos de la historia con crisis, de dolor y violencia que parecen ahogar y debilitar, por lo no se debe de perder la fe.
“Duele el corazón ver tantos huecos vacíos en las bancas, ver poquita gente y no porque no quieren venir, sino porque las circunstancias no nos lo han permitido, pero una vez más nos reconocemos necesitados y con fe de que pronto podrán venir a su parroquia, al Señor del Hospital”.
No deben relajar medidas
Destacó que de repente pareciera que las personas están relajando la situación de la pandemia cuando no debe ser así, sobre todo en Salamanca donde fueron los primeros casos de Covid-19, por lo que invitó a seguirse cuidando principalmente en estas semanas.
Por su parte Monseñor Gerardo Velásquez Solís, recordó a Vasco de Quiroga, primer Obispo de Morelia quién llegó a la Nueva España para calmar y darle consuelo a la comunidad indígena purépecha, lastimada y herida por muchos conquistadores.
Vasco de Quiroga mandó realizar varios cristos elaborados con pasta de caña a los indígenas, y uno de ellos se quedó en esta ciudad en 1560 en uno de los templos, y fue hasta el mes de abril de 1924 que se realizó la consagración y estreno del Templo del Señor del Hospital, a donde fue trasladada la imagen y donde hoy permanece y es venerado como santo patrono de los salmantinos, el “Cristo Negro”.
LC