Javier Mendoza pone freno a liquidaciones en Celaya; buscará racionar gastos

Roberto Lira

Celaya.- Será hasta que tome posesión del cargo de presidente municipal, y a través de una reestructura de los recursos humanos del gobierno municipal, que Javier Mendoza Márquez defina el gasto que se realizará en finiquitos, pero aseguró que se buscará ser más eficientes con el recurso.

Para este año, la administración municipal de Celaya dispuso de un recurso de 15 millones de pesos para finiquitos de personal que se diera de baja a lo largo del año, además, de considerar que durante el cierre de la administración se tiene que finiquitar al ayuntamiento y posiblemente a los 16 directores de área, así como otros puestos de confianza.

Al respecto, el alcalde electo señaló que al tomar el cargo se realizará un proceso de análisis para generar propuestas de mejoras en la estructura humana de la administración municipal con el objetivo de ser más eficientes, por lo que en ese momento se decidirá el monto de la partida que deberá se ser utilizada.

Asimismo, destacó que el gasto en la nómina municipal es muy alto para el municipio por lo que debe haber una reestructura de la misma.

“Las cargas al erario que derivan del Capítulo 1000 (nóminas y prestaciones) son ya muy altas para el municipio, por lo que es necesario entrar a una reestructura profunda para hacer más eficiente el uso del recurso y poder destinar una mayor parte de él a programas que impulsen el desarrollo integral de los celayenses y del municipio”, comentó Mendoza Márquez.

De la misma manera, señaló que el presupuesto para finiquitos de este año fue asignado por el ayuntamiento en funciones y no solicitó incrementar o disminuir esta partida por respeto a las funciones del cabildo actual, sin embargo, una vez que rinda protesta se realizarán las acciones correspondientes.

En ese sentido, enfatizó que es necesario estar en funciones para realizar los análisis pertinentes y tomar decisiones en favor de la eficiencia presupuestal, por lo que por ahora no tiene considerado el número de bajas de empleados que habría en su gobierno.