Martín cambió su trabajo por pepenar cartón y ahora gana un mejor sueldo
Luz Zárate
Celaya.- Martín Ramírez Lara de 39 años de edad, trabajaba como empleado en un negocio pero sólo ganaba 180 pesos al día y eso no le alcanzaba para vivir, por lo que decidió dedicarse a la pepena de basura y venta de pet y cartón, en donde en un día malo alcanza a sacar unos 300 pesos diarios.
Caminar durante todo el día varios kilómetros, bajo el fuerte rayo del sol y empujando un pesado triciclo no es fácil, pero de esta manera Martín ha logrado obtener los recursos suficientes para sacar adelante a su esposa e hijos de 11 y 3 años. Su hijo padece crisis convulsivas y es con la pepena y venta de basura su fuente de dinero para ayudarlo con su rehabilitación.
“Yo trabajaba en un negocio en el que el patrón me pagaba 180 pesos diarios, no me daba seguro y la verdad no me alcanzaba, por eso me iba por las tardes a recoger cartón o plástico o cualquier cosa que se pueda vender. A veces uno anda recogiendo lo que se puede de entre toda la basura y otras me regalan el cartón en las tiendas, diario es diferente, a veces depende hasta de la suerte pero incluso en un día malo gano más que cuando estaba en un trabajo fijo”, contó.
Actualmente no se tiene un censo de cuántas personas se dedican a la pepena y separación de basura y venta de material reciclable, pero a decir de los pepenadores cada día son más personas porque les deja más dinero y además se ayuda al medio ambiente.
“Esta es basura que no va a parar al basurero, estamos ayudando al medio ambiente y nos ganamos un dinero de manera honrada, hay tantos rateros y gente que se gana la vida haciendo cosas malas, yo al no alcanzarme me decidí a dedicarme a buscar cartón y pet y gracias a Dios con el trabajo de una semana saqué los reyes de mis hijos”, platicó el hombre.
Los orilló la pandemia
Aunque muchos no eran pepenadores hasta antes de la pandemia, su situación económica y la falta de empleo los orilló a encontrar en la basura una manera de subsistir en esta contingencia sanitaria.
Incluso hay a quienes no les preocupa el coronavirus y seleccionan la basura sin usar guantes, cubrebocas y lentes de seguridad; otros sí temen y saben que el virus puede estar entre los residuos que reciclan, pero cuentan que “no les queda de otra”, pues pepenando y vendiendo cartón y pet ganan más que en un trabajo establecido.
Las colonias que tienen una alta participación en separación son la Ejidal y Monte Blanco, donde cuatro de cada diez personas realizan la separación de residuos.
EZM