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Alfeñiquero Javier Barreto dedica artesanía a su esposa fallecida en la pandemia

El alfeñiquero Javier Barreto de Irapuato, dedicó esta temporada su esposa, quien falleció durante la pandemia del coronavirus
Irapuato

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Alfeñiquero Javier Barreto dedica artesanía a su esposa fallecida en la pandemia

El alfeñiquero Javier Barreto de Irapuato, dedicó esta temporada su esposa, quien falleció durante la pandemia del coronavirus

Nancy Venegas
Irapuato.-
Como un homenaje a su esposa, que falleció en la pandemia por coronavirus, junto a sus 4 hijos, el profesor Javier Barreto Flores, continuó con el legado de su familia y elaboraron 2 mil alfeñiques. Su creatividad y dedicación provocó que las figuras azucaradas rebasaran las fronteras de la capital fresera para ofertarse en ciudades michoacanas, queretanas, jaliscienses y en la CDMX.

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Siguiendo la tradición de su familia política, hace 36 años el profesor Javier Barreto, empezó con la producción de alfeñiques, ayudaba a sus suegros y esposa a amasar, pintar y decorar las figurillas de azúcar. Con el paso de los años perfeccionó la técnica y capacitó a sus hijos Javier, Omar, Kimberly, Iván y Gerardo, quienes continuaron con el oficio.

“Ya no tenemos a mi esposa que es la fundadora en la elaboración de esta artesanía, se nos adelantó en esta pandemia, pero aquí estamos la familia siguiendo su tradición, su legado para enaltecerla. Ella heredó una cosa muy bonita a mis hijos y ella sigue elaborando de alguna forma los alfeñiques”, compartió Javier Barreto.

Su artesanía traspasó fronteras

Los 2 años anteriores, debido a la contingencia sanitaria por Covid-19, fueron complejos para la familia Barreto porque la afluencia de personas a la Plaza del Comercio Popular, donde ofertan sus productos, fue muy escasa, pero este 2022, desde febrero pasado, iniciaron la producción de alfeñiques.

Javier Barreto explicó que por tratarse de una artesanía, donde ningún aparato ni máquina tienen lugar, junto con sus hijos se organizan para amasar la mezcla de azúcar glas, huevo y agua, después montar y luego decorar los alfeñiques. Este año realizaron 2 mil figuras azucaradas, entre catrines, catrinas, réplicas en miniatura de platillos típicos mexicanos, helados, frutas, animales, entre otros.

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El talento de la familia Barreto traspasó las fronteras de Irapuato, sus alfeñiques se ofertan en ciudades de Michoacán, Jalisco, Querétaro y CDMX.

“La recuperación económica está en todo su apogeo y nosotros seguiremos con este legado que nos dejó mi esposa”.

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