El CRIT, un faro de esperanza para miles de familias en Guanajuato desde hace 20 años
Irapuato, Guanajuato.- La cultura de inclusión en Guanajuato tiene un antes y un después tras la llegada del Centro de Rehabilitación Infantil Teletón (CRIT) Guanajuato hace 20 años, marcó la pauta para crear un ‘México Posible’ en donde la discapacidad no sea un motivo de discriminación sino la oportunidad de crecer en un entorno de amor y solidaridad.
“Son muchas historias, no solo es la historia del CRIT Guanajuato son más de 10 mil historias que tenemos que resumir para poder platicar toda la historia del CRIT Guanajuato, y casi 2 millones de servicios que hemos otorgado”, comentó el director del CRIT, Juan Francisco Rocha Ruenes.
La llegada del CRIT no solo cambio la forma de percibir la discapacidad en Guanajuato, sino que tuvo un impacto en la salud de la ciudadanía e hizo visible a aquellos que por muchos años eran obligados a vivir en el anonimato de sus hogares sin la esperanza de vivir una vida mejor.
Rocha Ruenes compartió que hace casi dos décadas la Región del Bajío fue catalogada como endémica en defecto del tubo neuronal en donde el 60% de los pacientes procedían de esta región porque había muchos diagnósticos de parálisis neuromuscular, pero se arrancó una campaña de consumo de ácido fólico, buenas prácticas alimenticias y preventivas en coordinación con la Secretaría de Salud de nivel federal y estatal, e instituciones como Provosi, entre otras y actualmente los diagnósticos son mucho menores.
Además del CRIT es parte del consejo consultivo del Instituto Guanajuatense de la Discapacidad (Ingudis), en consejos para la prevención de accidentes vehiculares, entre otros, ya que, aunque la parálisis neuromuscular es la principal condición que se atiende, también se tienen muchos niños que sufren afectaciones resultados de accidentes vehiculares y ese tema preventivo también se está atendiendo.
Para Rocha Ruenes el CRIT significa una institución de amor puro, pleno y desinteresados en donde sus colaboradores se entregan en cuerpo y alma, que no se limitan a dar un tratamiento físico, sino que van más allá para apoyar toda una familia; recordó que durante la pandemia que el centro fue cerrado los terapeutas sin tener obligación y sin que nadie les dijera iban hasta las casas de algunos niños para no interrumpir su tratamiento.
“El CRIT representa un México posible, porque es un México que sonríe que no se fija en las discapacidades y en las diferencias, se fija en las capacidades de las personas, que buscan potencializar al máximo las capacidades de su gente, de las familiares, que está siempre con los brazos abiertos y todo basado en el amor”, describió.
El CRIT también ha apoyado a familias para conseguir un mejor lugar donde vivir, tiene registrado el caso de cuatro familias que vivían en condiciones vulnerables, realiza convenios para facilitar el traslado de los pacientes y los apoya con medicamentos.
Juan Francisco comentó que en el CRIT pareciera que el tiempo no pasa, pero los niños que atendieron hace 20 años hoy ya son jóvenes profesionales, algunos con familias y todos ellos son orgullo para el centro de rehabilitación, pues como dice el fundador del Teletón, Fernando Landeros; con un solo niño que se rehabilite con uno solo el esfuerzo vale la pena, porque si ese niño fuera un hijo, eso lo cambia todo.
En estos años las historias son muchas, pero para el director del CRIT una es muy especial, ya que tenía poco tiempo de llegar a la dirección del centro y el Hito (Hospital Infantil Teletón de Oncología) de Querétaro tenía poco de haber abierto y al CRIT llegó un niño llamado Josué con un tumor en la rodilla izquierda.
José estaba programado para amputarle la pierna un miércoles, una semana antes los terapeutas del CRIT pidieron apoyo al director para ayudar al niño, y se movieron al grado que el lunes antes de la operación fue atención el HITO y le salvaron la pierna. Hoy Josué es profesionista y misionero de la Iglesia.
“El CRIT para nosotros significa como una segunda casa, es una institución primordial para nuestra vida porque hemos recibo la educación, la terapia, atención psicológica y todo el apoyo que necesitamos para que mi niña tenga un futuro mejor”, contó Miram, quien desde hace dos años trae a su hija Marian a terapia desde Abasolo al CRIT Guanajuato.
Saber que un hijo tiene discapacidad es muy difícil, narró, ya que en su familia no había nadie con discapacidad y cuando fue diagnosticada con parálisis cerebral acudió al CRIT, pero no pudo ingresar por la pandemia, pero después la llamaron y desde entonces el centro es parte fundamental para la vida de su hija y de ella misma, pues recibe todo tipo de ayuda.
Actualmente el CRIT Guanajuato atiende a más de mil 100 familias y se tiene una lista de espera de más de 90, lugares que se espera abrir pronto, pues no se tarda más de tres meses en poder ingresar, además de que la meta de recaudación en Guanajuato se superó con más de 5 millones 400 mil pesos, cuando se esperaban 4, y aunado a los apoyos gubernamentales se espera un buen año para los niños del Teletón.