Así descubrió Mike Brito a 'El Toro' Valenzuela: del campo de Silao a las Grandes Ligas

Silao. Guanajuato.- Desde las tribunas del entonces campo municipal de béisbol de Silao, el buscador Mike Brito se cruzó con el talento de 'El Toro' Valenzuela, quien fue firmado por los Dodgers de Los Ángeles y que más tarde se convertiría en el mejor lanzador que ha dado México.

Con su sombrero en la cabeza y en la mano un puro, común en su natal Cuba, en 1978 el cazatalentos llegó a México en busca de jóvenes merecedores de ser puestos en las Grandes Ligas.

Encuentro con Fernando 'El Toro' Valenzuela

Brito pisó Silao, corazón del estado de Guanajuato y territorio del Cristo Rey del Cubilete, y fue ahí donde se topó con Fernando Valenzuela Anguamea, quien todavía no alcanzaba la mayoría de edad y jugaba en el campo limero con los Tuzos de Guanajuato contra los Tigrillos de Silao, de la Liga Central Mexicana de Béisbol.

Aunque logró ser líder en ponches dentro del torneo, para ese entonces 'El Toro', originario de Navojoa en Sonora, era un deportista desconocido como tantos. Pero no fue así para Mike Brito, quien durante su escaueto desde las duras gradas de concreto puso el ojo en Valenzuela, aunque en realidad buscaba al veracruzano Alí Uscanga, un parador en corto que pertenecía a la misma novena.

Contó al hijo de la también leyenda del béisbol profesional Homar Rojas, quien lleva el mismo nombre, que la historia más grande con Valenzuela fue es el primer día que lo vio pichar en Silao:

"Llegué después del juego, fui con él y le dije 'Yo soy Mike Brito, scout de los Dodgers'. Pensé que se iba a poner sabroso, alegre...a fuerza le sacaba las palabras...nunca tenía nervios, por eso cuando pichaba no se sabía si estaba nervioso, porque no se notaba".

Y así lo relató también Víctor López Miranda, secretario de la asociación Guanajuatense de Béisbol A.C. y ex presidente de la Liga Municipal de Béisbol de Silao.

"Llegó al juego en Silao y resulta que ese día, por coincidencia, le tocó lanzar a Fernando Valenzuela...ese día lanzó un muy buen juego, ponchó a 12 jugadores de los Tigrillos y se vio en situaciones comprometidas en el juego, en donde salió airoso de manera muy fácil, entonces eso impresionó muy gratamente a Mike Brito".

No fue su velocidad de lanzamiento lo que llamó la atención del cazador de talentos, sino su capacidad de salir airoso de momentos complicados, además de su variedad de recursos para dominar a los bateadores contrarios en los momentos clave.

Una vez terminado en torneo en el bajío guanajuatense, Valenzuela fue incorporado a los Leones de Yucatán en 1979, sitio en el que en el mes de julio los Dodger lo compraron a Puebla por 120 mil dólares.

"Como era un torneo largo vinieron a jugar a Silao varias veces, dos o tres juegos por serie, entonces (los Tuzos de Guanajuato) por lo menos vinieron a jugar una docena de veces a Silao...como Silao y Guanajuato están cerca, también había relación con los jugadores (silaoenses)".

Britos llegó en la línea de autobuses Estrella Blanca, que tenía su estación a un costado de la Parroquia de Santiago Apóstol, donde incluso dormitó hasta el amanecer al no haber encontrado habitaciones disponibles en el municipio, espera que le valió ver nacer una estrella.

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