Abarrotera en San Francisco invita a sus clientes a ‘contagiarse’
Ana Ojeda
San Francisco del Rincón.- En el Covid-19, donde la mayoría ve muerte y daños, Francisco Javier Toledo Rico encuentra esperanza de vida y productividad, pues luego que durante seis meses se quedó sin fuente de ingresos y los ahorros se agotaron, decidió junto a su esposa crear su propio negocio: ‘Abarrotes, Verduras y más COVID’.
El slogan único y ad-hoc a los tiempos, “Ven y contágiate de nosotros”, ha llamado la atención de algunos clientes, de quienes Francisco cuenta: “no les da miedo, entran y dicen: ‘a ver… vamos a contagiarnos’. Casi no preguntan por qué el nombre, hoy es algo común, se ve en las noticias, en los reportes, en la vida diaria… en un futuro, ojalá nos conozcan más por nuestro servicio que por el nombre”, compartió.
En marzo del 2020, Francisco de 36 años se quedó sin el trabajo que mantuvo por 15 años y, luego, indirectamente por la pandemia, el primer periodo se prolongó y no encontró una nueva opción laboral.
Durante 6 meses, dependieron él, su esposa y sus tres hijos sólo de los ahorros que tenían, pero estos comenzaban a agotarse, por lo que decidieron abrir la tienda que cumple ya 3 meses en la esquina de las calles Pascual Aceves Barajas e Ignacio López Rayón, en San Francisco del Rincón.
Actualmente, la tienda de abarrotes registra cerca de 150 ventas al día, con el pensamiento positivo de que irán creciendo, pues integran una lista donde registran cosas que la clientela demanda y así se van haciendo de más productos.
“Queremos que el negocio sea rentable a corto o mediano plazo”, señaló.
El vaso medio lleno
La nueva historia comenzó el 14 de octubre y ahora mientras Francisco va a surtir por las mañanas, su esposa se va a dar la atención y luego se relevan, cuando antes ella se dedicaba plenamente al hogar con sus tres hijos.
“Hay personas que dicen que tener una tienda es atarse, encerrarse porque debe estar en servicio siempre, pero para nosotros es al contrario: aquí no estamos tan encerrados. Buscamos un nombre que llamara la atención y que atrajera clientes, queríamos algo distinto. Yo medio manejo la computadora y de ahí salió el logotipo”, contó.
La ubicación es un punto clave porque por el rumbo hay talleres, negocios y viviendas, así que confía en que se irá aclientando.
“Aquí estoy en la interacción con la gente, llegan y te platican, compartes opiniones y, con el tiempo, te ganas no sólo clientes, sino amigos. Eso es lo que ofrezco en Abarrotes COVID, amistad, buenos precios… estos son accesibles y hay surtido. Pronto vamos a tener recargas, accesorios de teléfono… buscamos tener atención en todo lo posible porque la competencia es difícil”, afirmó.
ndr