Diego Sinhue: disyuntivas ante la violencia
1.- Diego Sinhue: disyuntivas ante la violencia
La violencia y la inseguridad que persistieron en Guanajuato pese a la intervención de 2019 en la comunidad de Santa Rosa de Lima en el municipio de Villagrán y de la detención del líder criminal José Antonio Yepez Ortiz alias “El Marro”, colocaron al gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo en un disyuntiva.
Claro, las disyuntivas son el pan de cada día para un gobernador y sobre todo en un tema de esta dimensión, pero nos referimos a una que nació en la coyuntura de la renovación de los Ayuntamientos en 2021, tan significativa, que hoy ya vivimos repercusiones concretas de las diferentes medicinas que sus expertos en seguridad pública le ofrecieron.
En este espacio hemos dado cuenta de la puesta en marcha de dos modelos policiales.
Está la centralista que prácticamente apela a un Mando Único de facto con Alvar Cabeza de Vaca Appendini como cabeza en su cargo de Secretario de Seguridad Pública, o la alternativa que ofrecen los perfiles que salieron de la extinta Policía Federal, con la titular del Sistema Estatal de Seguridad Pública, Sophia Huett López, como su promotora.
Para que ambas apuestas se hayan puesto en marcha, necesariamente se requirió del aval de Diego Sinhue, quizá en un intento de ponerlos a competir y que al final el duelo beneficie indirectamente a la ciudadanía. El problema es que en los hechos no ha sido así, por la simple y elemental razón de que no hablamos de una negociación política, sino de la política de seguridad pública.
El gobernador bien puede tener un mapeo de los problemas y de las fuerzas responsables del orden en cada región, el tema es que ninguno de estas puede presumir de haber pacificado o al menos contenido la violencia.
Durante este 2023, municipios como León, Irapuato, Guanajuato capital o el propio Salvatierra, donde sus titulares de seguridad pública son afines a Alvar, la violencia repuntó dejando atrás los presumidos decrementos del año anterior. Incluso las desapariciones, asesinatos y enfrentamientos armados persistieron en municipios como Juventino Rosas, donde el Mando Único se instaló desde 2021.
La violencia y los delitos de alto impacto también fueron recurrentes en la región Laja Bajío, donde sus municipios especialmente reclutaron a exfederales para asumir las áreas de seguridad, con la intención de tener coordinación regional desde Celaya con Jesús Rivera Peralta. Basta decir que no se puede dar por logrado el objetivo, tras sendas masacres que cobraron la vida de jóvenes estudiantes.
En momentos de zozobra y desesperanza, las disyuntivas son las que abundan para el gobernador. Su último año, el que se irá en la memoria, está en juego.
2.- Sheffield: el costo de la soberbia
La liturgia en Morena que ubica a sus candidatos como una suerte de caudillos encumbrados -con el título de coordinadora o coordinador de la defensa de la transformación-, puede aplicar para su abanderada presidencial, Claudia Sheinbaum Pardo, pero no necesariamente en los contextos estatales o municipales.
Así se puede observar en el caso de Guanajuato, donde el resultado del proceso interno de Morena para definir su precandidatura única a la gubernatura, no sólo decidió el título para Alma Alcaraz Hernández, también empoderó al extitular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Ricardo Sheffield Padilla, como la figura preponderante de la 4T en el estado.
Como avalancha, se vinieron los desaires para propios y extraños. Sheffield ha controlado todos los procesos internos locales, incluso en aquellos municipios como Salamanca, donde sus contrarios dominan con amplias posibilidades de refrendar a Morena en la alcaldía. Más que garantizar triunfos, la premisa principal parecería que es avasallar en todo y marginar a los detractores.
De la alianza del Partido Verde mejor ni profundizamos. La coalición se dio apenas por la gubernatura y eso gracias al manotazo de Sheinbaum desde la Ciudad de México, pues nunca existió voluntad para lograrla a nivel municipal.
Pareciera que el dominio absoluto le fue concedido a Sheffield, sin embargo, la integración de un nuevo actor local en la Comisión Nacional de Elecciones, podría poner las primeras piedras. Resulta que el diputado Emmanuel Reyes Carmona fue integrado al organismo como parte de las negociaciones que entabló Claudia Sheinbaum con Marcelo Ebrard Casaubón.
Es ahora que se sabrá si desde Morena habrá al menos el cobro de un costo político a Ricardo Sheffield, quien desde ahora carga con la responsabilidad de entregar mejores cuentas que sus antecesores.
3.- Desaparecer a los desaparecidos
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador demostró que temas tan complejos como la desaparición de personas siguen fuera de su catálogo de soluciones. Borrar de un plumazo años de lucha, desesperación, resiliencia, llanto, controversia, sangre, discusiones, protestas o gestiones de las familias buscadoras, fue su última reacción ante esta tragedia humanitaria.
El censo de personas desaparecidas que emprendió el gobierno federal ya es leído como un nuevo agravio para los colectivos que nuevamente se unieron para rechazar la supuesta actualización de las cifras de personas desaparecidas. Acusaron que en realidad se termina “desapareciendo a las personas desaparecidas”.
Y es que no hay vuelta de hoja, pareciera que la única prioridad del gobierno federal, los gobiernos de los estados y las comisiones nacional y estatales de búsqueda, es administrar los resultados para encontrar a los más de 110 mil mujeres y hombres, jóvenes, niñas, niños y adolescentes desaparecidos en nuestro país.
A saber. Con el censo realizado a través de los Servidores de la Nación, se violaron los supuestos establecidos en la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda para la actualización del Registro Nacional de Personas Desaparecidas.
Ahora resulta que se reduce a 12 mil 377 las personas que dicen se ha confirmado su desaparición, pues afirmaron que no tienen datos suficientes para identificar a otras 26 mil 090, mientras que de otras 36 mil 022 “no tiene indicios para buscarlas”. No es broma, se trata de las tres nuevas clasificaciones que la 4T le ha dado a este fenómeno.
Por supuesto que esta vacilación no ayuda en nada a la situación que viven estados como Guanajuato. De hecho, este devaneo sólo beneficia a fiscales como Carlos Zamarripa Aguirre, tan mencionado por el presidente. Matizar o de plano ocultar víctimas, ya es factor común.
CONTRA RETRATO
Roberto Beltrán Zavala
No hay manera de borrar los ocho años de trabajo, pasión y profesionalismo que entregó Roberto Beltrán Zavala como director de la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato (OSUG). Fue un periodo de lucimiento al máximo nivel que terminaron por coronar una institución que ayer fue distinguida con el Premio Estatal de las Artes.
En este momento ya no importan los obstáculos, intrigas y componendas que actores como el director de extensión cultural Osvaldo Chavez Rodríguez impusieron en el camino. Al final, fue el trabajo de los músicos que engalanan a la OSUG el que prevaleció.
De hecho, ese fue un buen acto de desagravio. Los integrantes de la OSUG recibieron el reconocimiento merecidamente. Los mismos músicos que lamentaron el adiós de Roberto Baltrán, cuyo contrato no fue renovado por la actual rectoría. Los mismos músicos que han levantado la voz para reclamar condiciones acordes a su trabajo y denunciar los excesos de Chávez Rodríguez.
Para 2024, a la OSUG le esperan cambios importantes. De acuerdo con la rectora de la Universidad de Guanajuato, Claudia Susana Gómez López, se tendrán a directores invitados en lo que se toma “la mejor decisión de crecimiento” para la OSUG.
Por ahora, el trabajo de Roberto Beltrán Zavala y cada uno de los ejecutantes, es el que se mantiene intacto y persistente ante el paso del tiempo.
*Estimados lectores, el espacio de Yerbamala tomará un merecido descanso con motivo de la temporada decembrina. Nos leeremos de nuevo a partir del 8 de enero de 2024, año electoral. ¡Felices fiestas!