Sábado, 11 Enero, 2025

14 ℃ Guanajuato

Resurrección, la herencia triunfal

La Mesa del Rincón
Opinión

Leon Ruiz - La mesa del rincon

Resurrección, la herencia triunfal

Un haz luminoso encendió los colores del sepulcro vacío, resaltando la blancura de los lienzos doblados en el suelo cual mudos testigos de la sentencia sonora del ángel del señor… “¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? Cumplida la vida, pasión y muerte del Señor, hoy celebramos el día más importante del paso de Jesús en su existencia corpórea, cual síntesis de su existir: la resurrección.

Es este día el día del perdón, el día de la apertura del cielo, el día del triunfo sobre la muerte y el día del firme propósito de la vida misma, pues es a partir del significado de este día que existir cobra sentido, que el vivir tiene sustento y que morir es trascendente. Ahora ante la fragilidad del existir, que un virus evidenció, crece el valor de la pérdida de la vida, pues este mundo no es el fin, ni el objetivo sólo el preámbulo de la siguiente vida, la de la resurrección, la eterna gloria.

Este día se funde y sintetiza la pregunta existencial del ¿Quién soy? ¿De dónde vengo? ¿A dónde voy? Con este acto del Señor es entendible que antes de ser creados a su imagen y semejanza, nada éramos, que la esencia de nuestro paso por la vida está en el trascender cual bíblica herencia triunfal con el volver al Creador.

Lee también: Guanajuato resalta en transparencia de información… pero sus municipios reprueban

Cierto que hoy bajo los influjos del relativismo existencial y de la confusión de los por qués de nuestro día a día, este mundo parece perdernos en las contrariedades de los pleitos políticos de las ideologías gobernantes, en las luchas por la sobrevivencia económica, en las batallas ególatras por acumular poder y riqueza o en los vacíos que la inseguridad y la violencia a diario siembran en nuestras calles. Así, hoy los más de 500 millones de enfermos por el contagio de un virus microscópico y sus más de 6 millones de muertos durante la pandemia, nos muestran lo efímero del vivir y lo frágil del morir.

Hoy también debiera ser el día del alto en la perversa encrucijada de la vida, hoy debiéramos entender que como humanidad podemos vivir en paz, sin más guerras criminales que todo lo destruyen, que sí es posible vivir en armonía social, respetándonos todos y apoyándonos para salir adelante y progresar juntos, que sí es posible estructurar un modelo económico donde la conciliación entre el capital y el trabajo permitan a todos alcanzar su plenitud abatiendo la pobreza.

Hoy debiéramos entender que si como humanidad no somos capaces de generar modelos políticos honestos, justos, legales y transparentes, como sociedad seremos devorados por las más bajas pasiones humanas, por el saqueo, la pauperización, la explotación y el ejercicio del poder engañoso y destructor.

Hoy como humanidad debiéramos hacer un ensayo de resurrección social, donde renaciéramos a la bondad, la rectitud, la generosidad y la solidaridad, para amarnos los unos a los otros en un gesto de unión fraterna que asegure el bien colectivo, antes que perdernos en el odio y el rencor de una tercera guerra mundial.

Finalmente este día resuenan en mi memoria las palabras del viejo maestro, que piadoso nos decía: “En una ocasión que Jesús predicaba ante su pueblo, los fariseos y doctores de la ley urdieron una trampa para tratar de descalificarlo y alejar a la población que lo seguía, para lo cual uno de ellos tomó un pajarillo entre su puño y alzándolo le increpó que ya que él todo lo sabía, le dijera si lo que contenía su mano era algo vivo o algo muerto -siendo que si Jesucristo contestaba que era un ser vivo bastaba con oprimir fuertemente la mano y mostrar al pajarillo muerto, o bien si decía que era un ser muerto, con abrir la mano sería suficiente para dejarle volar y hacerle caer en mentira- a lo que Jesús con suma tranquilidad simplemente comentó: lo que en tu mano tienes, vivirá si tú quieres que viva, o morirá si tú quieres que muera, yo deseo que viva”, así hoy que aún tenemos oportunidad, Guanajuato, México y el mundo vivirán si nosotros queremos que vivan.

La sociedad será solidaria y sustentable, si hacemos nuestra vida trascendente.

Podría interesarte: AMLO responde a ONU por desapariciones forzadas y ponerlos ‘en el banquillo de acusados’

Temas