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SHEFFIELD Y ALEJANDRA: “UNIDOS” PARA NOQUEAR AL OCL

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Opinión

Editor Web

SHEFFIELD Y ALEJANDRA: “UNIDOS” PARA NOQUEAR AL OCL

NOCAUT. Toda una paradoja que, a pesar de estar tan confrontados en campaña, haya sido la coincidencia en el desaire al foro ‘Compromisos por León: primeros 100 días de gobierno’ por parte de la panista Alejandra Gutiérrez Campos y el morenista Ricardo Sheffield Padilla lo que reventó la celebración de este evento en el que participarían ambos.

SÍ, PERO… Un foro al que ya le había puesto “peros” Gutiérrez Campos aunque dejó entrever que sí estaría presente. Y tanto el argumento oficial de la panista como el de Sheffield parecen técnicamente impecables.

POLÍTICAMENTE CORRECTA. Alejandra no va porque al hacerse el foro en dos bloques de candidatos, teniendo en uno a los cinco punteros en las encuestas (cuatro hombres y una mujer) y en el segundo a los otros (cinco mujeres y un hombre), hay discriminación porque se deja al margen del más importante a la mayoría de candidatas, que por cierto nunca se quejaron abiertamente. Gutiérrez lo hizo por ellas.

CONVENIENCIAS. Finalmente la panista encuentra el salvoconducto ideal para quedar bien ante sus adversarias. Es incluyente y le preocupan las minorías, dice. ¿Reaccionaría igual si fuese abajo en las encuestas?

DADOS CARGADOS. En el caso de Sheffield, esgrimir que Humberto Ruiz, un asesor de campaña de Gutiérrez Campos (coautor del libro que presentó ayer) pone en entredicho la neutralidad del foro porque su empresa aparece entre las promotoras.  Eso también es inobjetable.

MEJOR,  NO. Pero uno puede pensar también que, luego de saber que Alejandra Gutiérrez no estaría, Sheffield se vería descobijado y a merced de Sergio Contreras del Verde y ‘los Juan Pablos’ (López Marún y Delgado). El villano favorito sería entonces él y en el peor de los mundos. Sin tener a quien cuestionar y con muchos agravios en el camino que le podrían cobrar.

CONTRASTES. Rocío Naveja seguramente entendió que el foro sin los dos principales candidatos tendría poco interés y hasta humillante sería para ella, lo opuesto a la proeza que hubiese logrado si logra reunir sólo a los cinco candidatos punteros.

LETAL. El deslinde que hicieron en su momento el Consejo Coordinador Empresarial y Coparmex del Observatorio Ciudadano como promotores de un evento que para el PAN no impulsaba la inclusión de todos los candidatos, fue el punto de quiebre que le permitió a Alejandra Gutiérrez zafarse sin complejo de culpa.

A LA LONA. La peor parte la sacan el OCL y su presidenta Rocío Naveja quien, para algunos empresarios, pecó de protagonismo porque se fue por la libre en su afán de lograr un foro selectivo. Parece ser el tiro de gracia para este organismo o, por lo menos, la sacudida que le faltaba para dejar de ser un interlocutor para las autoridades en León.

EL PRECURSOR. Y pensar que la primera voz de ataque la dio el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo hace muchos meces en una ‘banquetera’, a propósito del aniquilamiento de voces ciudadanas. Esa es una historia que merece ser contada con mayor detalle en las ‘Palabras Mayores’ de pasado mañana, para entender un poco la lógica en la que se mueven los actores de poder en León.

LA DEL ESTRIBO…

La candidata panista a la alcaldía de León, Alejandra Gutiérrez Campos invitó ayer a la presentación de su libro ‘Ciudad viva’ al demonio de la 4T: Claudio X. González, de ‘Mexicanos Unidos contra la Corrupción’ y ‘Sí por México’.

El libro es una suerte de un relanzamiento de la era del PAN como partido gobernante en León desde 1989 hasta nuestros días, solo con el trienio de alternancia en que gobernó Bárbara Botello entre 2012 y 2015 y con miras al 450 aniversario de la fundación de esta ciudad, el 20 de enero de 2026.

Y no dejó pasar la oportunidad el otro invitado virtual, Carlos Medina Plascencia para lanzar su dardo envenado al cuestionar -sin mencionarlo- el nombramiento de Juan Carlos Muñoz Márquez como presidente del Patronato de la Feria de León.

“No todos los nombramientos que se han dado en los últimos años en los consejos de los organismos descentralizados, son apolíticos. Es decir, no son personas que necesariamente conocen del sistema de agua o conocen de los diferentes organismos, parques, etcétera y que son nombramientos más con un sesgo político”.

El cuestionamiento fue clarísimo hacia la designación de Juan Carlos Muñoz, quien era diputado del PAN cuando llegó al Patronato, debatido por cámaras empresariales que hoy andan muy ‘azuladas’. Reclamo medinista al gobernador.

EL PACTO DE LA LOMA: A UNA DÉCADA DE LA ÚLTIMA REBELIÓN DEL BRONX

Fue la última gran rebelión en el PAN a nivel estatal de un Bronx que quería arrebatar el control del partido a los que siempre han mandado. Han pasado exactamente diez años desde que el doctor Ángel Córdova Villalobos fue ungido como el abanderado de este bloque a la alcaldía.

Uno de ellos, lamentablemente, ya murió; otro, cambió de partido; uno más es actualmente alcalde de San Miguel de Allende y el otro regresó a la vida profesional, aunque aspira a ser diputado federal con una nueva camiseta política.

Hace diez años, Ricardo Sheffield era alcalde de León; Luis Alberto Villarreal como senador; Javier Usabiaga, diputado federal y el propio Córdova -que fungía como secretario de Salud- se aglutinaron para ungir a este último como su precandidato a la gubernatura y competirle la nominación a Miguel Márquez.

Todos ellos conformaron el entonces llamado ‘Pacto de la Loma’, una suerte de Bronx que integraron los entonces panistas para hacerse fuertes frente al oficialismo.

Miguel Márquez no tuvo problema para doblegar a Córdova porque tenía el poder de la nómina y el apoyo del gobernador en turno. Córdova no pudo porque la militancia ya estaba apalabrada desde la nómina con quien entonces era secretario de Desarrollo Social.

De ellos tres, sólo Villarreal se mantiene en el PAN y está en la contienda por la reelección en San Miguel de Allende. Ángel Córdova y Ricardo Sheffield ya no son panistas, aunque Córdova -que es candidato a diputado federal plurinominal por Movimiento Ciudadano- mantiene canales de comunicación con Acción Nacional, mientras que Sheffield quebró puentes hace mucho tiempo.

Villarreal de hecho mantiene su sueño de ser candidato a gobernador, aunque esa opción se ve muy lejana pese al pacto que trazó con Diego Sinhue. Por lo pronto, primero debe salvar la aduana que representa el 6 de junio. Es cierto que tiene ventaja en los sondeos preelectorales, pero también que su ventaja sobre Mauricio Trejo se ha acortado a la que mostraba hace un par de meses.

El sobreviviente del ‘Pacto de la Loma’ se topó ahora en campaña con el priista que hace más de una década ganó la presidencia municipal por última vez para un partido distinto al PAN en San Miguel de Allende.

VIOLENCIA PREELECTORAL: LOS ALCANCES DE LA DESESTABILIZACIÓN

El gobernador Diego Sinhue Rodríguez admite que hay grupos que intentan desestabilizar el proceso electoral, pero garantiza que los guanajuatenses podrán votar en paz.

Pero desde el Congreso del Estado, el diputado local priista Hugo Varela Flores no ve las cosas con tanto optimismo tras el asesinado de Alma Barragán, candidata de MC en Moroleón.

“Este asesinato es la muestra de que el problema y las consecuencias son mucho más graves de lo que imaginamos. ¿Qué está detrás de todos estos asesinatos?; ¿quieren amedrentar a ciudadanos y candidatos, para que entierren la democracia que tanto nos ha costado construir a través de lustros?; ¿quieren enterrar la decisión del pueblo, por el temor a la violencia, quieren convertir la violencia política en el medio que termine con nuestra democracia?”.

Así lo dijo en el apartado de asuntos generales de la sesión del pleno del Congreso local, a propósito del lamentable asesinato de la candidata.

Un discurso duro pero sobrio, que llama la atención por su contenido, pero también por el emisor. Si hubiese sido pronunciado por algún legislador o legisladora de Morena podrían aparecer los prejuicios de que lo emite alguien del partido más antagónico al PAN.

Al hacerlo Varela Flores, priista experimentado que nunca ha sido un reventador en tribuna, la reflexión amerita una escucha porque sus preguntas seguramente nos las hemos hecho en algún momento cualquiera de nosotros.

Hugo Varela dijo que el riesgo de que la violencia política sea esa ruta para dirimir diferencias es grave y posible si se dan dos factores.

Una, que se dobleguen nuestras instituciones encargadas de proteger la seguridad, la integridad y la vida de todos los habitantes; y la otra, que se doblegue y ponga en riesgo la cadena democrática del sufragio; es decir, cuando se permita que los candidatos en contienda sean productos de la violencia o de la imposición del crimen organizado.

La primera de ellas tiene que ver con el blindaje que les corresponde a nuestras autoridades estatales y municipales. Uno pensaría que las del estado (Fiscalía y Secretaría de Seguridad estatal) son de una sola pieza, pero no sabemos las municipales. ¿Cuántas policías en los municipios tienen la profesionalización y los salarios que los blinden de la infiltración del crimen organizado?

Hugo Varela advirtió otro escenario no descabellado. Que esos mensajes y esa influencia que pretende enviar el crimen organizado vayan más allá del 6 de junio y se prolonguen al período de transición de los ayuntamientos electos que estarían a merced del poder corruptor de los malosos. Incierto y oscuro el escenario.

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