Cuca Domínguez
Salamanca.- “Un día nos tocó restaurar un niño Dios que parecía que respiraba, lo alzamos y se sentía como tibio; en otra ocasión íbamos a entregar un niño Dios que ya habíamos reparado, pero nos percatamos que tenía los pies raspados y con lodo, como si hubiera caminado”. Estos milagros ocurren en el Hospitalito del niño Dios, donde María Guadalupe González y Victoria Gallardo , restauran imágenes religiosas desde hace 14 años.
Las dos mujeres tienen una alta demanda de restauración durante todo el año, pero en este mes se incrementa porque las personas quieren que les reparen sus imágenes, sobre todo niños dioses para el arrullamiento del 24 de diciembre. Ambas son esposas de fabricantes de imágenes religiosas y aprendieron de ellos y de su suegro.
Las restauraciones las hacen de yeso, madera, patol, resina e incluso barro. En este taller les arreglan todo, incluso los arreglos provisionales que les hacen por ejemplo con silicón, se les colocan las pestañas, todo porque se les entregan como nuevos.
“Incluso la gente a veces piensa que no son sus imágenes porque quedan como nuevas, pero es debido a que se les interviene de todo, no se les cambian”, precisó María Guadalupe.
A diferencia de otros años, en este 2021 se incrementó el trabajo de reparación de imágenes, sobre soto de niños dioses.
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“Parece que aumentó la fe entre la gente porque tenemos más trabajo, casi en promedio al año se intervienen unas 200 imágenes, en su mayoría de niños dioses y se tardan hasta mes y medio por la demanda que se tiene además de laborioso porque se pega, limpiamos, resanamos, lijamos, pintamos y se detalla y entre cada proceso hay que esperar a que seque”, precisó.
María Guadalupe dijo que es un trabajo satisfactorio, sobre todo cuando terminan. En muchos de los casos son retos porque a veces llegan hechos pedazos y la gente los quiere rescatar porque son herencias familiares, porque se han restaurado piezas de más de 100, 120 años que antes eran de patol y barro.
La figura que más restauran son los niños dioses: “este creció más la fe en la gente, ahora tenemos más trabajo y el día 20 estaremos entregando todos los trabajos.
“Nuestras manos dejan huella, y año con año nuestro trabajo está en los hogares de las familias, además de las experiencias bonitas que les toca vivir. A veces cuando estamos restaurándolos y agarramos los niños Dios de la manita que tienen levantada, parece que nos agarran y el niño Dios que parecía que tenía vida, situaciones que no nos asustan, al contrario, y aquí se atiende a imágenes de todos los tamaños y los más chiquitos son los más difíciles de trabajar, lijar y pintar”, precisó.
En este centro de restauración que se ubica sobre la calle Allende en la zona centro, comienza la magia para restaurar las imágenes de los niños dioses, que estarán en los nacimientos que se instalarán en noche buena para la navidad.