Leo tardó 6 meses, pero hizo uno de los mejores disfraces del Desfile de los Locos de San Miguel de Allende

San Miguel de Allende, Guanajuato.- Leonardo Barrosa Galván tardó 6 meses en elaborar su disfraz, que sin duda fue el más alto de todo el convite del Desfile de los Locos de San Miguel de Allende. Sólo hizo un pequeño descanso para tomar agua a la mitad del camino y nuevamente se puso el arnés para seguir bailando hasta terminar el desfile.

Su atuendo media poco más de tres metros y como su grupo (Cholulocos, de la familia Espinoza) acordó que harían botargas grandes de personajes de Disney, Leonardo escogió al ave más colorida de Pixar, conocida como Kevin.

Pero no sólo fue el ave, también le integró al niño scout Rusell, protagonistas de la película UP; a través de un arnés que él mismo diseñó, Leonardo cargó con estos dos personajes durante todo el Desfile de los Locos de San Miguel de Allende.

 

“Saqué unas ideas del internet, le puse imaginación y lo echamos a andar”, dijo el joven de 27 años, quien elaboró su atuendo con una máscara de papel maché, alambrón, el cuerpo también de papel maché y forrado con plumas. Pesa entre 30 y 40 kilogramos.

Debido al calor, necesitó dar una pausa en el Desfile de los Locos de San Miguel de Allende

Confesó que dentro del disfraz sí se sentía muy elevada la temperatura y que por eso tuvo que hacer una pausa, quitarse un momento el disfraz e hidratarse para no sufrir un golpe de calor.

Mojado por el sudor y apenas con una botella de agua en la mano tras completar todo el recorrido, Leonardo Barrosa compartió que desde niño ha participado en el desfile, que desde los 9 años lo llevaban y que ahora ya se le convirtió en una pasión motivada por la tradición religiosa del convite. Junto a su grupo, desde enero pasado empezó a planear los disfraces y la temática del grupo:

“Todos le ponen mucho corazón a sus botargas”, finalizó visiblemente orgulloso de su participación.