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Despilfarra millones sindicato de UG sin comprobar gastos

Reina opacidad y manejo discrecional de recursos públicos; agota ASTAUG el presupuesto que lo que la UG le da, pero esconde facturas y contratos
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Despilfarra millones sindicato de UG sin comprobar gastos

Staff Correo

Guanajuato.- En solo seis años, la Asociación Sindical de Trabajadores Administrativos de la Universidad de Guanajuato (ASTAUG)  gastó 191 millones 652 mil pesos sin haber transparentado un solo comprobante y sin que le auditaran el manejo de esos recursos que provienen del erario.

El sindicato es liderado por Víctor Jiménez Ramírez desde diciembre de 1997 –está a punto de cumplir 23 años—, sin rendir cuentas de los recursos que la Universidad de Guanajuato (UG) le otorga cada año para la operación de la ASTAUG.

“Durante el periodo que se reporta no se tiene ningún informe de resultados de auditoría, ya que no se presentaron auditorías”, advierte cada uno los reportes trimestrales subidos al apartado de ‘Auditorías Presupuestales’, en la página de Internet de la ASTAUG y la Plataforma Nacional de Transparencia.

Así ha operado durante más de dos décadas, entre la opacidad y manejo discrecional de recursos que superan cientos de millones de pesos, y el silencio cómplice de la autoridad universitaria.

El ejercicio de recursos en 2020 es el más claro ejemplo: de los 30 millones que recibió entre enero y octubre, la organización sindical reportó que gastó

24.8 millones en ‘prestaciones y asambleas’, pese a que todas las actividades han estado suspendidas o se han efectuado a distancia, a causa de la pandemia de Covid-19.

Sin comprobar gastos

De acuerdo con el reporte de egresos y recursos ejercidos de 2015 a 2020, la ASTAUG se ha gastado 191 millones 652 mil pesos de los 193 millones 215 mil que recibió en esos seis años. Solo ahorró 1.5 millones que mantiene en dos cuentas bancarías.

Sin embargo, es imposible conocer a detalle en qué gastó todo ese capital, qué adquirió o servicios contrató, ni qué empresas fueron sus proveedores, ya que no existen reportes al respecto en los apartados de la Unidad de Transparencia, y que por ley está obligado a difundir de forma trimestral.

Tampoco existen reportes de auditorías realizadas en esos seis años.

La mayoría de los hipervínculos que están en las plantillas en Excel que la ASTAUG subió como obligaciones de transparencia, remiten al Contrato Colectivo de Trabajo o envían al usuario al menú inicial.

Por medio de una solicitud de información, correo solicitó a la ASTAUG conocer de forma detallada en qué agotó los recursos que la UG le entregó de 2015 a 2020, y en la respuesta reveló que 165 millones 799 mil pesos los utilizó en ‘prestaciones y asambleas’ (el 85% del total).

Del resto, 20.7 millones dijo haberlos empleado para gastos de administración, y 4.5 millones fueron gastos del patronato.

Sin embargo, de todos estos egresos no existe ningún comprobante en los reportes que como sindicato está obligado a transparentar en su portal de internet ni en la Plataforma Nacional de Transparencia.

De intendente a líder vitalicio 

El ascenso de Víctor Jiménez Ramírez a la dirigencia de ASTAUG se dio de forma vertiginosa.

En marzo de 1979 inició su relación laboral con la UG, cuando entró a trabajar a la Prepa Oficial de Guanajuato como intendente –lavaba baños, salones y pasillos—, y en sólo dos años estaba ya como encargado de la supervisión de docentes, alumnos y documentos.

El 6 de diciembre de 1997 consiguió que lo nombraran Secretario General de la ASTAUG, cargo que ocupa hasta hoy.

En el directorio de la UG, el líder de la ASTAUG fue acomodado como Director Administrativo de Recursos Humanos, con un sueldo mensual de 89 mil 558 pesos –más de un millón al año-, aunque no realiza esas funciones.

Tiene además dos vehículos asignados que son de la UG, así como apoyos para gasolina y otras prestaciones.

El 22 de noviembre de 2018 fue reelecto para su séptimo periodo al frente de ASTAUG.

En aquella última elección, el candidato de la otra planilla, Antonio Manuel García, advirtió que impugnaría los resultados por la compra de votos que hizo Víctor Jiménez, con dinero y con el otorgamiento de créditos, y exigió que se realizara una auditoría a las finanzas del ASTAUG.

EZM

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