Sábado, 11 Enero, 2025

10 ℃ Guanajuato

Diego Sinhue: Violencia, castigo de la 4T y sucesión a la vista

Este sexenio en Guanajuato, como el de Andrés Manuel López Obrador en lo federal, se perfila para ser el más violento de toda la historia
Vida Pública

Jorge Luis Ramos Perez

Diego Sinhue: Violencia, castigo de la 4T y sucesión a la vista

Este sexenio en Guanajuato, como el de Andrés Manuel López Obrador en lo federal, se perfila para ser el más violento de toda la historia

Staff Correo

Guanajuato.- 2022 cierra para Guanajuato y el panismo gobernante, con la certeza de que es y seguirá siendo el estado desairado por excelencia del presidente Andrés Manuel López Obrador que lo dejó claro en 2 flancos muy concretos: las permanentes críticas a la inseguridad y el desdén hacia las solicitudes reiteradas del gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo para atender temas muy puntuales de la agenda cotidiana, concretamente, la del agua potable para León.

Pero es esa misma calidad de bastión que mantiene Guanajuato como una de las pocas entidades en donde Morena no puede todavía calar como ocurre en otras la que ha propiciado que la clase gobernante se endurezca y el propio jefe del Ejecutivo apuntale un control político exacerbado que limita y condiciona los contrapesos políticos y sociales.

Lee también: Con tanto programa social de AMLO, ‘vendrá la resaca’: advierte Diego Sinhue

En el preámbulo de las definiciones político-electorales, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo no tiene reparo en convertir a su partido en en un simíl del viejo PRI en donde las decisiones más importantes las toma una persona.

De esta forma, no solo pinta su raya frente a la 4T sino ante la posibilidad de que su propio dirigente nacional, Marko Cortés se apropie de la decisión de definir quién será la candidata a sucederlo.

Marko Cortés y Diego Sinhue. Foto: Especial

Así las cosas, el cierre de este año se mueve en un círculo de 3 pistas. La inseguridad que mantiene a Guanajuato (más allá de la mala propaganda de la 4T) como uno de los estados más violentos del país; la resistencia del gobierno panista al asalto que prepara la 4T para al menos limitar la hegemonía blanquiazul en esta tierra y la batalla aparte de Diego Sinhue para definir un candidato o candidata a sucederlo que le garantice ya no digamos, poder transexenal sino al menos, tranquilidad laboral en el corto plazo a los de su grupo compacto.

Seguridad: discursos parciales y gastados

En temas de seguridad, el gobernador ha promovido la narrativa de la disminución de los homicidios dolosos en este 2022 con respecto a 2021 y con mayor razón, frente a 2020 que fue el año más violento en México. Ese es un dato cierto pero parcial; en todo caso refleja que tras el pico de violencia que padeció nuestro país, la tendencia viene disminuyendo.

Pero hay un dato también incuestionable: este sexenio en Guanajuato como el de Andrés Manuel López Obrador en lo federal, se perfila para ser el más violento de toda la historia. Más que el de Miguel Márquez, más que el de Juan Manuel Oliva. Punto. En el mejor de los casos estamos en los niveles del arranque del sexenio.

El otro tema justo tiene que ver con los datos colaterales que acompañan a la violencia. ¿Se está realmente ganando la guerra a los grupos del crimen organizado? ¿La detención del “Marro” significó la extinción del cartel Santa Rosa de Lima? ¿Se ha minado la presencia y despliegue de otros grupos criminales en el estado?

Guanajuato sigue siendo una de las entidades con más policías asesinados; con más mujeres y menores de edad víctimas de la violencia. El crimen organizado ya arrebató la vida al hijo del alcalde de la tercer ciudad más poblada del estado.

Foto: Martín Rodríguez

Pese al encomiable esfuerzo que representa Planet Youth, el mercado de las drogas y de las adicciones está lejos de extinguirse y es el mejor caldo de cultivo para la violencia rampante.

Y en ese círculo vicioso perverso, Guanajuato es colocado desde Palacio Nacional de manera permanente en el banquillo de los acusados pero también de los castigados. Lo primero es mala fama. Ganas de ver del presidente la paja en el ojo ajeno. Un mucho de hipocresía.

Agua para León: tema pendiente

Lo segundo es más preocupante. En la lógica del gasto y prioridades de la 4T, Guanajuato es prescindible. Hasta algunos estados gobernados por el PAN tienen mejor trato que el nuestro. Jalisco tuvo su plan de agua. Nuevo León, también. El gobernador Diego Sinhue hubo de rogar por un plan alterno de agua potable para León luego del esquinazo con El Zapotillo.

Y ya logró poner sobre la mesa el plan para llevar agua a León de la presa Solís. No es poca cosa aunque quizá solo alcance para que la Federación “se acuerde” de Guanajuato y ponga recursos para el proyecto ejecutivo antes de diciembre de 2024.

Otro sexenio sin agua para León. Este, sí por castigo luego de 3 años de negligencias, desinterés, egos y corrupción. Guanajuato es castigado presupuestalmente. Paga el pecado de ser el patito feo para la 4T.

Presa Solís. Foto: especial

Panismo se arraiga en Guanajuato

Y bueno, al final de cuentas, está por llegar a la otra orilla de un sexenio de ignominia en el que parece que al panismo le alcanzará para retener la plaza aunque no con la suficiencia de 2018, más provocado por su propio desgaste que por aciertos de los otros.

Por eso, Diego Sinhue que no era el delfín original de Miguel Márquez y que llegó a gobernar sin un grupo sólido, experimentado y de empaque, se vuelve duro como jefe de facto de su partido.

Es probable que su primera opción de delfín no termine de cuajar. Jesús Oviedo es un político ecuánime y sin ansias de protagonismo. Tanto que esa virtud se convierte en defecto y no parece entusiasmar. No está descartado.

Alejandra Gutiérrez, la alcaldesa de León, todos los días, con sus acciones y gestos, dice que quiere y no solo eso sino que se abandona al padrinazgo del dirigente nacional Marko Cortés quien ya se topó con Diego Sinhue y su mensaje de que el dedazo se emite aquí.

Te puede interesar: ‘No es tiempo’, aclara Ale Gutiérrez ante rumores sobre ir por la gubernatura de Guanajuato

Libia Denisse García, la secretaria de Gobierno, podría sacarse la lotería en ese pequeño caos. Tiene tablas aunque sus vínculos históricos llamen a la desconfianza de un gobernador que quiere pasar a la fila de los exmandatarios sin sobresaltos ni revanchas internas.

Foto: Especial

Son estos cabos sueltos los que mantienen vivas las esperanzas de cazagoles de la política como Luis Ernesto Ayala que ya van en su cuarto aire y no descartan gol de último minuto.

Quizás te interese:

JRP

Temas