Arriesgan pepenadores su salud para sobrevivir
Luz Zárate
Celaya.- José Juan Sánchez, todos los días camina durante seis horas y busca dentro de los botes de basura alguna botella o lata que pueda pepenar para luego vender.
Tiene tres años siendo pepenador y no teme contagiarse de covid-19 pues su necesidad de obtener un poco de dinero es más grande que el temor de enfermarse.
Todos los días, en toda la zona centro hay decenas de personas que buscan en los botes de basura algo que puedan vender.
José Juan, de 56 años, diario hurga entre los restos de comida y demás residuos, pues de entre toda la basura siempre hay algo que le puede servir. A la semana logra unos 400 pesos, que no es mucho pero le sirve para cubrir sus gastos y los de su mamá.
Así como él, decenas de personas se dedican a pepenar, algunos porque se quedaron sin trabajo a raíz de la pandemia y otros que ya se dedicaban a ello, pero todos han encontrado en el reciclaje y venta de pet una manera de ‘sobrevivir’ y obtener ingresos.
Aumenta número de personas recolectoras
El director de Servicios Municipales, Álvaro Rivera Rangel opinó que no hay una cifra exacta de las personas que se dedican a pepenar basura, pues es una actividad en que la mayoría lo hace por su cuenta y libremente, pero a raíz de la pandemia son más personas que se encontraron en esto un medio para tener ingresos económicos.
Desde siempre ha existido la pepena pero a raíz de que inició la pandemia por el coronavirus covid-19, aumentó el número de personas que buscan entre la basura algo qué comer o que les sirva para vender.
Hay a quienes no les preocupa el coronavirus y seleccionan la basura sin usar guantes, cubrebocas y lentes de seguridad; otros que aseguran que ahí no hay residuos hospitalarios o de enfermos que tengan coronavirus; y otros que sí temen al nuevo coronavirus SARS-CoV-2 y que saben que el virus puede estar entre los restos de comida, plástico, ropa, cartón y objetos que reciclan.
“Invitamos a la población que se dedica a pepenar a extremar sus precauciones; puede pasar que una botella de pet haya sido usada por alguien contagiado. Sí entendemos que muchas personas viven de esto, pero implica un riesgo para ellos”, dijo el director de Servicios Municipales.
EZM