“Mi mamá soñaba que fuera médico”: Las seis historias de los estudiantes asesinados en Celaya
Los cinco estudiantes de la Universidad Latina y Giovany guardaban vínculos de amistad y familia
Celaya, Guanajuato.- “Ayer mi mamá andaba viendo una serie donde salía un doctor con su pijama y su gorro y me dijo que cuando me viera vestido así iba a llorar de felicidad porque siempre fue su sueño estudiar Medicina y que si su hijo lo hace, le alegra más que ella”.
Así fueron las palabras fijadas por Eduardo Freire en su perfil de X (antes Twitter) en diciembre del 2019. Hoy, el sueño de su madre que él dejaba plasmado como motivación para continuar su carrera y graduarse como pediatra no podrá cumplirse. ¿La razón? Eduardo es uno de los seis jóvenes asesinados cruelmente en Celaya.
Peor aún, el sueño apagado de la madre de Eduardo se suma al de cinco víctimas más que fueron abandonadas sin vida atrás de la Universidad de Guanajuato. Estas son sus historias.
Pedro y Jesús Mateos, más que primos: familia unida
Casi no hay fotografía que Pedro y Jesús Mateos no compartan. Abrazados, sonrientes y con la esperanza del futuro en sus rostros, compartían casi cada aventura.
Jesús, apenas un poco mayor que Pedro, era el vínculo que enlazaba a los cinco estudiantes de la Universidad Latina de México. Más aún, su habilidad para hacer amigas y amigos iba más allá de eso y así es como Giovany Juárez también se volvió parte de la camaradería.
Pedro y Jesús compartían un gusto notorio por el futbol. El Barcelona y Cristiano Ronaldo era un interés común entre los primos, pero no era el único: la medicina, más que una meta era para ellos un estilo de vida y así caminaban firmes para lograr su graduación.
Aunque el camino se bifurcara una vez que Pedro se fuera a Pediatría junto con Eduardo Freire y Jesús continuara como cirujano junto con Bryan, los cuatro surcaban el día a día en busca de consumar el sueño por ellos, sus padres y su ciudad.
Pero el sueño terminó con una bala.
Las risas y pláticas que compartieron quedan grabadas solamente en esas imágenes infinitas de sus aventuras. Pero su legado vive en la lucha.
Pablo Fabián Mateos: padre, amigo y familia
Fabián Mateos era el quinto nombre que completaba el grupo amigo-familiar. Ya por sus 30 años, era el mayor del grupo y el único padre de familia.
El nacimiento de sus hijos fue el evento que marcó su vida y no dudaba en presumirlo.
Como médico de Fase I, no es de extrañar que buscase en ese sueño dar sustento a su querida familia. Pero entre el ajetreo del día, encontraba tiempo para vivir plenamente su afición por el futbol.
Venía de familia: el amor por el Barcelona era uno de los vínculos que compartía con su joven hermano Jesús y su primo Pedro. Los tres eran fieles seguidores del equipo español, divertidos y listos para sumar su talento a la medicina.
El asesinato de Pablo hoy deja una huella imborrable en la familia Mateos y la pregunta en el aire: ¿qué será ahora de sus pequeños hijos?
Bryan Amoles, un total aventurero
Aunque Bryan Amoles compartía un fuerte vínculo de amistad y compañerismo médico con la familia Mateos, él tenía su propio sendero. El joven estudiante de la Universidad Latina tuvo su marcada afición con el ciclismo.
Junto con su familia, de más joven transitó durante diferentes carreras e incluso ganó reconocimientos por ello.
Bryan, como todo joven de su edad, compartía el gusto por las historias del Universo Marvel. Especialmente, su interés por Spiderman destaca. Como él, estudiante y héroe, entregaría en su vocación de la medicina su granito de arena por la sociedad.
Tras su asesinato, ahora la alegría y determinación de Bryan viven en esa lucha que sus compañeros estudiantes plasman en marchas. “Spiderman, vuelve a casa...”
El misterio de Giovany Juárez
Hasta más de 24 horas después de su hallazgo y casi 36 después del hecho, las autoridades confirmaron que Giovany Juárez era la sexta víctima de la masacre en Celaya. El misterio que gira en torno a su identidad invade todos los campos.
De Giovany sólo se sabe que era amigo de Pedro y Jesús. Sin embargo, no guardaría el mismo vínculo con Bryan, Pablo ni Eduardo.
Por la FGE Guanajuato sólo se sabe que Giovany Juárez no era estudiante, pero nada más. Entre los datos concretos sobre su muerte, también destaca que fue la única víctima localizada en un lugar diferente a las demás: un camino más adelante de la Universidad de Guanajuato.
Cuando encontraron el cuerpo de Giovany, se dijo que presentaba visibles huellas de violencia y más de un disparo de arma de fuego. No obstante, el motivo por el que estaba junto con los demás estudiantes, así como más datos sobre su identidad, son aún un misterio.
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