Acueducto de Pastita renace como centro cultural independiente de Rocío Sánchez

Guanajuato, Guanajuato.- Un lugar en ruinas y abandonado, con vestigios del acueducto de Pastita, se convirtió en un sitio lleno de vida. Se trata del centro cultural independiente ‘El Viaje de la Consciencia', que dirige la artista plástica Rocío Sánchez y su hijo Julio Sahagún Sánchez.

En el jardín, con los muros del acueducto, sobresalen obras de arte y un taller de pintura y escultura. En una charla con Periódico Correo, Rocío Sánchez señala que el objetivo de este proyecto es lograr una repercusión positiva en la comunidad.

“Es una experiencia muy interesante, el Viaje de la Consciencia, estoy convencida que a través del arte podemos transformar nuestros horizontes, nuestra manera de percibir el mundo, nuestra manera de ser y estar en él”, dijo Rocío Sánchez, quien desde hace 50 años se dedica al arte, al aspecto creativo.

Para crear este lugar, primero es un compromiso con ella misma y después con el arte.

“El arte debe de estar al alcance de todos”, destacó.

Durante la visita de Periódico Correo al centro cultural, Rocío Sánchez imparte un laboratorio de realidad mixta a dos estudiantes, un experimento plástico sobre una mesa.

Este lugar también albergará los tesoros que ha rescatado Arturo Vivanco y Julio Sahagún, en diversos cerros de Guanajuato, consistentes en monedas, joyas, anillos, crucifijos, balas de mosquete de diversos calibres, armas, y utensilios, que han sido localizados con un detector de metales.

Pero volviendo a Pastita, cualquier persona que se interese en visitar el centro cultural independiente lo puede hacer solicitando una vista guiada, a través de las redes sociales del centro.

 

 

De acuerdo con diversas publicaciones sobre la artista plástica Rocío Sánchez, ella afirma que su vida de artista ha sido un largo y constante gozo; y está plenamente segura de que la decisión de convertirse en artista fue la mejor que pudo haber tomado entonces.

Desde aquel momento hasta la fecha, su vida ha estado vinculada al arte y no hecho profesionalmente otra cosa más que dedicarse a él por entero. Para ella, el arte, más allá de la trasformación de los materiales “es la trasformación de lo intangible”, “nuestro patrimonio, la historia de la comunidad, el propio espíritu”.