Desampara rector de UG a empleada embarazada quien denunció despido injustificado
Guanajuato, Guanajuato.- Desampara rector de UG a empleada, el rector de la Universidad de Guanajuato (UG), Luis Felipe Guerrero Agripino, incurrió en responsabilidad administrativa, al ignorar y no contestar una petición que le hizo una trabajadora de la Preparatoria de Silao, quien fue despedida de forma injustificada, y quien le pidió apoyo para recibir atención médica, al presentar un embarazo de alto riesgo.
La empleada fue despedida en 2019, pero obtuvo un laudo favorable y debió ser reinstalada, pero hubo un desacato de la Universidad de Guanajuato para hacerlo.
Desampara rector de UG a empleada
Desde entonces, mantiene una lucha legal para recuperar su trabajo. El 18 de octubre de 2022, Paula, empleada administrativa 01073 de la UG, envió un correo electrónico al rector Luis Felipe Guerrero Agripino, para solicitarle atención médica por un embarazo de alto riesgo y para exponerle su caso.
“Antes que nada quiero darle mis más sinceras felicitaciones por lograr tanto éxito en su vida y desearle que siga cosechando más y ponga muy en alto al municipio de Silao y al Barrio, al cual pertenecemos, donde nos vieron crecer y jugar por sus calles”, cita el correo electrónico.
La empleada le comenta que le da mucha pena escribirle en estas circunstancias, pero es su última opción después de tres largos años de una espera atroz.
“Me atrevo a escribirle solicitando una cita para exponer mi caso, del cual creo usted no está del todo enterado. Fui despedida injustamente de la prepa Silao, después de una acusación de acoso sexual, realizada por una servidora en contra de mi entonces jefe, y llevo 3 años en juicio”, le explica.
Agripino no responde mensaje de empleada
En el mensaje le expone que en marzo de 2022, la Junta fallo a su favor, pero que se ingresó un amparo por parte de la Universidad de Guanajuato. Asimismo, que en el mes de septiembre se le otorgó la reinstalación. No obstante, le fue negada por parte de las autoridades de la ENMS Silao,
“con bastantes errores en su momento y sin justificación alguna”.
Paula le escribe al Rector Agripino, que su urgencia por hablar con él es porque en ese momento se encontraba con 17 semanas de embarazo y le fue diagnosticado como de alto riesgo.
“No cuento con un servicio médico para revisión, por lo que la cita es para solicitarle se me apoye con el servicio médico a mí y a mi bebé, ya que es urgente y el servicio médico que recibo en el Hospital General carece de mucha atención”, cita la petición.
Empleada UG busca cita para exponer su caso
La empleada le pide por favor, darle una cita para poder exponerle su caso, y entregarle pruebas “de muchas cosas que usted desconoce”.
“Apelo a que como usted sabe, los dos provenimos de un barrio del cual es un poco difícil de salir adelante, es conocido por ser un barrio complicado, pero que cuando uno de sus integrantes necesita apoyo siempre estamos para apoyar, que podremos salir del barrio, pero nunca olvidaremos lo que ahí vivimos”, cita la petición.
Concluye que: “nos costó mucho trabajo estudiar y vender comida frente a la prepa en una caseta de la Coca junto a mi madre, donde viven mis abuelos, a tocar puertas para lavar trastes, o hacer mandados por 100 pesos de aquellas épocas, donde por querer estudiar una licenciatura tuvimos que trabajar duro y con mucha limitación. Esperando que se acuerde de mí, espero una respuesta favorable”.
Rector incurre en responsabilidad administrativa el Rector General, como co-representante legal de la UG, es responsable de las relaciones de trabajo y como servidor público, incurrió en responsabilidad administrativa al no contestar a la petición que le fue elevada por la trabajadora, por correo electrónico.
Desampara rector de UG a empleada
Es responsable porque el artículo 3 fracción VII de la Constitución General consagra el derecho laboral de los trabajadores académicos y administrativos de toda Universidad Pública y prescribe que sus relaciones de trabajo entre sus trabajadores y las universidades públicas, se regirán en términos del artículo 123 Apartado A de la propia Constitución.
Así también, los artículos 353 J al 353 U de la Ley Federal del Trabajo regula como trabajo especial la relación de trabajo entre las universidades públicas y sus trabajadores académicos y administrativos.
El artículo 19 de la Ley Orgánica de la Universidad de Guanajuato establece que el Rector General es la autoridad ejecutiva superior de la Universidad y ostenta la representación legal de la misma. Luego entonces, el Artículo 52 de la misma Ley establece que las relaciones de trabajo entre las universidades públicas y su personal académico y administrativo se regirán por lo establecido en el artículo 3 y 123 Apartado A de la Constitución General de la República.
El Artículo 1 del Reglamento de Responsabilidades en el Entorno De la Universidad de Guanajuato, establece que los integrantes de la comunidad universitaria, -entre ellos el Rector General- pueden incurrir en responsabilidades administrativas, en términos del artículo 63 de la Ley Orgánica De la Universidad.
El Artículo 8 de la Constitución General establece que todos los servidores públicos tienen que respetar el derecho de petición. Al ser la Universidad de Guanajuato, una Universidad Pública, el Rector General tiene el carácter de servidor público, luego entonces, tiene la obligación de dar respuesta a la petición que le elevaron y al no haberlo hecho, incurrió en responsabilidad.
Tiene obligación de contestar, máxime que él es quien extiende los nombramientos a los trabajadores administrativos y académicos.
Denuncia acoso empleada y la despiden
Acoso sexual marca despido injustificado: “Que rico hueles, a qué hora sales por el pan”, fueron frases que poco a poco fueron subiendo de tono, por parte del coordinador administrativo de la preparatoria de Silao, Alejandro N. en contra de Paula.
Esto ocurrió en el año 2019. A la par, se le daban indicaciones para realizar actividades y compras irregulares en detrimento de la Universidad, como la compra de unas persianas cotizadas en 104 mil pesos y que terminaron por pagar 134 mil, y que la indicación fue pagar de la misma partida.
Alejandro N. es hermano de uno de los integrantes de la Junta Directiva de la Universidad de Guanajuato. Continuó el acoso sexual y laboral, el coordinador no permitía que ella les cuestionara que las cosas que no estaban bien, por lo que ella denunció los hechos a la propia Universidad y al área de UGénero.
Un despido injustificado
Para la coartada en su contra, se adjuntaron documentos de empleados de la preparatoria que se inconforman con su trabajo y con su trato, al igual que proveedores.
Tras levantarle un acta administrativa, la corren, no le dejan hacer la entrega recepción que amerita su cargo, y le advierten que no irse de la escuela, llamarían a la fuerza pública para sacarla.
Ella denuncia las formas en que fue despedida, al Jefe de Recursos Humanos, el 30 de septiembre de 2019. Ella interpuso denuncias ante el Ministerio Público, Procuraduría de los Derechos Humanos y sigue el juicio laboral en el que busca su reinstalación.
