Taxistas de Guanajuato capital trabajan entre el miedo y la inseguridad: 'A veces ya no regresamos'
Guanajuato, Guanajuato.- Para el gremio de taxis y taxis ejecutivos, salir a las calles a ofrecer sus servicios de traslado en diferentes horarios representa jugarse su destino, ya que la violencia e inseguridad los acecha en plena luz del día.
El caso más reciente es el del taxista que logró encerrar a su asaltante en su unidad en la calle Ashland, pero a este se suma el caso de un ruletero al que asesinaron a la salida del túnel que lleva a la Alameda.
Durante un recorrido que realizo Periódico Correo con taxistas y empleados de plataforma ejecutiva, las opiniones fueron poco alentadoras.
"No sabemos a quién subimos"
Para Martin, taxista de más de 40 años, la vida le da dado la oportunidad de crear su patrimonio con su trabajo, pero afirmó ya no sale con la misma tranquilidad a trabajar como hace 10 años.
“Yo siempre salía bien calmado a trabajar así fuera de madrugada o de tarde y ahora ya no sabemos a quien subimos, cuando menos lo esperas te ponen un cuchillo o te golpean, me ha pasado solo una vez, hace siete años que me quisieron asaltar y pude salir ileso”, relato.
En palabras de Mario, conductor de taxi ejecutivo por más de ocho años, afirmó que si no fuera porque siempre carga con un bate de béisbol o un bastón, no se sentiría seguro en sus turnos nocturnos, aún a pesar de que nunca se ha visto en la necesidad de usarlos. Consideró que la autoridad los cuida, pues saben que tienen conexión directa con el 911.
“Yo siempre cargo con algo para defenderme y pues tengo años en esto, se que no es fácil y a veces hasta peligroso ir a barrios como la Venada, como Calderones, Santa Teresa, comunidades ni vale la pena, en ocasiones ya no regresa uno, pero yo confío en la autoridad, si algo me pasa, ellos deben protegernos, si no aquí traemos con que darle a los malandros”, dijo.
Por su lado, Jorge Luis, taxista recién empleado preciso que él de noche no toma rutas a Venada, El Edén, Presa de Guanajuato, Las Teresas, Valenciana ni nada fuera de la zona centro, pues el peligro incrementa por las distancias y dice no tener confianza en las personas, ya que ha visto como atacan a taxistas.
“La verdad ya no se confía en nadie, solo trabajo de día y tardes lo que salga es bueno. De noche no me acerco a barrios pesados porque luego lo asaltan a uno, ni porque Guanajuato es pequeño. (…) Para mí es un buen ingreso pero sabe uno a lo que le tira”, expreso.
Al final, Emilio, ruletero con 20 años de experiencia, destaco que nunca le ha tocado conocer un caso de asalto, robo o intento de asesinato, pero sabe que si algo sucede es porque en la capital la violencia contra los civiles se ha disparado, aún con las revisiones que hace la policía.
“Siempre ando chambeando en las noches y veo los operativos de la poli, de los tránsitos y hasta he topado al alcalde, pero eso no sirve, hay mucha gente en malos pasos y no se sabe. (…) Si pudiera cambiar de trabajo lo haría, pero no hay de otra”, señaló.
JRP