Pese a tener licencia, nueve CRUB de Irapuato violan la seguridad de los internos
Testimonios de pacientes, con sus identidades protegidas, expresando sus experiencias en los centros y la preocupación por su seguridad. Foto: Eduardo Ortega
Irapuato, Guanajuato.- En la capital fresera al menos nueve centros de tratamiento para adicciones violan los lineamientos sanitarios y de seguridad, pese a que cuenta con la licencia para operar. Esto debido a que resguardan a hombres y mujeres en sus instalaciones. La Asociación Civil Centro de Rehabilitación Unidos del Bajío (CRUB), advirtió a instancias de seguridad y salud, el grave riesgo de que ocurran delito y solicitó su clausura, pero el municipio se declaró incompetente ante la anomalía y a la fecha el gobierno estatal tampoco ha actuado, puesto que los centros siguen activos.
“Estamos hablando de unos 20 centros que están trabajando con hombres y mujeres, la situación ya la sabe la Secretaría de Salud y no han hecho nada, algunos de los centros por lo menos 9 sí tienen licencia”, dijo Nicolás Pérez titular de CRUB.
Y es que, para que los centros de rehabilitación en adicciones puedan operar con su licencia vigente es necesario que cubran una serie de requisitos, entre ellos que la atención a los pacientes no puede ser mixta, deben enfocarse a la ayuda a varones o mujeres en inmuebles separados.
Hace unas semanas, Nicolás Pérez nuevamente expuso la problemática a funcionarios municipales, para la clausura de estos centros.
“Les hice mención que, si siguen dejando trabajar esos centros de rehabilitación de mujeres con nombres, ellos están fomentando a que pase algún delito en esos centros, la Secretaría de Salud sabe bien que no pueden tenerse hombres y mujeres en el mismo lugar y sin embargo al rato que haya una violación y que diga quiénes fueron los culpables será el gobierno, porque nosotros estamos dando los reportes”.
Funcionarios municipales de las áreas de seguridad, salud y desarrollo urbano señalaron que carecen de facultades para la clausura de los centros de atención en adicciones.
“Me dijeron que solamente pueden clausurar las áreas donde detecten la negligencia como la cocina, las áreas donde se resguarda la medicina el centro de rehabilitación como tal no… Yo les mencionaba yo que lo que están verificando son las personas, seres humanos, no cualquier cosa”, comentó Nicolás Pérez.
