Para Israel, la vida ‘no tiene precio’; ofrece sus artículos de defensa personal


De los artículos de defensa personal, el gas pimienta es el más solicitado; los puestos que ofrecen son cada vez más solicitados en mercados locales
Scarleth Pérez
León.- Los artículos de defensa personal ya se convirtieron en primera necesidad.
En el Mercado Aldama al menos cinco locatarios ofrecen gas pimienta, manoplas, navajas, bastones, silbatos y lámparas de toques.
En el local de Israel, el gas lacrimógeno en su presentación más pequeña es la que más se vende. Ahorita está agotada, pero en una semana lo surten.
El gas más chico es adquirido para uso personal, “las mujeres son las que más lo compran”, apunta el comerciante.
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Los más grandes, los buscan los guardias de seguridad. Su precio es de 75, 85 y 100 pesos.
El gas pimienta, es el más recomendado por Israel, ya que su alcance es de tres metros de longitud.
“Tanto el chico como el grande (cubre la misma distancia), pero tiene mucho que ver el sentido del viento, el disparo puede ser contraproducente si el viento va en contra, le cae a uno”, explicó Israel.
Israel ha probado la eficacia del gas lacrimógeno en carne propia y “cala bastante”, asegura.
El comerciante, para mostrar la eficacia de su producto, prueba el tanquesito al interior de una bolsa de plástico, pero al momento de abrirla la molestia en los ojos y garganta se vuelve insoportable.
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Los silbatos, también son buscados como artículos de defensa personal. Por el momento solo tiene una pieza a la venta.

De lo que hay más variedad en el local de Israel son las manoplas y las navajas, de diferentes colores y diseños. Ambos artículos de defensa personal son buscados por hombres y mujeres.
Los clientes de Israel están balanceados.
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Las manoplas tienen precios desde los 80 hasta los 120 pesos. Las más caras son más inútiles, pues el diseño no permite un agarre seguro, “las compran de adorno”, señala el vendedor.
Se agotan
El producto que se le agota con más frecuencia, aparte de la presentación pequeña del gas lacrimógeno, son las lámparas de toques.
“El más sencillo está entre 190 y 200 pesos, y llegan hasta los 250 o 300 pesos los de mayor potencia”, indica Israel.

La potencia de los ‘Taser’ es para doblar a una persona, siempre y cuando se le pegue directo a la piel.
“Una descarga directa al cuello puede tirar a una persona”, asegura el vendedor.
El local de Israel es conocido por los guardias de seguridad por vender argollas (esposas) de la marca Smith&Wesson, con un valor de hasta 1 mil 200 pesos.
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También vende ‘Tonfas’ (bastón policial), bastones retráctiles de metal y cinturones de equipo táctico.

Israel y los demás locatarios frecuentemente enfrentan desabasto en sus productos de defensa personal, pero cada semana surten.
No saben con exactitud cuándo aumentó el interés por estos productos, pero ya tienen más de 5 años ofertando este tipo de artículos.