Responsable sigue impune por ataque a joven autista en León hace casi un mes
León, Guanajuato-. A casi un mes del lamentable caso de Eduardo, un hombre autista de 29 años que fue atacado por los perros de uno de sus vecinos, los animales no han sido retirados por el Centro de Control y Bienestar Animal en la colonia Villas de León.
Los canes están resguardados en la calle Del Poblado #223, un domicilio que fue compartido por Periódico Correo al Centro de Control Animal a unos días del hecho. Sin embargo, hasta este 27 de junio, familiares de Eduardo informaron que los perros no han sido retirados y que significan un peligro para el afectado y los vecinos, pues los tienen encerrados en un taller, y reconocen que el estrés de su condición los vuelve “bravos”.
Tres perros atacaron al joven autista el pasado 4 de junio: dos mestizos y uno de raza pitbull. Su madre contó que ese domingo su hijo salió a sentarse a una banca, cerca de las 8 de la mañana. Cuando su vecino Oscar lo vio, abrió el taller para dejarle ir los perros, aparentemente de forma intencional.
“Un hombre me le echó tres perros, se los soltó a mi hijo para que lo mordieran. Mi hijo se sentó en una banquita y esta persona le dejó ir los perros a que lo mordieran. Lo traían en el piso, hasta lo sacudían. Es mi vecino y tiene unos perros muy bravos”, dice Martha, madre de Lalo.
Aunque no había agresiones anteriores a este ataque, los familiares de la víctima cuentan que el vecino era poco tolerante a la condición del joven. Ser autista lo habría vuelto más vulnerable al ataque, pues las cámaras de seguridad de los vecinos captaron como el dueño de los animales, lejos de quitarle a los perros, los acercó a Lalo.
Un día después del ataque, su mamá interpuso una denuncia ante el Ministerio Público, que podría proceder por lesiones dolosas, pero hasta ahora no ha habido un castigo para el presunto responsable.
Aún sin castigo vecino de joven autista de León atacado por perros
El caso fue denunciado a Control Animal, quienes aseguraron que procederían con una visita al domicilio para retirar a los canes y analizarlos por al menos 10 días, para determinar que medidas tomarían. En caso de detectar un comportamiento agresivo y sin posible remedio, podrían sacrificarlos, dijo el director y Veterinario, Emmanuel Rodríguez. Hasta el momento los perros siguen en el domicilio.
De acuerdo con la familia de Lalo, el DIF sí intervino en el caso y les donó una cama para la víctima. Lalo y su madre viven un contexto económico difícil, pues el joven autista necesita de cuidados completos. Por esta razón ella no puede tener un empleo fijo, y hace dos meses perdió a uno de sus hijos que era su sustento, un trabajador de 18 años que murió en un accidente laboral.
Para ayudar a la familia, los ciudadanos se pueden comunicar al siguiente teléfono, con la señora Martha o Lilian: 348- 147- 09- 68.