De un ‘Gallo’ con cresta de campeón a un ‘Gallito’ que regresa a la ‘media luna’ que alguna vez fue su casa
José Juan Vázquez es el ‘Gallo’
Celaya, Guanajuato.- “¡Salúdame, ‘Gallito’!”, le gritan desde el graderío a José Juan Vázquez, nuevo jugador de los Toros de Celaya. El mediocampista ‘entra al juego’ y agradece mediante el símbolo universal de ‘amor y paz’, y que puso muy de moda el político Vicente Fox a principios de los 2000.
Así será todo el compromiso en el que su equipo se medirá a Salamanca en el marcó de la Copa Grandeza. Saludo por aquí, saludo por allá. Los gritos hacia el 23 abundan… pero no son desde los astados, sino de sus ‘viejos amigos’, la afición del Club León (que esta noche jugará ante Irapuato para completar la doble cartelera).
A nadie se le puede ocultar que el ‘Gallo’ es un péndulo. Como lo ha sido siempre
Sigue los principios básicos del futbol, y que hace algunos años ‘regresaron’ a su máxima potencia a nivel mundial por medio del Barcelona de Pep Guardiola: toco y me muevo, toco y me muevo, como bien se dirigiría en el barrio. Y es el mismo péndulo que guío a los Esmeraldas en la obtención del bicampeonato durante el Apertura 2013 y el Clausura 2014.
El ‘Gallo’ se mueve igual, rota entre las medias lunas del mediocampo y su posición ha estado siempre ahí, rara vez se sale.
“Dile algo, ‘Gallo’”, reclama un aficionado tras ver que un compañero le dejó muy largo el trazo al mediocampista que era ovacionado por todos, desde la zona de preferente del dos veces mundialista hasta la cabecera Sur en donde se habían alojado los ahora suyos, la afición de los astados.
Algo ha cambiado en el ‘Gallo’
En el caso del ‘Gallito’, el diminutivo es por cariño y pertenencia. Pero también, se ha quedado a partir de su 1.65 y un poco más de estatura. Desde la tribuna, algunos le dicen ‘Gallo’… otros prefieren el alargue del apodo, que recuerda aquellas noches doradas en el mismo inmueble, cuando en compañía de Carlos Peña, Luis Montes, Mauro Boselli o Rafael Márquez, se estallaba en algarabía.
El apodo y su diminutivo no ha cambiado, eso es un hecho. Pero hay otras cosas que son diferentes en José Juan ‘Gallito’ Vázquez; los tachones ya no son de la marca francorrinconense, Pirma, sino que, el incluso exseleccionado nacional, ahora opta por unos Nike color verde pistache, que hacen juego con el césped… y su pasado.
Cuando se trata de la función de ‘péndulo’, Vázquez se mantiene en forma. Sin embargo, ahora ya no corre al cobro de faltas que antes podía repartir con Montes, Márquez o cualquier otro as con los que coincidió hace más de una década en la ciudad zapatera. Ahora, el ‘Gallito’ toma calma, rompe el esquema del péndulo e intercambia la zona del campo: se apodera de la banda izquierda y simula, casi, a un carrilero.
Al final y sin muchas emociones de por medio, su equipo celayense saldrá airoso del compromiso de apertura de la Copa Grandeza, en donde vencerían por la mínima y con un gol de Allan Steven WIk a los Petroleros de Salamanca tras los 90’ que se dividieron entre alabanzas y abucheos sobre su cierre.
El que salió airoso, como solía acostumbrarlo en el campo del Estadio León, fue el ‘Gallito’ Vázquez, que sigue sin dejar de moverse como un péndulo, mientras recupera y se adueña de las medias lunas. Es, al final, un ‘Gallo’ que mutó de la cresta de campeón a un ‘Gallito’ que, más de 10 años después, se ha mantenido el apodo en diminutivo por el cariño que le guardan todas las parcialidades: la afición de León, Celaya, e inclusive, los salmantinos.
