Luis Rubiales niega renuncia tras beso no consensuado con Jenni Hermoso; FIFA abre investigación
“No voy a dimitir, no voy a dimitir”, expresó Luis Rubiales en medio de la Asamblea Extraordinaria de España convocada para tratar el incidente


Foto: Especial
Madrid, España.- Luis Rubiales, el presidente de la Federación Española de Fútbol, desmintió el viernes las especulaciones sobre la renuncia a su posición.
El líder deportivo ha estado en el centro de una controversia debido a un beso no consensuado dirigido a Jenni Hermoso, jugadora del equipo nacional femenino de fútbol de España, que se proclamó campeona del mundo el domingo pasado.
“¿Es tan grave para que yo me vaya, habiendo hecho la mejor gestión del fútbol español? Pues les voy a decir algo: no voy a dimitir. No voy a dimitir, no voy a dimitir”, expresó en medio de la Asamblea Extraordinaria de la entidad convocada para tratar este asunto.
¿Cuál fue la polémica de Luis Rubiales con una jugadora española?
La polémica de Luis Rubiales se originó durante la ceremonia de premiación del Mundial Femenino de Fútbol, que se llevó a cabo en Australia y Nueva Zelanda, y generó inmediatamente un gran revuelo. A pesar de esto, Rubiales declaró que el beso había sido mutuamente acordado.
“El beso fue consentido. Jenni me levantó del suelo a mí y yo le pregunté por un pico y me dijo que vale”, señaló.

El líder deportivo también abordó otro incidente que le había valido críticas: en el palco de honor, justo al concluir el partido final, Rubiales realizó un gesto tocando sus genitales como una forma de celebración.
“Quiero pedir perdón sin paliativos de ninguna clase por un hecho que pasó en el palco, cuando en un momento de euforia me agarré esa parte del cuerpo que ya habéis visto”.
Después de este acto, fue recibido con aplausos por aquellos presentes en la reunión de la Federación.
Disculpas no son suficientes
Desde el mismo día en que se celebró la obtención del título mundial, las acciones de Rubiales habían sido objeto de condena. La primera en expresar su descontento fue la propia jugadora, quien durante una transmisión en vivo desde el vestuario del equipo español después del partido final mencionó que el beso “no le había gustado”.
A partir de entonces, se desató un enérgico debate en los medios y las plataformas digitales en torno a si el comportamiento del dirigente era apropiado o no.
Al día siguiente, Rubiales emitió un video en el que ofreció disculpas.
“Seguramente, me he equivocado”, expresó el presidente de la RFEF, que alegó haberse dejado llevar por la “efusividad” del momento y puntualizó que “no hubo mala fe por ninguna de las dos partes”.

No obstante, diversos sectores en España, ya estuvieran vinculados al fútbol o no, comenzaron a demandar la renuncia del dirigente. Uno de los llamados más resonantes fue el del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, quien durante una conferencia de prensa después de recibir a las jugadoras campeonas del mundo expresó: “Lo que vimos fue un gesto inaceptable”.
Sánchez agregó que las disculpas ofrecidas en el video no eran suficientes y exhortó a que se tomaran "pasos adicionales para aclarar lo que vimos", una demanda que se interpretó como un llamado a la dimisión de Rubiales.
A esto se sumó el comunicado emitido esta semana por la misma jugadora, en el que se solicitaban sanciones contra el líder deportivo.
“Estamos trabajando para que actos como los que hemos visto nunca queden impunes, sean sancionados y se adopten las medidas pertinentes que protejan a las futbolistas de acciones que creemos son inaceptables”, señaló.
FIFA iniciará investigación contra Rubiales
Además de estas reacciones, uno de los pronunciamientos más destacados fue el anuncio de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) de que iniciarían una investigación sobre la violación del código de ética por parte de Rubiales. Una de sus posibles sanciones podría llevar a su inhabilitación para ocupar cargos en entidades relacionadas con el fútbol.
Después de la declaración de Rubiales, varias personalidades comenzaron a manifestarse con respecto a su decisión de permanecer en su posición. Uno de ellos fue el ex capitán de la selección española de fútbol, Iker Casillas, quien compitió con él por la presidencia de la RFEF. Casillas escribió en su cuenta de Twitter: "Vergüenza ajena".
Mientras que, el jugador del Real Betis, Borja Iglesias, anunció que no formaría parte de la selección nacional si Rubiales continuaba como presidente. En su cuenta de Twitter, Iglesias expresó: “He tomado la decisión de no volver a la Selección hasta que las cosas cambien y este tipo de actos no queden impunes. Por un fútbol más justo, humano y decente”.
Jugadoras se solidarizan y manifiestan condena a conducta de Rubiales
La jugadora Jennifer Hermoso ha contradicho las afirmaciones del presidente de la federación, Luis Rubiales, quien había declarado que el beso que le dio fue "consentido".
Por medio de un comunicado, Hermoso expresó: "Me sentí vulnerable y víctima de una agresión. Simplemente, no se me respetó". Lamentó la falta de consideración y denunció presiones hacia su entorno, así como la actitud manipuladora de la federación. Hermoso señaló que este tipo de actitudes han sido una constante en su experiencia.
Asimismo, más de 80 jugadoras han expresado su respaldo a Hermoso y han anunciado que no participarán en convocatorias de la selección si no se produce un cambio en el liderazgo de la federación.
El Consejo Superior de Deportes (CSD) ha decidido presentar una denuncia independiente, considerando la acción del presidente de la federación española, Luis Rubiales, como una "falta muy grave", y solicitará su suspensión. Víctor Francos, presidente del CSD, afirmó:
"Vamos a suspender las funciones del señor Rubiales en la presidencia. Estamos dispuestos a que esto sea el 'Me Too' del fútbol español".
*Con información de Animal Político
MM