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Alfeñiques por el Día de Muertos, tradición que une a Celaya, Irapuato y Acámbaro

Celaya, Irapuato y Acámbaro rinden homenaje a la tradición mexicana del Día de Muertos con impresionantes altares de muertos en medio de influencias extranjeras
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Staff Correo

Alfeñiques por el Día de Muertos, tradición que une a Celaya, Irapuato y Acámbaro Alfeñiques por el Día de Muertos, tradición que une a Celaya, Irapuato y Acámbaro

Estos altares son una manifestación de la rica tradición mexicana de honrar a los seres queridos fallecidos. Foto: Correo

Guanajuato, México.- Jorge Baeza Martínez, de Celaya, tiene 50 años elaborando y vendiendo alfeñiques, es parte de una familia de artesanos que desde hace varias generaciones se han dedicado a elaborar este tipo de dulces que ofrecen previo a las festividades del Día de Muertos.

Para la edición de la Feria del Alfeñique de este 2023, Jorge espera que les vaya mejor que en años pasados, ya que durante la pandemia las ventas disminuyeron.

“Yo estoy aquí desde que estaba chiquillo, la que vendía era mi mamá y yo le ayudaba, aquí aprendí. Ahorita tenemos lo de la temporada, las calaveras, la fruta de pasta de limón, los borreguitos, las gallinas, hay mucha variedad y todo lo aprendí a hacer desde niño, mi mamá nos dejó a mis hermanos y a mí esa herencia, ella nos pidió que no dejemos morir la tradición”; platicó Jorge.

 
El Día de Muertos en Celaya e Irapuato es más que una festividad, es un homenaje a la tradición mexicana y una oportunidad para que la comunidad se una en la celebración. Foto: Correo

Y así como él, son decenas de artesanos que forman parte de la “Feria del Alfeñique” que se realiza en el Parque Morelos y que durante generaciones han perpetuado la elaboración de estos dulces que se ofrecen previo al Día de Muertos.

La Feria del Alfeñique comenzó el pasado domingo 1 de octubre y estará hasta el 3 de noviembre.

El presidente de la Asociación de Comerciantes Adolfo López Mateos, Carlos Palacios de la Cruz, informó que, en el primer día de apertura de la Feria del Alfeñique, el pasado domingo se tuvo una asistencia de alrededor de 15 mil personas.

 
Los artesanos en ambas ciudades juegan un papel fundamental en la creación de los altares. Foto: Correo


Palacios de la Cruz, señaló que en esta ocasión además de tener más días se tendrá un programa con la presentación de artistas locales.

La Feria del Alfeñique incluye a 270 expositores y se puede encontrar dulces totalmente artesanales realizados con azúcar glas, calaveritas, papel picado de colores, gallinas de azúcar glas decoradas vistosamente, pan de muerto, disfraces, maquillaje y todo lo relacionado con las fiestas de Día de Muertos y de Halloween, puestos de comida y en esta ocasión hasta una Casa del Terror se instaló.

En esta festividad sólo se instalan comerciantes de Celaya, ya que la mayoría son familias que durante décadas y generaciones han formado parte de la Feria del Alfeñique.

El horario es a partir de las 9:00 de la mañana y hasta las 10 de la noche y es una de las ferias más antiguas de Celaya.

 
El Día de Muertos en Celaya e Irapuato es más que una festividad, es un homenaje a la tradición mexicana. Foto: Correo


Carlos Palacios, comentó que esta festividad tiene 65 años y ya se ha convertido en toda una tradición, pues además de que vienen de otros municipios, acuden personas del estado de México, San Luis Potosí, Aguascalientes y Michoacán.

El líder de los comerciantes contó que la feria como tal inició en la Calzada Independencia después los cambiaron al estacionamiento de la central camionera, posteriormente regresó a la calzada y en la actualidad ya se tienen 11 años en el parque Morelos.

 

 

El Altar de Muertos de la Unión de Artesanos de Irapuato

Que la tradición no muera, la tradición de honrar a nuestros muertos con el colorido de un altar y una ofrenda de azúcar para aquellos que un día se fueron pero que siguen entre nosotros. Esa es la premisa con la que la Unión de Artesanos de Irapuato coloca el majestuoso altar de muertos en la Feria de Alfeñiques y Dulces Tradicionales.

La artesana Sanjuana Martínez creció entre calaveras de azúcar y la tradición mexicana del Día de Muertos, una tradición que a través de los años se ha ido perdiendo y ha sido sustituido por la festividad extranjera del Halloween, reconoció.

“Colocar el altar de muertos es parte de una tradición muy arraigada y mexicana, tratamos de rescatarla porque hay otras ideas en los jóvenes que viene de extranjeros y nosotros tratamos de darles a conocer y que valoren la tradición mexicana, que en Irapuato se promueva y no muera como otras tradiciones que ya no existen”, comentó.

Ella junto con fundadoras de la Unió de Artesanos y Alfeñiques de Irapuato se encargan de armar el altar de muertos, una estructura que tardan en colocar más de tres días para después colocar una a una la fotografía, en su mayoría de comerciantes, que promovieron por muchos años el alfeñique en la ciudad y que dieron origen a esta tradición entre los irapuatenses.

 
Alfeñique tradicional. Foto: Correo

El altar de muertos es uno de los puntos más visitados cuando la gente viene a la feria, incluso algunos piden colocar las fotografías de sus familiares y se acepta, pues el altar es de todos, todos colaboran para su construcción.

Contó que la mayoría de las figuras que adornan el altar están realizados por los artesanos de la unión, las catrinas de cartonería, los alfeñiques de ofrenda, el papel picado y las flores, algunos otros se tienen que comprar, pero cada comerciante participa con algo especial para colocar la ofrenda que recibirá a los muertos los días 1 y 2 de noviembre, una tradición que identifica a los mexicanos.

 
Estos altares son una manifestación de la rica tradición mexicana de honrar a los seres queridos fallecidos. Foto: Correo

En la Feria del Alfeñique y Dulces Tradicionales ubicada en la Plaza del Comercio de Irapuato hay más de 400 comerciantes, pero no todos venden alfeñiques, señaló Sanjuana, muchos hijos de trabajadores del alfeñique ya no quieren seguir con la tradición, y poco a poco se ve menos figuras de azúcar y más disfraces y productos alusivos al Halloween, es por eso que el altar de muertos es colocado en el centro de la feria, para que todos los visitantes lo vean, para que los comerciantes tengan presentes que por encima de todo la tradición mexicana debe prevalecer y no dejarla morir.

“Los alfeñiques es como la fresa en Irapuato, es identidad, es parte de nosotros, que necesita ser promovida e impulsada para que vuelva a tener el auge que se tenía con nuestros padres, y abuelos”, indicó.

Puestos de alfeñiques ‘colorean’ el centro de Guanajuato

Desde el 12 de octubre, han hecho su arribo al Jardín Reforma los tradicionales puestos de alfeñiques, con toda su variedad en sabores y formas. De 9 de la mañana a 9 de la noche, se encuentran listos para recibir a las niñas, niños, jóvenes y adultos para adquirir frutitas, gallinas, puerquitos, calaveritas y otros personajes populares hechos a base de azúcar glass y regular.

Para María Luna, originaria de Guanajuato y comerciante del lugar, la tradición del alfeñique y el Día de Muertos poco a poco se va perdiendo. Sin embargo, en la escuela donde ella labora, se ha tratado de rescatar la elaboración de este dulce típico artesanal y la tradición mexicana.

 
 

"De hecho, en mi escuela se compró azúcar y todo, para que los niños vean cómo se elabora (…). Pero sí se ha perdido un poquito con lo del Halloween. Por ejemplo, el día de mañana es puro Halloween aquí, no hay calaverita… Pero sí se ha perdido mucho esta tradición, aunque seguimos aquí como comerciantes tratando de que se recupere un poquito esa tradición de Día de Muertos”, comentó.

La elaboración de sus dulces comienza en el mes de febrero o marzo, debido al clima y al manejo que se le da al azúcar.

"Es que se vienen los tiempos de lluvia y pues no nos benefician mucho, entonces sí tenemos que trabajar con tiempo en todo esto."

Añadió que también les hacen pedidos especiales, entre ellos para baby showers.

 
 

La fruta de azúcar, las canastas, las calaveras, las catrinas, los puerquitos, los burritos, las gallinas son las presentaciones más tradicionales del alfeñique y son las que más adquieren tanto chicos como adultos. Sin embargo, cada año se innova para ofrecer nuevas presentaciones que lleguen al gusto de la gente. María menciona que los adultos ven este producto como decorativo o como artículo de recuerdo debido a su colorido y particularidad. Recalcó que, durante el desarrollo del Festival Internacional Cervantino, en comparación con otros años, no tuvieron la venta que esperaban y esperan que en estos días próximos a Día de Muertos se mejore. Al preguntarle si se recupera la inversión, comentó: "yo pienso que sí, no nos quejamos. Año con año, bendito Dios, se recupera la inversión y posiblemente se saca no la ganancia que quisiéramos, pero sí… sí se saca."

 
 

Por su parte, la señora Juana lleva quince años vendiendo alfeñique. Elabora una parte de la mercancía que vende, mientras que otra parte la adquiere, como las gallinas más grandes de azúcar, pues no tiene los moldes para realizarlos. Las calaveras, los altares de azúcar, las catrinas son los dulces que más vende, y según ella, se utilizan mayormente para poner altares. Las escuelas son un mercado importante.

"Pues todo se vende. Cuando hay venta, todo se vende. Todo esto chiquito lo vendemos a los niños de Kinder, pero este año no nos los trajeron, no sé cuál fue el motivo."

 
 

Los puestos estarán en el Jardín Reforma hasta el 5 de noviembre. En el lugar también se pueden adquirir pan de anís, cajeta, chocolates, dulces de todo tipo y hasta disfraces.

Tradición de los alfeñiques en Acámbaro: 60 Años de dulces en el altar de muertos

Hace 60 años la familia Mora inició con la venta de alfeñiques en los puestos de temporada qué se colocan la pila del Águila, tradición qué han continuado sus descendientes, actualmente 6 de los puestos de alfeñiques qué se encuentran en la Pila del Águila son de la familia Mora. 

Lidia Mora Jiménez nieta de los abuelitos Mora quienes iniciaron con esta tradición lleva varios años dedicándose a la elaboración y venta de alfeñiques oficio que aprendió de su mamá:

"Este puesto era de mi mamá, por algunos años ella se dedicó a vender los dulces ahora me corresponde a mi seguir con la tradición".

 
Detalle de alfeñiques decorados con motivos de Día de Muertos. Foto: Lourdes Juárez

A inicios del mes de agosto comenzamos a preparar los alfeñiques, contamos con algunos moldes eso nos facilita un poco su elaboración:

"Tenemos que elegir los días que no llueva mucho para prepararlos ya que como se trabaja con azúcar la humedad no ayuda a que sequen".

A decir de Lidia la ciudadanía no deja de comprar los alfeñiques para colocar en sus ofrendas y consumo la ciudadanía con toda confianza puede consumirlas ya qué son elaboradas con limpieza. Lo que más compra la gente son las calaveras ya qué son las que adornan los altares de muerto. 

 
Alfeñiques expuestos en el puesto de Lidia Mora Jiménez. Foto: Lourdes Juárez

Los días de más venta son los últimos del mes de octubre, las ventas han sido buenas igual que el año pasado. El alfeñique es un dulce tradicional qué no puede faltar en el altar de Muertos. A pesar de que el costo del azúcar aumentado en los últimos meses no hemos pensado en dejar de realizar alfeñiques. 

Lamentan pérdida de tradición en Cortazar

La feria del alfeñique en Cortázar es una identidad para este municipio, pero con el paso de los años, se han reducido los fabricantes y vendedores de estos dulces tradicionales.

La festividad por el Día de Todos los Santos es una de las más arraigadas y genera una mayor identidad para los habitantes, por eso se celebra en el recinto ferial con juegos mecánicos, presentaciones musicales, juegos de azar y otros atractivos, mientras que en el Jardín Principal es tradicional la instalación de los puestos de alfeñiques que son elaborados por las hábiles manos de cortazarenses.

 
 

María Concepción Tierra Blanca, una de las vendedoras que además pertenece a una de las familias con más tradición en la elaboración de alfeñiques, destaca que estos dulces se preparan desde mayo para empezar a hacer las primeras figuras, porque se debe aprovechar el calor de la primavera para que las piezas puedan secarse.

La mujer mencionó que desde niña su mamá le enseñó a hacer dulces y ha seguido la tradición de hacer borregos y gallinas. También se ha tenido que adaptar con otros dulces que la gente pide, como burros, brujitas, calabazas y también cazuelas con comida.

 
 

María Concepción Tierra Blanca señaló que es básico vender las gallinas y los borregos de azúcar, ya que representan abundancia. Antes, era un gran gesto que las personas regalaran algún animal entre familias, amigos, padrinos y vecinos como agradecimiento de algo, por eso estos animales se fabrican como alfeñiques.

No obstante, la artesana lamentó que esta tradición haya ido mermando poco a poco con el paso de los años. Por ejemplo, en el jardín, los vendedores ocupaban tres pasillos perimetrales y ahora solo dos. Además, las ventas eran más altas, a veces para el 1ro de noviembre ya se había agotado la mercancía, ahora dura hasta una semana para vender casi todo. Esto se explica por la falta de interés de las nuevas generaciones.

 
 

"Por ejemplo, a mis hijos ya no les gusta. Tengo tres y los tres son electricistas. De 14 hermanos, ya nada más quedamos tres y ni a mi hermano sus hijos les gusta, y mi hermana tiene sus hijos y tampoco les gusta".

Mientras tanto, la feria del alfeñique en Cortázar estará abierta para todo el público en general hasta el próximo martes 7 de noviembre.

 

**Con información de: Luz Zárate, Nayeli García, Lourdes Juárez y Daniel Moreno 

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