Celia Juárez mantiene viva la tradición de la tortilla artesanal en Comonfort
Celia Juárez, reconocida cocinera tradicional, de Comonfort. Foto: Tonatiuh Hernández
Comonfort, Guanajuato.- Celia Juárez, reconocida cocinera tradicional, ha dedicado su vida a mantener viva la tradición de la tortilla artesanal, una herencia familiar que se remonta a más de 200 años. Desde pequeña, Celia ha sido parte fundamental de esta tradición, y hoy en día, tras más de 18 años representando a Comonfort en diversos encuentros culinarios, se consolida como una de las principales embajadoras de la cultura gastronómica de su municipio.
Celia recuerda con cariño cómo, desde los cinco años, ayudaba a su abuelita a preparar la tortilla ceremonial, una práctica que ha pasado de generación en generación. Para Celia, la tortilla no es solo un alimento, sino un símbolo de compartir y agradecer: “La tortilla significa ‘comer y compartir, compartir la alegría y dar gracias’. Eso es lo que representa para nosotros”, expresa con emoción.
Explica que la elaboración de la tortilla ceremonial tiene un profundo significado. Desde niña, aprendió de su abuela paterna el arte de sellar la tortilla a media cocción, un proceso que forma parte de una ceremonia que se realiza durante la velación de la fiesta patronal. "La tortilla ceremonial no es solo por el sello o la imagen que lleva, sino por la ceremonia que la acompaña. La imagen en la tortilla refleja lo que queremos mostrar y compartir", comenta.
Celia recuerda cómo su abuela la iniciaba en el arte de la tortilla al ponerla a sellar las tortillas que serían usadas en ceremonias de la comunidad, como las fiestas del pueblo, matrimonios y quince años.
“Ella hacía las tortillas y yo las sellaba. A los diez años, aprendí a usar la prensa tortillera”, relata.
Con más de 50 años de experiencia como cocinera y artesana, Celia ha representado a Comonfort en múltiples eventos de cocineras tradicionales, y su familia ha preservado la elaboración de la tortilla artesanal durante más de dos siglos.
"Mi abuelita hablaba de sus abuelos, de mis tatarabuelos... ya son más de 200 años, aunque no tenemos una fecha exacta. Sabemos que es una tradición que viene de nuestros antepasados", afirma.
El sello de la tortilla ceremonial se realiza con “el muicle”, una planta que es cortada, lavada, tostada y luego hervida. Celia asegura que el sabor de la tortilla es inigualable, especialmente porque se elabora con maíz nixtamalizado y molido, y no con harina industrial. "Lo más rico es una tortilla ceremonial, hecha con maíz nixtamalizado, no con Maseca. Es deliciosa", asegura.
En cuanto a los sellos y símbolos que se plasman en las tortillas, Celia explica que anteriormente sus antepasados utilizaban la cruz, no con el significado religioso actual, sino como un símbolo de agradecimiento al dios de la lluvia. Hoy en día, las tortillas también pueden llevar imágenes de águilas, conejos, nopales y magueyes, representando elementos de la región y la conexión con la naturaleza.
A pesar de los cambios y modernizaciones en los sellos, Celia enfatiza que la esencia de la tortilla ceremonial sigue siendo la misma:
“Quiero compartir y dar gracias con una tortilla”, subraya.
Finalmente, Celia envió un mensaje al pueblo de Comonfort y a todos aquellos que deseen conocer más sobre su cultura:
“A mi pueblo mágico, los invito a venir a compartir con nosotros, a degustar lo que tenemos, lo que somos, nuestras raíces. A los de fuera, también los esperamos con los brazos abiertos. Tenemos de todo, tanto artesanías como comida deliciosa para que se deleiten. ¡Gracias y bienvenidos!”, concluye Celia Juárez.
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