Yicel quedó en cama y sin ayuda tras ser víctima del accidente de Leche León en la carretera de Silao
Todavía no se apreciaban los primeros rayos del sol el 2 de septiembre de 2022, cuando la camioneta tipo urvan banca en la que se trasladaba más de una veintena de personas se impactó contra la parte trasera de un camión de doble semirremolque propiedad de la refresquera Coca-Cola, que se encontraba estacionado en el carril de circulación derecho presuntamente a consecuencia de una falla mecánica.
Luego del impacto, otro tráiler embistió de costado a la camioneta de personal y varios cuerpos salieron proyectados. En ese momento el saldo fue de siete personas fallecidas y varias más lesionadas de gravedad.
Entre estas últimas estaba Yicel Velázquez Gómez de entonces 28 años de edad, quien ingresó al Hospital 53 del IMSS por traumatismo craneoencefálico, trauma de tórax, contusión pulmonar, entre otras lesiones.
Aunque llegaron a la escena del accidente sus padres y hermanos tardaron varias horas en localizarla, debido a que la información acerca del estado de salud y ubicación de los heridos corría a cuentagotas.
Yicel se mantuvo hospitalizada e intubada por casi dos meses. Hoy, a un año de la tragedia que marcó a habitantes de los municipios de León y de Silao, la situación no dista de lo vivido esa madrugada, pues las familias han sufrido un calvario para que se otorguen las indemnizaciones económicas que por ley les corresponden, y para cubrir los gastos de atención de los todavía pacientes.
Semanas antes Yazmín renunció a la compañía y sabía que su hermana Yicel no descartaba la posibilidad de hacerlo. Consideró que los directivos de Leche León fueron los responsables de lo sucedido, pues en infinidad de ocasiones junto a otros trabajadores habían reportado que el chofer de la unidad conducía de manera imprudente:
"Ya va a ser un año (del accidente) y realmente la empresa no ha querido responder como es, nosotros estamos pasando por una situación delicada porque no tenemos para cubrir los gastos para ella y la empresa se ha desatendido mucho, sabiendo que realmente ellos son los culpables de lo que pasó".
Fue trabajadora de la pasteurizada durante tres meses, inclusive se incorporó a la planta del bulevar Aeropuerto el mismo día que Yicel, y narró que:
"no era la primera vez que pasaba eso (reportes contra el operador), de hecho habían pasado varios incidentes, contrataban otros transportes (externos) pero el que pasó (participó en el accidente) sí era interno; conocemos bien al chofer, manejaba muy rápido y por gracioso le daba y se frenaba...la empresa no hacía caso".
Yicel enfrenta estado vegetativo persistente debido al traumatismo craneoencefálico que sufrió, además de otras afectaciones en los huesos.
"Nos dijeron que ella tiene un traumatismo craneoencefálico y está postrada en una cama. Se nos hace injusto porque la empresa no quieres responder cómo es, no tenemos para cubrir los gastos...ella era el sustento de mi familia y se nos hace injusto que la empresa no quiera responder como es", dijo, pues en ocasiones les otorgó vales para alimentos y algunos paquetes de pañales, pero el apoyo cesó apenas disminuyó la difusión mediática.
Para ser trasladada al hospital de León el costo de la ambulancia es de hasta cuatro mil pesos.
Dado que la joven no está en condiciones de hacer frente a los trámites derivados del accidente, su padre entabló un juicio de interdicción para que la joven sea declarada incompetente para manejarse de forma autónoma y poderla representar legalmente. Pero éste ha tardado muchos meses.