Corridos Tumbados: fenómeno se extiende a Guanajuato con Chino Pacas, de Apaseo el Alto, ¿bueno o malo?
León, Guanajuato.- Nombres como el Chino Pacas, Peso Pluma, Natanel Cano, Junior H, Gabito Ballesteros, Fuerza Regida entre otros, suenan entre los nuevos cantantes o agrupaciones que modernizaron el género regional mexicano con "corridos tumbados", un fenómeno de música bélica que ahora se extiende por Guanajuato.
Los anteriores son parte de una lista de intérpretes más escuchados en Spotify, que han ganado popularidad incluso frente a cantantes como Bad Bunny, de acuerdo con Alejandro Grajeda, encargado de artistas y sellos de Spotify México.
El Chino Pacas es originario de Apaseo el Alto, en Guanajuato. Desde pequeño vivió con su familia en Estados Unidos y hoy canta corridos tumbados y es uno de los tantos cantantes emergentes bélicos que busca una identidad en este género, moderniza la música regional mexicana y está desplazando al reggaeton en popularidad.
¿Quién es el Chino Pacas?
Originario de Apaseo el Alto, el Chino Pacas es uno de los cantantes que ha crecido exponencialmente, pues con apenas cuatro videos que subió a su cuenta de Youtube en enero, ya suma más de 21 mil seguidores. ‘Dijeron que no la iba lograr’, una de sus más recientes canciones, lleva más de 15 millones de reproducciones.
El Chino Pacas es un joven de aproximadamente 22 años, que interpreta corridos tumbados como ‘Negro como la pantera’ y ‘El gordo trae el mando’. El cantante de Apaseo el Alto ha aparecido en el Top Música Charts, que mide a los mejores músicos/ bandas mexicanas.
¿Qué son los corridos tumbados?
Para entender el fenómeno de los corridos tumbados, Luis Flores, trompetista y director del Departamento de Música y Artes Escénicas de la Universidad de Guanajuato, explica que estos cantantes emergentes están en busca de identidad, pues la mayoría de ellos, como Chino Pacas, son mexicanos que radican en Estados Unidos y probablemente “no se sientan ni de aquí ni de allá”.
“Desgraciadamente la gente que migra a Estados Unidos, ya sea que de niños o nazcan allá, no se sienten de aquí ni de allá (…) pierden un poco la identidad. No se sienten completamente de México, mucho menos de Estados Unidos, los famosos ‘pochos’ que les llamaban. Es un grito de guerra, de ‘yo vivo, existo, estoy presente.’ Es lo que de manera general yo percibo, que tratan de buscar su propia identidad. Hay una gran cantidad de paisanos incluso que son de tercera generación y siguen manteniendo su identidad, esa mexicanidad que solían tener, pero al mezclarse con muchas culturas en un país más global que el nuestro, los pone en una disyuntiva de: quien soy, de donde vengo, a donde voy”, menciona el músico de la Universidad de Guanajuato.
Lo particular y valioso de estos cantantes, de acuerdo con el experto, es que gozan de no cumplir con reglas musicales. Los intérpretes de corridos tumbados dejaron atrás el acordeón y la tuba para suplirlos por la guitarra, el bajo, contrabajo y trompetas.
Natanael Cano, de 22 años, originario de Sonora, fue el creador de esta corriente, una variante del corrido tradicional que hace referencia al hip hop con letras explícitas que evidencian historias de violencia.
Alejandro Grajeda, encargado de artistas y sellos de Spotify México, declaró a Reforma que la generación Z, es decir, los jóvenes de 0 a 20 años, son quienes han llevado a los corridos tumbados a la cúspide de Spotify, pues las canciones de Peso Pluma, uno de los cantantes más populares del género, están en el top de las más escuchadas, desplazando al puertorriqueño Bad Bunny.
“Hoy uno de cada tres escuchas de género regional mexicano son generación Z. En el 2021, 66 millones de usuarios escucharon música mexicana por primera vez y el 51% de esos escuchas fueron fuera de México”, dijo el representante de Spotify México en un podcast.
Sobre las letras explícitas en las que se narra la violencia, se enaltece a narcotraficantes y se dicen groserías sin censura, el director del Departamento de Música y Artes Escénicas de la UG, insiste en que los corridos siempre han sido una expresión libre que cuenta la realidad política, económica o social de algún lugar.
/LC