Sábado, 11 Enero, 2025

11 ℃ Guanajuato

ALEJANDRA GUTIÉRREZ: LA PRUEBA DEL ÁCIDO

Opinión

Miguel Zacarias - Polvora e Infiernitos

LE HABLAN. A unos días de que se defina el nuevo o la nueva titular de la Contraloría municipal, la alcaldesa de León, Alejandra Gutiérrez ya tiene una papa caliente, o mejor dicho dos, con las investigaciones en curso de la encargada de despacho sobre dos temas calientitos ocurridos en el trienio de Héctor López Santillana.

LOS CASOS. Hablamos de las indagatorias por el descuento en el pago del predial al Club Campestre que aprovechó un recoveco legal para liquidar como predio agrícola y de la venta de un terreno adjunto a un kínder en la colonia Refugio del Campestre al empresario Gabriel Padilla.

INCENDIARIO. Ambos temas surgidos de sendas denuncias que interpuso el síndico José Arturo Sánchez Castellanos en los primeros días de la actual administración y cuya resolución ya está muy cerca de darse, si no es que ya se dio.

DISYUNTIVA. El punto neurálgico es saber si en ambos asuntos que involucran a uno de los clubes que tienen entre sus socios a los ricos de esta ciudad y a un empresario cercano al gobernador, los responsables -y que serán castigados por la Contraloría- son funcionarios menores o de primer nivel del anterior alcalde.

CLARITO. La devolución que hizo en su momento el Club Campestre del descuento que había obtenido y la reversión que ofreció Padilla del terreno que había comprado representaron (en los hechos) el reconocimiento de que había sustento en las denuncias que hizo Sánchez Castellanos.

EL TEMA. Pero eso al final de cuentas es un gesto de los beneficiarios de acciones presuntamente irregulares de funcionarios en turno. Falta todavía conocer las sanciones a los exservidores involucrados.

CLARIDOSO. Y aquí viene lo interesante, porque por lo menos en el caso del descuento al Club Campestre, ya el síndico Sánchez Castellanos se pronunció el pasado 10 de diciembre en su artículo publicado en un diario leonés.

NO LE GUSTA. El síndico panista manifiesta ahí su inconformidad porque en la resolución de la Contraloría municipal se acredita como “no grave” la conducta del exdirector de Desarrollo Rural, Rodolfo Ponce quien emitió la constancia que dio pie al descuento al Club.

TEXTUAL. “Lo anterior envía un pésimo mensaje a la sociedad en general pues pareciera que la ética en los servidores públicos es menospreciada, la negligencia perdonada y la impunidad tolerada”, escribió Sánchez Castellanos entonces.

SUS PALABRAS. Tras advertir que la administración que encabeza Alejandra Gutiérrez no puede permitir que el discurso de que “no será tapadera de nadie” quede en palabras, anunció que presentaría una impugnación al fallo.

EL OTRO. Falta ver cómo viene la resolución del tema del kínder, porque ahí también las presuntas responsabilidades podrían alcanzar a funcionarios de primer nivel del exalcalde López Santillana.

INMEJORABLE. Un episodio que marca ya el arranque de la alcaldesa de León que no ha mostrado afán revanchista con su antecesor, pero si quiere dar un manotazo en la mesa y hacer realidad el ‘caiga quien caiga’, esta es la oportunidad para hacerlo.

Lee también: Aprueban convocatoria de consulta ciudadana al presupuesto participativo en León

LA DEL ESTRIBO…

Aunque no aparece entre los diez estados ya palomeados por el INE, en Guanajuato ya se cumplió de manera sobrada con la entrega del mínimo de firmas que exige la Ley para que se pueda dar luz verde al proceso de revocación de mandato que promueve Morena en torno al presidente Andrés Manuel López Obrador.

Por lo menos así lo dice Cinthia Teniente Mendoza, titular en Guanajuato de la asociación civil ‘Que siga la democracia’, promotora de este proceso y que, según la exregidora y excandidata a la alcaldía de Villagrán, entregó al INE 235 mil 50 firmas, más de 65 mil firmas adicionales a las 169 mil que se habían fijado como meta en la entidad y que representan poco más del 3 % del padrón electoral en la entidad.

Por lo pronto, el vocal presidente del INE en Guanajuato, Jaime Juárez Jaso ya alista todo para la eventual jornada del próximo 10 de abril.

A CUATRO AÑOS DE LA DECLINACIÓN DE TORRES GRACIANO

El golpazo para él fue tan duro que literalmente desapareció de la escena política a partir de entonces, mientras los miembros de su equipo han logrado posiciones nada despreciables, varias de ellas muy por encima de su discreta curul en San Lázaro.

Hace exactamente cuatro años, el entonces senador Fernando Torres Graciano se veía obligado a declinar de su aspiración de ser candidato a gobernador con la frustración de ni siquiera tener la oportunidad de competir por lo que buscaba y ser derrotado -como otros lo fueron- en una intern

“El día de hoy tuve una reunión con integrantes de mi estructura dentro del PAN y de la sociedad civil, a quienes les compartí que, una vez publicada y analizada la convocatoria, he tomado la decisión de no participar como candidato a la gubernatura del estado de Guanajuato”, decía a través de un comunicado de prensa.

Torres Graciano había soñado años antes que sería el favorito del gobernador Miguel Márquez para sucederlo, en correspondencia con los oficios que prestó para llevar hasta la candidatura al propio originario de Purísima desde la dirigencia estatal del partido, en donde hizo equipo con el exmandatario.

Creyó que la senaduría que ostentó de 2012 a 2018; era la antesala perfecta para ser el candidato natural de Márquez. Pero no contaba con que el entonces gobernador lo había descartado desde la mitad de su sexenio aunque no tuviera claro quién sería su delfín, porque a Diego lo había apoyado para ser candidato a alcalde en León en 2015.

Era el signo de los tiempos en el PAN que se dejó de florituras como eso de que era un partido ‘escuela de democracia’. A nivel nacional, Ricardo Anaya armó un tinglado para ser candidato presidencial sin discusión y en Guanajuato dejaba que el oficialismo se las arreglara sin intervención del centro.

Anaya en lo nacional y Diego Sinhue en lo local, se erigían en candidatos sin asamblea ni oposición alguna, muy al estilo del viejo PRI.

“Hoy la sociedad nos reclama diferenciarnos con propuestas innovadoras que respondan de manera clara y puntual a las necesidades de los guanajuatenses. Nos pide acabar con la impunidad, el influyentismo, combatir la corrupción, combatir la pobreza, la inseguridad y los males que nos afectan”.

Así decía Torres Graciano en su comunicado. Respiraba por la herida y hoy apenas se repone del golpazo aquél, mientras sus entonces incondicionales actuaban con pragmatismo y disciplina.

Jorge Espadas es diputado federal; Libia Dennise García, secretaria de Gobierno y Vicente Esqueda, procurador estatal de los Derechos Humanos.

MA. ROSA MEDINA: PARIDAD Y CERCANÍA

En efecto, para el momento en nuestra democracia que aplaude y juzga positivamente acciones afirmativas que permiten ocupar cargos relevantes a mujeres, el arribo de una Ma. Rosa Medina Rodríguez a la presidencia del Poder Judicial es un buen gesto.

No es la primera porque ya Claudia Barrera y -con anterioridad, cuando la paridad todavía era incipiente- Raquel Barajas ocuparon esa posición. Por unanimidad, Medina Rodríguez que hace tres años llegó la magistratura, ayer logró la presidencia.

Como ya le he comentado, hace tres años nadie apostaba a que a la vuelta de un trienio se convertiría en la presidenta. El cuestionamiento que le hicieron ayer sobre una lejana (en el tiempo) coincidencia con el ahora gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo cuando era un joven abogado, es válido.

La nueva presidenta del Poder judicial, como se dice coloquialmente, ‘bajó bien el balón’ al asegurar que ha coincidido con más personajes. En realidad esa coincidencia dice menos que otras cercanías inocultables del mandatario estatal en la promoción de algunos personajes para otros cargos.

Pero en el radiopasillo panista y en el Poder Judicial todos saben ‘por dónde viene la pichada’. Por eso, a diferencia de otros procesos de sucesión, en esta ocasión hubo menos ruido mediático. No se barajaron aspirantes, suspirantes ni delirantes porque la línea estaba dada y trazada. azada. La separación de poderes es un mito genial en Guanajuato y en el país. No hay forma ni razones para decirlo de otra manera. Uso y costumbre que en lugar de evitarse, se refuerza. En el caso de Guanajuato, más allá de la anécdota, se trata de uno de los factores que forman parte de la estrategia de combate al crimen organizado de esta administración.

En su lógica, no sólo no debe haber divorcio entre quienes procuran y quienes imparten justicia, sino una absoluta sintonía. Hay retos que tendrá que enfrentar Medina Rodríguez.

Uno de ellos, marcado por su antecesor Héctor Tinajero quien habló en su despedida de un déficit de al menos 12 jueces penales que hacen que la carga de trabajo sea mayor a la capacidad instalada. La razón: falta de presupuesto. Ahí le dejaron ese balón botando.

Temas

Te recomendamos leer