Diego y la bancada azul: todo queda en familia
DIEGO Y LA BANCADA AZUL: TODO QUEDA EN FAMILIA
TODO “EN ORDEN”. El informe de la bancada del PAN en el Congreso local confirmó la verticalidad que ejerce el estilo del liderazgo de Luis Ernesto Ayala con los 18 diputados y diputadas que coordina y la condición de subordinación del poder legislativo al ejecutivo en Guanajuato.
CANTIDAD Y CALIDAD. No se tiene memoria de una fracción azul con tan limitada libertad de acción e iniciativa en la historia reciente. Ayer, el pastor de la bancada mayoritaria, Luis Ernesto Ayala justificó nuevamente su apuesta por la calidad del trabajo legislativo por encima de la cantidad.
PREMISA. No cualquiera puede presentar iniciativas ni en el momento que se le ocurra como en antaño. No cualquiera puede lucir en la bancada albiazul. Cualquier propuesta que se pretenda hacer pasar por un filtro riguroso en el que se revisa qué tanto puede aportar la iniciativa a la agenda que empuja este partido, que es la que domina en la actual legislatura.
UNA DE CAL Y OTRA DE ARENA. Luis Ernesto Ayala, como coordinador pudo sobreponerse a una curva de aprendizaje que lo puso a prueba luego de que la generación de asesores que soportó el trabajo de la bancada por varias legislaturas se desmanteló porque la mayoría fue a otros cargos y fue sustituida por personajes inexpertos en temas legislativos aunque fueran lumbreras en las finanzas como Luis Mario Aguilar y Maya.
RESBALONES. Ayala finalmente ha logrado consolidar su perfil de líder aunque la apertura y tolerancia que presumió ayer en el discurso en realidad se ha visto apenas en el último mes. Cuando el PAN ha cedido en ciertos temas, ha sido obligado potr las circunstancias como en el amparo ganado en 2 instancias por Amicus.
BUENAS INTENCIONES. A partir del 25 de septiembre de este año, el PAN parece mostrar otro talante aunque una golondrina no hace verano. Todavía no se ponen sobre la mesa, los temas que al PAN le provocan urticaria y sacan el intolerante que llevan dentro.
A VER. En suma, Ayala Torres inició animoso y abierto en este período ordinario. Vamos a ver si en los meses por venir, con la grilla electoral encima, ratifica ese perfil o se convierte como, sería normal, en una parte más de la artillería azul rumbo al 2024.
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LA DEL ESTRIBO…
Al embestir ayer otra vez contra el Fiscal del Estado Carlos Zamarripa, el presidente Andrés Manuel López Obrador falló en las cuentas. Dijo que lleva 14 años en el cargo cuando son 13 y que le faltan 2 cuando en realidad le faltan 5 o 6.
El presidente dice que quienes no tengan resultados, “por dignidad” deberían renunciar. Ahora menos. El gobernador Diego Sinhue dijo que si ya “Guacamaya Leaks”, lo sentenció así en una de sus tantas filtraciones de documentos de la Sedena, no hay nada más qué decir.
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LOS MUNICIPIOS Y LA SEGURIDAD: UN PROBLEMA ENDÉMICO
Hace un año, en el arranque de las nuevas administraciones municipales comenzaban a evidenciarse problemas serios en varios municipios del estado.
En León, una cadena de ataques a Policías provocaba 4 muertes de elementos en 20 días, una cifra inédita en la entidad; en Santa Cruz de Juventino Rosas, se daba una limpia de antología en la Policía Municipal para que asumiera el mando las Fuerzas de Seguridad del Estado.
En Irapuato, Lorena Alfaro importó al comandante Miguel Simental que algo hizo bien en Celaya para que lo llevarán allá.
Las estadísticas sin embargo, acorralaban al municipio gobernado ahora por Lorena Alfaro que se encontraba con una papá caliente.
Con todo y que en el discurso oficial de años anteriores, la policía de Irapuato era una de las mejor pagadas, la percepción de inseguridad según el INEGI era una de las más altas del país.
El gobernador dijo hace un año que alcaldes como el de Villagrán Juan Lara quien defendió abiertamente a su policía municipal cuando se les acusó de presuntas relaciones irregulares con grupos criminales, que “no se dejan ayudar”.
Un dato significativo era que alcaldes y alcaldesas del corredor industrial del estado, habían salido entre los peor evaluados en materia de seguridad pero en ninguno de esos municipios, hubo cambio de color de partido gobernante. En León, Irapuato y Celaya sigue gobernando el PAN y en Salamanca, Morena.
A un año de distancia, la realidad de las policías municipales no se ha modificado mucho por lo menos en esos municipios aludidos.
En León, van más de medio millar de policías despedidos en un año; en Irapuato no funcionó el refuerzo Simental y la policía en ese municipio vive horas bajas y la alcaldesa no parece encontrar la puerta de salida.
Acaba de despedir 100 elementos de un jalón y el municipio que gobierna fue el escenario de una de las peores masacres.
En Celaya, la extorsión sigue siendo uno de los delitos que más atemoriza a la población y el alcalde Javier Mendoza hace meses vivió en su propia familia la tragedia de haber perdido a un hijo que fue asesinado en las calles de la ciudad.
El gobernador Diego Sinhue sigue sosteniendo que la seguridad se construye desde lo local pero la asimetría en el nivel de las policías, sigue siendo el talón de Aquiles en el combate a la inseguridad en Guanajuato.
GUANAJUATO Y LA 4T: LAS CIFRAS ALEGRES LOS UNEN
Era previsible que el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo no se trepara al ring con el secretario de Gobernación, Adán Augusto López quien en los 2 últimos días había tundido bien y bonito a varios estados gobernados por la oposición a Morena, entre ellos Guanajuato.
Ya sabemos que Rodríguez Vallejo no es de mecha corta como su homólogo de Jalisco Enrique Alfaro. Sabe el de Guanajuato que solo podría ganarse un mayor desdén de parte del gobierno federal, y aguanta vara.
Lo que llama la atención es que justo ayer, que Diego Sinhue insiste en que la estrategia para combatir a la delincuencia rinde frutos y que tragedias como la de Irapuato en donde hubo 12 muertos en una masacre son hechos lamentables que alimentan la percepción negativa pero que no son la constante, el gobierno federal se defendió con el mismo recurso pero en el Senado.
El tema de fondo es la coincidencia en el optimismo que desbordan por igual la narrativa de la 4T y la de Guanajuato. Diego Sinhue con su comparación en la disminución de homicidios con 2021 y 2020 mientras que la secretaria de Seguridad federal, Rosa Icela Rodríguez establece un comparativo con la incidencia actual con 2019 y con 2018 López Obrador ganó la elección.
La funcionaria compareció ayer ante el Senado aunque no fue ella la villana favorita sino el general Crescencio Sandoval quien desde su lugar en la mesa directiva aguantó candela que soltaron senadores de oposición, sobre todo Lily Téllez y Germán Martínez.
La secretaria de Seguridad iba bien preparada. Manejó la incidencia a la baja de casi todos los delitos y en el caso de los homicidios, dijo que en la comparación de agosto de 2022 con julio de 2018 hay una baja de 14.6% mientras que en la comparación de los primeros 8 meses de este año con el mismo lapso de 2019, la baja es de 10 puntos porcentuales. Lapsos claramente identificados convenientemente para que la disminución en la incidencia, sea inobjetable.
Y acá en Guanajuato, en el informe de los diputados del PAN, Diego Sinhue Rodríguez también planteó cifras irrefutables. Los homicidios enero-septiembre de 2022 son 14.6% menos que los del mismo lapso 2021 y más de 40 puntos porcentuales menos que el mismo período pero de 2020.
¿Porqué Diego Sinhue no hace la comparación de la incidencia de homicidios dolosos de este año con los años 2019 y 2018 al momento que recibió el mandato?
Por la misma razón por la que la funcionaria federal no hace el comparativo de la actualidad con 2020 y 2021. Porque en ese comparativo, las administraciones no salen tan bien libradas.
En Guanajuato, la comparación siempre será con 2020 que ha sido el año más violento en el país y con 2021 que siguen siendo más que este año. No hay mención de los 2 años anteriores porque Guanajuato en materia de violencia aún no puede bajar la violencia a los niveles del arranque de este sexenio.
Y claro. Nadie vende pan frío como ya sabemos. Rosa Icela Rodríguez se regodeó en el Senado con la postura de los gobernadores muy divergente a la de sus senadores. Aquellos no pueden tirar patadas al pesebre. Diego Sinhue prefiere aguantarse y no critica ni cuestiona la militarización. No le conviene. Pero además, tiene que decir que la estrategia funciona.
Los críticos del panismo gobernante en Guanajuato y de la 4T aguantan el mismo acomodo de cifras para el discurso triunfalista. Todos son iguales.
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