En León hay más de 2 grupos, se pelean entre ellos y la autoridad solo ve crecer los homicidios dolosos
“Yo hablaría aquí de las organizaciones locales, tal cual y de la organización de Jalisco que busca generar el control hegemónico de las actividades criminales pero que además en el camino entre ellos mismos tienen conflictos que también derivan en homicidios, no son causas únicamente atribuibles al municipio, creo que es una dinámica nacional…porque finalmente son momentos distintos, probablemente el momento que vivió león fue el que vivió Celaya el pasado o el antepasado y si ustedes recuerdan el caso de Irapuato hubo un momento en el que tuvieron un gran número de homicidios”
Sophia Huett, Secretaria Ejecutiva del Sistema Estatal de Seguridad PúblicaPues será el sereno, pero el pasado viernes sesionó la Sala Monterrey del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y no mató todavía la duda ni la angustia de la priista Ruth Tiscareño ni del académico David Martínez Mendizábal que según sus números están amarrados en la siguiente legislatura local pero que gracias a la impugnación de compañeros de partido, aún no pueden cantar victoria.
Resulta que en ambos casos, el Tribunal Electoral de Guanajuato resolvió que en virtud de que ya se había desarrollado el proceso electoral, no había manera de que se les quitara la nominación pero la Sala Monterrey les dijo que fue incorrecto desechar los reclamos en ambos casos porque aún no se asignan las plurinominales y el daño no es irreparable.
En el caso del PRI entre quienes impugnaron está María Esther Garza y de Morena, Ernesto Prieto. En ambos casos, hay quienes presumen que solo es cuestión de tiempo para que el TEEG refrende las listas de Morena y del PRI.
Pero más vale que no se confíen en exceso los impugnados porque la experiencia nos dice que en la configuración de las legislaturas, a los tribunales suelen dar sorpresas y hacer que al más pintado, del plato a la boca se le caiga la sopa.
Y si no que le pregunten a Humberto Andrade que casi se sentaba en la curul hace 6 años y le dijeron “vas pa’ atrás”.
Ayer reapareció el candidato perdedor de las elecciones municipales de San Miguel de Allende Luis Alberto Villarreal en una comida con seguidores y colaboradores.
Sintomático que lo hiciera un día después de que estuvo en la reunión de candidatos ganadores y perdedores con el gobernador. En su primera aparición pública, pronunció un discurso que fue subido a Facebook en un video en el que dijo que estaba en pie de lucha.
Acusó a Mauricio Trejo, triunfador de la contienda y alcalde electo de rebasar el tope de campaña y haber intentado engañar sistemáticamente a la autoridad con reportes de agenda de campaña tardíos e informes incompletos de eventos de campaña que eran señalados como no onerosos y que se convertían en auténticos mitines.
Comparó lo de Trejo Pureco con lo que hizo Félix Salgado Macedonio en Guerrero. Dijo que le tenían notariados 124 eventos de campaña y que solo reportó 64 y que 40 de ellos no costaron nada.
“Quiero que escuchen porque se trata del fraude del siglo”, dijo ante varias decenas de seguidores.
Villarreal sueña con la anulación de la elección.
DESAPARICIÓN FORZADA: LOS AGRIDULCES RESULTADOS PARA EL GOBIERNO
Podríamos decir, a un año de aquellos hechos que marcaron la protesta de colectivos de familiares de personas desaparecidas con una actuación indebida de las Fuerzas de Seguridad del Estado y que recientemente derivaron en una recomendación de la Procuraduría Estatal de los Derechos Humanos que en materia política, acciones afirmativas y conciliación, el gobierno de Diego Sinhue sale avante frente a la mano dura y la insensibilidad de su dúo dinámico.
En efecto, la administración actual ha mostrado voluntad para atender lo que no quiso el de Miguel Márquez con la apertura para hacer los ajustes legislativos necesarios, integración de la Comisión Estatal de Búsqueda, el presupuesto necesario para estar a la altura de las circunstancias y por supuesto, la voluntad política para la identificación de fosas clandestinas, un lastre para el Guanajuato violento del último sexenio.
No es extraño que justo en los días previos a que se cumpliera un año de los hechos, se haya dado la resolución de la Procuraduría Estatal de los Derechos Humanos que puso en el banquillo de los acusados a algunos elementos de las Fuerzas de Seguridad.
El 10 de julio de 2020, integrantes de colectivos, predominantemente mujeres se manifestaron en la Glorieta Santa Fe de la capital del estado. Bloquearon la avenida y fueron desalojados por policías estatales con no muy buenas maneras, tras lo cual varias mujeres resultaron lesionadas.
El secretario de Seguridad Alvar Cabeza de Vaca sostuvo que las fuerzas habían actuado legalmente al tiempo que decía que su gobierno es respetuoso de la libre manifestación pero que impediría el bloqueo de vías de comunicación.
Tras la reacción inicial, vino la investigación de la PEDHG y aquella visita del gobernador a una de las mujeres que fue lesionada, un reconocimiento tácito a los excesos.
Pero más allá de eso, en el tema de desaparición forzada, hay una mancha de origen en Guanajuato para sus autoridades. Si hoy, se trabaja en la localización de personas desaparecidas y se descubren fosas clandestinas mucho tiene que ver con la omisión en el gobierno de Miguel Márquez que negó ese problema.
Y ahí ubicamos el lado más oscuro de la gestión del Fiscal Carlos Zamarripa que por años negó la existencia de fosas clandestinas y hoy, a regañadientes atiende este drama que padecen muchas familias porque Guanajuato ocupa el lugar que merece en ese lamentable top nacional.
Y bueno, las propias organizaciones y colectivos también tienen sus flancos débiles y hay que citarlos aunque para algunos sea políticamente incorrecto.
Hace unos meses, 4 integrantes del colectivo “A tu encuentro” dieron a conocer el sábado por la noche su separación de este colectivo y denunciaron que su dirigente José Gutiérrez había desviado el objetivo original del movimiento, lo ha politizado e incluso lo ha convertido en un negocio del que ha sacado provecho particular.
Así las cosas, meritoria la respuesta del gobierno de Diego Sinhue en lo institucional. Toda una paradoja que ahí encontremos el pie del que más cojea, su funcionario favorito.
DIEGO SINHUE: TIRANDO LÍNEA Y SOBANDO CHIPOTES
El pasado viernes, en su calidad de jefe de facto del panismo en Guanajuato, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo se reunió con los candidatos que compitieron por las alcaldías y el Congreso local el pasado 6 de junio.
Una reunión de convivencia que aprovechó el mandatario estatal para recordarles a quienes compitieron, ganadores y perdedores quién es el que manda en el blanquiazul y de alguna manera, hacer una versión moderna de aquella frase salinista: el que se mueve no sale en la foto.
Y es que, a pesar de que hace ya varios años el panismo guanajuatense abandonó en los hechos aquél postulado de que el blanquiazul es escuela de democracia y se ha transformado en un partido vertical y que tiene un jefe único e indiscutible, hay algunos que creen que se pueden salir del huacal.
Curiosamente, uno de ellos es alguien que pertenece o es afín al grupo más cercano de Rodríguez Vallejo.
Sin decir nombres, el gobernador mandó un mensaje para aquellos que se mueven, quieren, sueñan y sondean la posibilidad de ser dirigente del PAN. Y más de alguno interpretó que entre los destinatarios del mensaje está Aldo Márquez, diputado local electo.
Aldo, hermano de Alan, vocero del gobierno estatal es uno de los panistas de la nueva camada azul, más impetuosos y voluntariosos. Se le menciona como uno de los que aspiran a la dirigencia estatal del PAN que está próxima a renovarse.
Fue subsecretario de Desarrollo Social y Humano y uno de los que desplegó una campaña electoral con un sello más personalizado. Y si bien, es lógico pensar y esperar que el próximo dirigente panista tenga un sello más dieguista, no hay evidencias de que el gobernador esté pensando en Aldo.
Román Cifuentes va de salida y es un hombre que debe sus lealtades al exgobernador Miguel Márquez pero por sobre todas las cosas, a la cofradía yunquista.
Por cierto, ya Diego Sinhue solicitó al dirigente nacional Marko Cortés que la renovación del CDE panista en Guanajuato se dé hasta noviembre y no en agosto o septiembre como correspondería. La idea es que se empate con la sucesión nacional. No habrá problema para que ello ocurra.
Pero por lo pronto, en Palacio de Gobierno quieren parar las ansias de novillero del joven Aldo Márquez que hoy, huele de cerca el amparo del círculo cero del gobernador y levanta la mano para todo: precandidato a alcalde, dirigente estatal y lo que se acumule.
Por cierto, todos salieron muy contentos de la comida con Diego Sinhue. A todos los que perdieron un distrito o una alcaldía, les van a dar un cargo de consolación. Faltaba más.