Miércoles, 08 Enero, 2025

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¿PRESIDENTE O PRESIDENTA DEL IEEG?

Opinión

Miguel Zacarias - Polvora e Infiernitos

HORAS FINALES. Justo a 11 días de que venza el plazo para que se designe al nuevo presidente o presidenta que encabezará el consejo general del Instituto Estatal Electoral, las cartas están echadas para que los consejeros del Instituto Nacional de Elecciones decidan quién será el o la elegida.

¿SERÁ? Y en la carrera que ya superó su último filtro hace una semana con las entrevistas a los 11 aspirantes ya se tejen escenarios sobre el desenlace. Por diversas razones que tienen que ver con sus antecedentes de trabajo en materia electoral y sus buenas calificaciones en las fases previas, la expresidenta del Comité Ciudadano del Sistema Estatal Anticorrupción y vinculada a la Universidad de Guanajuato, Arminda Balbuena Cisneros es citada como la favorita.

LAS SOMBRAS. Ella es perfilada como la puntera desde varios análisis en virtud de sus buenas calificaciones que tuvo en las evaluaciones de los primeros filtros aunque en la entrevista, Balbuena fue cuestionada sobre sus antecedentes y en concreto sobre decisiones complicadas en su cargo más reciente que nada tuvo que ver con lo electoral.

CONTROVERSIA. Ni tarda ni perezosa habló de la dificultad de echar a andar el complejo sistema estatal anticorrupción y aquella recomendación por la entrega de la Concesión de una carretera a Grupo México que le hizo al gobierno de Miguel Márquez en una de las decisiones más complejas y polémicas.

POLÍTICOS NO, PRENSA SÍ. Llamó la atención que cuando le preguntaron a Arminda sobre alguna experiencia de presión de actores políticos para tomar una decisión y ni tarda ni perezosa dijo que esta provino de medios de comunicación (no dijo nombres) con notas que cuestionaban más asuntos de tipo personal que de temas profesionales.

EN PLATA. Aunque ella defiende su paso por el Comité Ciudadano, hubo cuestionamientos porque no se le vio como un contrapeso sólido al gobierno panista.

LA PARIDAD. De cualquier manera, Arminda es puntera por sus antecedentes y también porque en tiempos de paridad, es probable que una mujer sea la que encabece el consejo del IEEG. Pero no es la única que aparece con   porque en la lista también está Brenda Canchola quien ahora trabaja en el propio IEEG.

VARONES. Del lado de los varones, destaca la persistencia de Carlos Manuel Torres quien es el director de la Unidad de lo Contencioso del Instituto Estatal Electoral quien es la segunda vez que aspira al cargo y llega hasta la fase de entrevistas pero también de Francisco Parada Villalobos quien ha trabajado en el INE y es, hoy por hoy entre los aspirantes el de mayor experiencia electoral entre los finalistas. Ojo, que es entre los varones, uno de los favoritos.

EL RESTO. Una decisión que no será nada sencilla pero que marcará un parteaguas en el Instituto Estatal Electoral. Podría llegar una mujer a ser la consejera presidenta luego del intento fallido para llevar a la presidencia provisional a una de las actuales consejeras. Veremos.

LA DEL ESTRIBO…

El Procurador Federal del Consumidor, Ricardo Sheffield Padilla, presentó en días pasados su libro ‘Del desamor al amor’. Nada que ver con la política porque es el proceso a la inversa lo que ha vivido Sheffield en el PAN: del amor a la decepción. Y así lo vuelve a demostrar en el último video que difundió en redes sociales hace unos días para cuestionar severamente a su excompañero de partido y excandidato presidencial, Ricardo Anaya, en torno a las presuntas bondades de la reforma energética aprobada en el sexenio de Enrique Peña Nieto.

En esos tiempos, Sheffield todavía era panista. Se cuidó de solo descalificar los efectos de la reforma energética en el precio de la luz eléctrica y no alabó la propuesta de Morena. El chiste era tundirle a Ricardo Anaya, el mismo que lo dejó chiflando en la loma cuando se rebeló en el PAN.

Recordar es volver a grillar

SECRETARIOS DE GOBIERNO:

Hay una gran diferencia entre un segundo de a bordo que no ata ni desata, a otro que es un operador político eficiente a uno que se convierte en un auténtico problema para el gobernante en turno.

En este último grupo se encuentra en Guanajuato, Gerardo Mosqueda Martínez, quien hace exactamente 11 años renunciaba al cargo aunque en realidad el entonces Juan Manuel Oliva ya no podía aguantar los desplantes del funcionario.

“He decidido aceptar la renuncia del ciudadano licenciado José Gerardo Mosqueda Martínez al cargo de Secretario de Gobierno que venía desempeñando; agradezco a Gerardo Mosqueda por el trabajo desarrollado estos cuatro años al frente de la Secretaría y de las diferentes tareas que le encomendé”.

Una salida, muy tardía. Juan Manuel Oliva dejó crecer la percepción que se volvió realidad irrefutable. Su número dos tenía cancha libre y derecho a moverse a su antojo en el sexenio olivista. Nunca tuvo rienda ni restricción porque para él, no mandaban las reglas terrenales sino las del Yunque que no eran de este mundo.

Oliva nunca puso freno a su secretario de Gobierno que muy pronto se convirtió en un lastre para él. Más que su bombero se convirtió en el fuego mismo. Con agenda propia y sin respeto a las jerarquías de gobierno, hizo lo que su hormona le mandaba.

Se peleó con directivos de medios, atizó la pugna con adversarios partidistas, tenía su propia agenda en el equipo gobernante y no generaba respeto a la figura del gobernador.

En su momento, ya hace mucho tiempo, Ramón Martín Huerta, se convirtió en el prototipo de un secretario de Gobierno eficaz y efectivo, con colmillo que estaba para cuidar las espaldas de un desbocado Vicente Fox que pensaba en Los Pinos, que acordaba con partidos opositores y que en los hechos, gobernaba mientras el mandatario alimentaba las ganas de ser presidenciable entre 1995 y 2000.

De ahí en fuera, nadie pudo igualarlo. Oliva con Juan Carlos Romero se convirtió en una bomba de tiempo para el ejecutivo en turno por sus afanes futuristas.

Ricardo Torres Origel fue un aliado más eficaz de Juan Carlos Romero en la secretaría de Gobierno. Luego vino Mosqueda con la historia ya conocida. Con Miguel Márquez, Antonio Salvador García y Gustavo Rodríguez Junquera simplemente se administraron y no se expusieron

Y en este sexenio, Luis Ernesto Ayala tampoco ejerció mucho protagonismo Libia Denisse construye su historia y quisiera romper la racha de segundos de a bordo que no han llegado a ser candidatos a la gubernatura.

La imagen del día

MAURICIO HERNÁNDEZ: LOS PASOS EN LA AZOTEA

Los reacomodos de segunda mitad de sexenio están a la orden del día. Tanto en el ámbito estatal como el federal. En Morena que es gobierno en lo federal hay ajustes para corregir el rumbo de proyectos o simplemente para reforzar la presencia de grupos políticos.

Desde hace meses, suena fuerte en los pasillos de Morena en el estado, la posibilidad del relevo en el titular de la delegación de Programas del Bienestar, Mauricio Hernández Núñez.

Un relevo que parecería inviable en estos momentos justo después de que el superdelegado colocó en la coordinación de la bancada morenista a Ernesto Millán que trabajó con él en los servidores de la nación, además de la sonorense Hades Aguilar y que tiene en Edith Moreno a otra afín dentro de la bancada.

Hernández Núñez tiene, según se sabe, la afinidad de tres de los siete legisladores morenistas. Irma Leticia González y Alma Alcaraz estarían más cerca de Sheffield mientras que Prieto y Cuauhtémoc Becerra sin ser grandes aliados, juegan aparte.

Pero lo que se dice es que el debilitamiento de la posición de Hernández Núñez se gestó a partir de la salida de Gabriel García de la Secretaría del Bienestar y que además, pese a los avances en programas sociales, no se han dado los resultados esperados para la 4T en el estado.

Lo que suena en radiopasillo es que si se materializa el cambio, ya hay dos personajes en la puja para ocupar ese cargo. Uno, el exdiputado federal Miguel Ángel Chico Herrera y el segundo, el exdiputado local Raúl Márquez Albo. Uno expriista y otro expanista.

El primero de ellos, es totalmente afín al grupo de Ernesto Prieto y Ricardo García Oseguera y el segundo, incondicional de Ricardo Sheffield Padilla.

Mauricio Hernández ha mostrado en esta primera mitad del sexenio poca proclividad al protagonismo y la estridencia mediática. Eso no gusta a algunos de sus correligionarios quienes quisieran ver al superdelegado en los grandes temas polémicos frente al gobierno de Guanajuato

La moneda está en el aire.

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