Marchan para exigir justicia por los dos hermanos asesinados en San Miguel de Allende
San Miguel de Allende, Guanajuato.- Un grupo de personas se manifestaron la tarde de este lunes en repudio por el asesinato de los dos hermanos menores de edad, así como para exigir justicia y seguridad en San Miguel de Allende.
Soledad Araiza, quien ya perdió a una persona cercana debido al crimen organizado dijo que el gobierno municipal está culpando de todas estas muertes al crimen organizado “y por eso levantamos la voz, porque exigimos paz, justicia, salir a trabajar tranquilos sin que los policías nos agredan. Queremos seguridad, pero también que se nos respeten nuestros derechos humanos”.
Continuó “el día hoy no solamente levanto la voz por los niños Aldo y Aidé, sino por todos y cada uno que perdieron la vida en manos de estos crueles asesinatos”.
Dijo que se ha acercado al actual presidente municipal y a los anteriores para que le regalen una beca con la que pueda certificarse en control de adicciones.
“Mi idea es certificar a una persona por sección y que esa persona se encargue de orientar a padres de familia y a ir a las escuelas a dar charlas de prevención”.
Aseguró que solamente así, con prevención, “vamos a terminar esta guerra sucia que se está viviendo y que tiene que cesar. Todos tenemos familia, nadie está exento a caer en manos de quien no debes”.
Familiares de los niños fallecidos pidieron al alcalde no usar chivos expiatorios para intentar culpar a una persona y pidió limpiar el nombre de Aldo, el adolescente de 16 años asesinado, a quien el presidente municipal señaló que ya contaba con tres detenciones.
La manifestación salió de la plaza de Armas al grito de “No más muertes” y con carteles donde se leía mensajes como “En San Miguel nos están matando a los nuestros y nadie hace nada. Justicia”.
También hubo mensajes como “Justicia para Alfo y Aide”. Los inconformes caminaron hasta la calle de San Francisco, donde iniciaron un rosario por el descanso de los asesinados y por la recuperación de sus familias.
Una vez en la plaza principal, se colocaron afuera de la parroquia y encendieron veladoras en honor de las víctimas. La manifestación fue completamente pacífica.