Vendedores de libros promueven la lectura en Juventino Rosas

Vendedores de libros de Juventino Rosas luchan contra el impacto económico de la pandemia mientras promueven la lectura entre los jóvenes

Gerardo Márquez

Juventino Rosas.- Una forma de ganarse la vida es la venta de libros, y en Juventino Rosas no es la excepción. Fernando Pitayo colocó en el portal Amado Nervo su anaquel con diferentes títulos, tanto para gente adulta como para jóvenes y niños.

Debido a que es un negocio pequeño, Fernando expresó que las ventas están tranquilas, pero espera que mejoren. Dijo que los libros que se venden más son los de superación financiera.

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Explicó que él maneja entre 80 y 90 editoriales con diferentes títulos para todo tipo de lectores, desde niños y hasta personas adultas y jóvenes.

Dijo que su negocio es parte de una librería de nombre Alfa Omega que se ubica en Celaya, y tiene títulos de J.J. Benítez, Paulo Coelho, Gabriel García Márquez, “y traemos todo lo Harry Potter, y una gran variedad de novelas”.

Para niños explicó que manejan los “compas”, lecturas que tienen ilustraciones y son de aventuras, porque así resultan más atractivos para los pequeños.

“Porque ahorita se está enfocando para que tomen la lectura, incluso en todo lo referente al sistema computacional”, apuntó.

Para recomendar a un niño la lectura, dijo que dependía mucho de la edad del pequeño, ya que sus intereses cambian desde los seis años u ocho años, hasta 15 y 16 años, mientras que para niñas y adolescentes afirmó que “tenemos los Diarios de Niki, el Diario de Martina; hay novedades para niños y niñas“.

Con respecto a los jóvenes, recomendó las lecturas de Setephen King o Alice Kellen, que es la que más está vendiendo para jóvenes de 16 a 22 años.

A través de estos títulos es que Fernando espera reactivar su economía, pues reconoce que la pandemia lo impactó de manera fuerte, sobre todo por las limitaciones de movilidad que les impedían promover sus libros en parques o jardines.

“Hay jardines de los municipios en donde todavía no se les permite trabajar, y estar en una librería o estar en un local fijo, pues ahí la gente no se acerca ¿Por qué? Porque no tenemos esa cultura de ir a una librería y buscar los libros”, aseguró.

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Señaló que en Juventino Rosas sí se permite ofrecer sus productos en espacios públicos, lo que le ha beneficiado.

“Nosotros que somos los libreros, tenemos que buscar las puertas de los jardines que nos permitan. Hay muchos municipios del estado de Guanajuato que no nos permiten, pero aquí en Juventino siempre nos han abierto las puertas, incluso somos temporales, no somos fijos, y yo cada tres meses vengo, ahorita yo termino el plazo el dos de marzo, y regreso posiblemente para cuaresma”, concluyó.

JRP