Bajo el sol abrasador, comerciantes y repartidores en Guanajuato sufren por ola de calor
Guanajuato, Guanajuato.- Los trabajadores en Guanajuato, especialmente comerciantes y los repartidores, enfrentan serias dificultades para realizar sus actividades debido a la intensa ola de calor que azota la región.
Las altas temperaturas, que superan con frecuencia los 35 grados, hacen que las jornadas laborales sean extremadamente agotadoras y peligrosas para la salud. Los comerciantes, que pasan largas horas al aire libre o en locales mal ventilados, sufren de deshidratación y golpes de calor, mientras que los repartidores, que deben estar en constante movimiento, enfrentan el riesgo de insolación y fatiga extrema.
Comerciantes sufren por calor en las calles de Celaya
A pleno rayo del sol y a pesar de las altas temperaturas, los comerciantes informales a diario tienen que ingeniárselas para que no les dé un golpe de calor.
Los vendedores aseguran que no pueden dejar de trabajar, ya que viven al día, pero sí se ha vuelto un riesgo estar largas horas bajo el fuerte rayo del sol.
El puente peatonal que está frente al Mercado Hidalgo, el bulevar Adolfo López Mateos en el tramo que está entre Luis Cortazar y Allende y el primer cuadro de la ciudad son los puntos donde más se concentran los vendedores ambulantes.
Incluso hay mujeres, las llamadas ‘Marías’, que piden dinero mientras que muestran a sus bebés acostados en el suelo, con temperaturas que han oscilado entre los 25 y los 35°C.
“Pues sí hace mucho sol, y mucho calor, pero qué hacemos, hoy lunes es un buen día, por momentos pues sí se siente uno mal, como que nos deshidratamos, pero tenemos que ser fuertes y a los hijos pues hay que enseñarlos a trabajar”, señaló Guadalupe Camargo, vendedora de diversos productos en el puente del Mercado Hidalgo.
Además de los vendedores, hay personas de la tercera edad o quienes practican la mendicidad que se colocan en su mismo lugar de siempre, sin que sean un obstáculo las altas temperaturas.
“Yo vende trastes, franelas, fibras, estropajos, hasta calcetines, de todo vendo aquí, poquito porque no tengo permiso, pero estos días sí han sido los peores de los últimos años, hace mucho calor y mucho sol, lo único que nos protege es este techito de cartón que pusimos, nos ha ayudado a aguantar poquito, no ayuda mucho pero ya por lo menos nos da un poco de sombra”, dijo otra vendedora del puente peatonal del bulevar.
Afortunadamente no se han reportado casos de golpe de calor de comerciantes o personas en situación de calle en la ciudad.
Guillermo sufre para llevar las tortillas en Irapuato por el calor excesivo
Para Guillermo Sánchez, comerciante de tortillas, nunca había sido tan complicado cubrir su ruta para llevar el alimento hasta los hogares de los irapuatenses. A pesar de que utiliza sombrero para cubrir del sol y se hidrata, señaló que este año el calor ha sido el más intenso que ha sentido.
Como todos los días, este lunes Guillermo tomó su motocicleta, la hielera en donde coloca las tortillas, con sus gafas de sol y sombrero, salió a recorrer sus rutas para llevar el alimento hasta las puertas de los hogares de los irapuatenses.
Desde hace una semanas para Guillermo Sánchez cubrir su ruta ha sido un desafío, pues además de las mascotas que lo persiguen debe soportar los intensos rayos solares, pues realiza su recorrido a partir de las 10 de la mañana hasta las 4 de la tarde.
“Es la hora en la que está el sol en todo su apogeo, no habíamos sentido calor como ahorita es muy seco, muy sofocante, antes se nublaba ahorita está con todo, no hay una nube que tape tantito. Híjole está bastante fuerte el calorón, tenemos que protegernos con sombrero porque en unos minutos nos quema bastante estamos a tome y tome agua no cesa el calor, es demasiado últimamente… Ahorita que salimos si tenemos que protegernos porque está bastante fuerte”, comentó Guillermo.
En comparación a otros comerciantes de bebidas, para Guillermo está temporada de calor es una de las más difíciles en cuanto a ingresos porque las ventas disminuyen.
“Ahorita la gente está con el intenso calor que hay, mucha gente prefiere otros alimentos que no son calientes como las tortillas, ahora si bajan las ventas”.
Simón tuvo que aumentar sus precios y trabajar menos horas por el calor
Pese a las altas temperaturas para Simón comerciante de jugos naturales, esta temporada ha sido una de las peores en cuánto a sus ingresos, pues el costo de las frutas se incrementó y debido al calor tuvo que reducir a 3 horas su jornada laboral.
Como muchos otros días, Simón llegó con su carrito hasta la Avenida Independencia, colocó sus lonas, barras de hielo, jarras y demás artículos para ofrecer a peatones y conductores de vehículos los jugos de naranja, mandarina, toronja y zanahoria entre otras frutas.
Esta temporada de calor no ha sido positiva para Simón, pues sus ingresos disminuyeron.
“Si nos ha afectado el calor, porque nos subieron los precios, la naranja está muy cara a 20 pesos el kilo y pues las ventas bajaron”, compartió Simón.
El comerciante no pudo precisar el porcentaje en el que disminuyeron sus ventas, pero precisamente por los intensos rayos solares y el calor, tuvo que reducir su jornada laboral y con ello disminuyeron las posibilidades de generar más ingresos.
“Ahorita estoy trabajando desde las 8 de la mañana hasta las 11 del día, el calor está muy fuerte y si tomo más agua porque hay que hidratarse”.
**Con información de Luz Zárate y Nancy Venegas
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