Dos mujeres más desaparecieron el mismo día que Sandra y Alejandra, pero ¿dónde están?
Las comunidades de Uriangato, Xichú y Celaya se han unido en solidaridad con las familias afectadas. Foto: Especiales
Maribel Fuentes Bribiesca, de 31 años, fue la primera en desaparecer en el municipio de Uriangato. Su ausencia fue reportada el día 16 de febrero, desatando la alarma entre sus seres queridos, quienes no han cesado en su búsqueda desde entonces. Pocos días después, el 20 de febrero, Roxana Betzabeth García Vázquez, de 40 años y madre de familia, desapareció en Xichú, añadiendo más incertidumbre a la situación.
La ola de desapariciones continuó el día 23 de febrero, cuando Ana Laura Bustamante Martínez, de 47 años, desapareció en circunstancias aún no esclarecidas en la ciudad de Celaya. La misma ciudad fue testigo de la desaparición de Sandra Noemí Carranco Muñiz, de 39 años, el día 24 de febrero, seguida por la desaparición de Alejandra Carranco Muñiz, de 41 años, el mismo día.
Ante la gravedad de la situación, las autoridades de Guanajuato activaron el Protocolo Alba, una medida de emergencia diseñada para la búsqueda inmediata de mujeres desaparecidas, con el objetivo de localizarlas lo antes posible. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos desplegados, hasta el momento no se han obtenido pistas concretas sobre el paradero de las mujeres desaparecidas.
Hermanas Carranco Muñiz, halladas muertas tras un mes de angustia
El lunes, la ciudad de Celaya fue testigo de un desenlace desgarrador en la búsqueda de Sandra Noemí y Alejandra Carranco Muñiz. Las dos hermanas, desaparecidas desde el pasado 24 de febrero, fueron encontradas sin vida, sumiendo a la comunidad en profundo dolor y conmoción.
Desde su desaparición, la familia y amigos emprendieron una incansable búsqueda tanto en las redes sociales como en las calles de la ciudad, pero sus esfuerzos no lograron traer noticias esperanzadoras. Durante un mes, los mensajes de súplica y desesperación inundaron las plataformas digitales, mientras que la brigada Hasta Encontrarte en Celaya se unía a la búsqueda física de las hermanas, sin descanso.
El mensaje devastador llegó el viernes 25 de marzo, cuando la brigada anunció el hallazgo de los cuerpos de Sandra y Alejandra, poniendo fin a la incertidumbre pero abriendo heridas aún más profundas en el corazón de todos los que las conocían.
A pesar del trágico desenlace, las imágenes y recuerdos de Sandra y Alejandra seguirán vivos en la memoria de aquellos que las amaron. Su legado, ahora marcado por la violencia que les arrebató la vida, se convierte en un símbolo de la lucha constante contra la violencia de género en Guanajuato y en todo México.
La comunidad de Celaya se une en duelo, recordando a Sandra y Alejandra como mujeres fuertes, madres amorosas y seres queridos inolvidables. Aunque su presencia física ya no esté entre nosotros, su memoria nos impulsa a seguir luchando por un mundo más seguro y justo para todas las mujeres.
Las autoridades continúan investigando los detalles de este trágico suceso, buscando respuestas y justicia para Sandra Noemí y Alejandra Carranco Muñiz, cuyas vidas fueron cruelmente arrebatadas, pero cuyo legado seguirá inspirando la lucha por un futuro libre de violencia.
Faltan Ana Laura y Maribel, pero ¿dónde están?
El pasado 23 de febrero del 2024, Ana Laura Bustamante Martínez, de 47 años de edad, fue vista por última vez en Celaya, sin que hasta el momento se conozca su paradero. Las autoridades y sus familiares temen por su integridad y sospechan que pueda ser víctima de algún delito.
Ana Laura es descrita como una mujer de cabello lacio y pelirrojo, con ojos redondos color café oscuro. Tiene una estatura de 1.50 metros y un peso aproximado de 47 kilogramos. Entre sus señas particulares, destacan varios tatuajes en brazos y piernas. La falta de información sobre su vestimenta complica aún más su búsqueda.
Por otro lado, Maribel Fuentes Bribiesca, de 31 años de edad, también desapareció en circunstancias misteriosas el pasado 16 de febrero del 2024 en Uriangato, Guanajuato. Al igual que Ana Laura, no se tiene ningún rastro sobre su paradero. Familiares y autoridades temen por su seguridad y están desesperados por encontrarla.
Maribel es descrita como una mujer de cabello ondulado y castaño claro, con ojos alargados color café oscuro. Su estatura es de 1.63 metros y su peso aproximado es de 55 kilogramos. A diferencia de Ana Laura, no se cuenta con detalles sobre su vestimenta ni señas particulares que puedan ayudar en su identificación.
Estas dos desapariciones adicionales han incrementado la inquietud en la comunidad, que exige respuestas y acciones concretas por parte de las autoridades. Mientras tanto, las familias de Ana Laura y Maribel se aferran a la esperanza de encontrarlas sanas y salvas, pero la incertidumbre y el temor persisten en el aire, dejando la pregunta en el aire: ¿dónde están?
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