Sábado, 30 Noviembre, 2024

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Infancias guanajuatenses arrebatadas por el dolor de la violencia en el estado

Infancias guanajuatenses arrebatadas por la violencia en el estado representan el sector más vulnerable a nivel nacional, solo despues de las mujeres
Vida Pública

Staff Correo

Infancias guanajuatenses arrebatadas por el dolor de la violencia en el estado Infancias guanajuatenses arrebatadas por el dolor de la violencia en el estado

Guanajuato, México.- De un día a otro, ‘Juan Pablo’ se vio obligado a cambiar su pelota de fútbol por una burras y una pala en mano con la que sale junto con su abuelita a buscar entre la tierra a sus papás. Con ellos, sale a gritar en las calles con la esperanza de que su grito de dolor y desesperación sea escuchado no solo por las autoridades, sino por una sociedad que se niega a reconocer la crisis de desapariciones y violencia que está acabando con la niñez en el estado.

Su historia no es única, es una historia común entre al menos 240 niños, que tan sólo en Irapuato y en el colectivo ‘Hasta Encontrarte’ este 30 de abril no podrán vivir disfrutar de un ‘Feliz Día del niño’. En sus corazones está la ausencia, el dolor y la frustración de haber visto como la violencia arrancó de su lado a quiénes más quieren y sueñan con un día verlos regresar.

Infancias guanajuatenses arrebatadas por el dolor

Bibiana Mendoza, integrante del Colectivo ‘Hasta Encontrarte’ compartió que, parte de los problemas que no está atendiendo el gobierno y que no quiere ver en Guanajuato, es la atención a las ‘infancias buscadoras’. Estas son olvidadas y no existe un programa integral para atender a los niños y niñas del estado que están sufriendo los embates de una violencia que ellos no pidieron. Hoy en día los tiene con una familia incompleta y ni siquiera con la posibilidad de salir a jugar a las calles como lo hacían sus papás.

“Ellos han sufrido los embates de la violencia y son los que menos deberían de sufrirla, pero son los que padecen las consecuencias de la violencia que estamos viviendo".

 
Infancias guanajuatenses arrebatadas por la violencia. Foto: Archivo

“Algunos viven el trauma de haber visto cómo se llevaban a mamá y papá de casa personas con armas, algunos viven con esta desesperanza de crecer con esta dualidad de: mi familiar, mi papá, mi mamá no están muertos, pero ¿por qué no me buscan? a lo mejor andan por ahí. Sufren este tipo de abandono. Y a la vez pensar que alguien sí se los llevó a la fuerza y les esté haciendo algo terrible”, compartió Bibiana.

 

 

Infancias guanajuatenses buscadoras sin posibilidad de una buena atención psicológica

Señaló que hasta el momento no existen psicólogos especializados con las infancias que sufren de esta violencia de alto impacto. En las escuelas no se habla del tema de la desaparición y no existe un acompañamiento a este grupo tan vulnerable de la sociedad, pues las autoridades no han reconocido totalmente la crisis de desaparición por la que atraviesa el estado.

“No es solo decir en Guanajuato sí hay fosas clandestinas, sí en Guanajuato hay desaparecidos, sino reconocer en la extensión de toda la palabra y así poder tener varias ramas para tender a las víctimas del estado que en este caso son las infancias, y mucho menos tener la capacidad de dar acompañamiento a los niños”, señaló.

 
 

Compartió que los niños de desaparecidos no se han quedado en casa a llorar, a tratar de no tener miedo, sino que han salido a las calles a buscar a su papá y a su mamá, a su abuela, abuelo, tía y tío.

“Han decidido salir a las calles y cambiar los balones de fútbol por unas burras de búsqueda de campo, y nadie les da más que el colectivo, las herramientas para poder asumirse defensores de derechos humanos":

 
 

“Hay niños que tienen intereses de conocer las guías, los protocolos, de hablar de temas de prevención y se asumen capaces de acompañar a otras personas cuando les desaparecen a alguien”, compartió.

En las marchas se pueden ver a algunos de estos niños que se unen a las manifestaciones para salir a buscar y sensibilizar a la sociedad que no sólo puede verlos como acompañantes de los buscadores, sino a visualizarlos no sólo como víctimas de la violencia, sino también como buscadores, como defensores de derechos humanos que decidieron cargar también una pala para cambiar no sólo su realidad sino la de toda una generación que tiene en sus manos acabar con las violencias y las delincuencias.

 

 

Niños que maduran en la búsqueda por la situación que viven

Bibiana comentó que no todos los niños han asumido ese papel de buscadores sí se tiene un grupo definido de pequeños que están interesados en conocer protocolos, se saben los números de la comisión de búsqueda nacional y estatal, y que están buscando la manera de prevenir la violencia, aún y cuando su contexto cambio totalmente y no existe el apoyo del gobierno para este tema.

Y es que, en muchos casos, los desaparecidos son ambos padres, o uno de ellos que era el sostén económico de las familias, y se quedaron a cargo de los abuelitos. En uno de los casos, compartió la abuelita sale a recoger botellas de plástico para mantenerse porque se quedó a cargo de hasta cuatro infantes que esperan a papá y a mamá, y todavía de cuidar, educar y trabajar, sale a buscar a sus desaparecidos.

 

 

Nadie voltea a ver a las infancias dañadas del estado: buscadora

“Nadie está volteando a ver el futuro de nuestro estado que son las infancias severamente dañadas. Aún y cuando no tienen un familiar desaparecido se encuentran dañados al no poder salir libres a las calles, a jugar a disfrutar de una infancia que muchos de nosotros vivimos, de andar jugando en la calle una cascarita, salir para jugar a las canicas, a los tazos, es algo que los niños de hoy en día no están viviendo, porque la violencia no se los permite”, comentó.

Este 30 de abril consideró que no es una fecha para celebrar sino para reflexionar qué se está haciendo por las infancias en el estado, y un llamado para luchar todos los días para regresar la paz a nuestro estado para que los niños y niñas puedan ser libres y puedan ser felices para construir una infancia digna.

 

 

“Debe ser un día para revisar si como sociedad estamos exigiéndole a las autoridades los derechos de nuestros hijos e hijas, y cuando vean a las madres buscadoras en los cerros, marchando, manifestándose recuerden que esta lucha no es ya solo de nosotros, sino que también es para la sociedad, para algún día salir de esta violencia que nadie pedimos pero que, si está en nuestras manos cambiar”, puntualizó.

 
 

Falta trabajo integral

La activista compartió que Irapuato es el único municipio que ella sabe que cuenta con un programa para atender a los infantes. El cual celebran, pero consideró que necesita profundizar más y vincularse con organismos especializados como REDIM (Red por los Derechos de la Infancia en México) que son especialistas en atención de los menores y con quiénes ya han trabajado en atención psicológica especializadas a estos niños y sí se ve la diferencia de cómo inician y cómo salen, algunos de ellos se asumen buscadores y defensores de derechos humanos.

Y es que incluso no se tiene personal capacitado y da miedo hablarles a los niños del duelo, de enfrentar ese duelo y decirles tú papá está desaparecido, tú mamá no puede regresar o están muertos. Se requiere de darles atención para poder empoderar a los niños, y como ya ha sucedido, decidan trabajar ellos mismos para que las cosas se hagan diferentes.

 



Mencionó que no solo hace falta tener un espectáculo de payasos un fin de semana, sino que dar atención integral a los niños, recordando que son seres humanos que tienen derechos y que incluso el derecho a la alimentación está en riesgo ante las condiciones de vida al ver su contexto familiar cambiado.
Creciendo con valores  

El Gobierno Municipal implementó el programa ‘Creciendo con valores’ en el que se da atención a 52 niños en estado orfandad por la pérdida de sus padres resultado de los delitos de alto impacto, pues al no ser atendidos debidamente se encuentran en un riesgo latente de sufrir graves consecuencias personales y sociales.

 

 

 

El director de Proximidad, Julio González Borja compartió que para este programa se tiene una lista de espera de otros 52 niños más aparte de lo que ya son atendidos y que de entrada se enfrentan con un sentimiento de mucho resentimiento y coraje hacia ellos y la sociedad.

Es muy triste y desgarrador, consideró Julio, pues son niños que, aunque están quebrados, también se tiene la esperanza de poder ayudarlos con ayuda de sus cuidadores a través de atención psicológica y de trabajar con los valores del respeto, la generosidad, entre otras, ya que reconoció que haber pasado por una situación traumática como las que se conocen han sufrido sí puede tener consecuencias negativas para su persona, ¿cuáles? Cada uno enfrenta situaciones diferentes, pero que sí se necesita trabajar.

En tres meses asesinan a 26 menores de edad en Guanajuato

El asesinato de Emmanuel, de 7 años, en San Francisco del Rincón, lleva a las cifras de menores asesinados en Guanajuato, previo al Día del Niño. En el primer trimestre del 2023, suman ya 26 homicidios dolosos contra menores de 0 a 17 años.

De enero a marzo del 2023, asesinaron a 26 menores de edad en el estado, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. De los 26 homicidios dolosos contra menores, 19 se cometieron contra niños y a 7 contra niñas.

El Reporte Estatal de Víctimas detalla que, de los 7 asesinatos de niñas o adolescentes, 6 se perpetraron con arma de fuego y 1 con otro elemento. Mientras que de los 19 menores niños, 18 homicidios fueron con arma de fuego y 1 con otro elemento.

 
 


El conteo de víctimas revela que, en homicidios dolosos, los menores del sexo masculino son los que acaparan las cifras, al menos en el primer trimestre del 2023.

En el mismo periodo, pero del 2022, asesinaron a 34 menores de edad: 33 niños y 1 niña menor de edad.

Durante todo el 2022, se cometieron 151 homicidios dolosos contra menores en Guanajuato: 22 mujeres y 129 hombres, todos de 0 a 17 años.

Último reporte de infanticidio antes del Día del Niño

Este martes 25 de abril, el asesinato de Emmanuel marcó a San Francisco del Rincón. El niño de 7 años caminaba por la calle 8 de diciembre en la colonia San Miguel, cuando una bala perdida lo dejó gravemente herido. El ataque iba dirigido para Hugo, un hombre de 28 años. En ese momento el menor que iba acompañado de un familiar, recibió un impacto de bala en la cabeza que horas después le quitó la vida.

Emmanuel fue despedido en un ataúd blanco, entre globos de Spiderman. A la víctima colateral le quitaron la vida previa al Día del Niño. Este 27 de abril, su familia, amigos y conocidos le lloraron en San Francisco del Rincón.

Corrupción de menores, otro problema que ataca a la niñez de Guanajuato

Además de los 26 homicidios dolosos contra menores de edad en la entidad, la corrupción de menores destaca en las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

En el primer trimestre del 2023, se registraron 87 denuncias por corrupción de menores en Guanajuato. En este delito las niñas menores son las principales víctimas, pues del total de carpetas de investigación, 72 pertenecen a mujeres menores de 0 a 17 años. Mientras que 15, son de menores hombres.

 

 

El pequeño David, una herida que no cierra

¿Alguna vez el pequeño Juan David pudo sonreír a plenitud y disfrutar del ‘Día del Niño’? Pues en las últimas fotografías e incluso en su ficha de desaparición, su mirada luce triste y cansada, y no podía ser diferente si en los últimos años su niñez le fue arrebata por un verdugo que convirtió su vida en un infierno.

Al pequeño Juan David le fallaron todos, le fallaron las autoridades que juraron proteger y garantizar la seguridad de la ciudadanía, le fallaron las instituciones de protección e integración familiar, le falló la sociedad, las leyes y le falló la persona más importante en su vida que no hizo nada para proteger al pequeño a quién le dio la vida.

Faltan unos cuántos días para que se cumpla un año de la desaparición del pequeño niño de 11 años, el 13 de mayo por la noche, día en el que su cuerpo desapareció, pero que su historia se dio a conocer al mundo, reflejando la falta de leyes para la protección de los menores, la omisión de las autoridades, las fallas de las corporaciones y una violencia en contra de los menores de edad, que resulta cruel y desgarradora, y que lamentablemente no es ni el único ni el último caso.

 
 

Un sistema que no protege a los menores

Juan David deseaba regresar con su padre biológico, el señor Agustín con quien no vivía desde hace atrás, y al cual siempre extraño el pequeño, sentimiento que hacía que la furia de su padrastro, un ex agente del Ministerio Público y en ese momento policía municipal de Irapuato en activo, y desde los nueve años, desquitó todo su enojo en contra del pequeño, cuyas golpizas fueron implacables.

Esa noche del 13 de mayo, contó la mamá de Juan David a medios de comunicación, ella vio cómo su pareja mató a golpes a su hijo, luego de que éste le dijo que ya no quería vivir con él, pues no era su padre.

Aunque supuestamente fue encerrada en una habitación, Reyna contó que cuando salió vio como Miguel Ángel azotaba al niño contra la puerta para después dejarlo agonizar en el suelo, fue cuando ella se acercó y tocó el estómago de su hijo y aún respiraba, pero nadie llamó a la ambulancia, nadie ayudó al niño y media hora después dejó de respirar, fue cuando su padrastro llamó un Uber y se lo llevó envuelto en una bolsa negra y tras varias horas, en la madrugada del 14 de mayo regresó sin el cuerpo del niño.

DIF ya tenía conocimiento del caso

Después ordenó a Reyna cómo interponer una denuncia, con conocimiento de ministerial, le dijo que contará que el niño había salido por una de las ventanas a buscar a su papá y ya no había regresado, lo cual obedeció, pues asegura tenía miedo por el pequeño hermano de Juan David que tampoco es hijo de su pareja y del hijo en común que tenían ambos.

Esta versión no fue creída por la familia paterna del pequeño, que se organizó y comenzó la búsqueda, comenzaron la marcha y alzaron la voz, pues ellos ya sabían de la violencia que sufría el niño, pues en más de alguna ocasión lo vieron golpeado, incluso con el brazo roto a lo que él decía que se había caído.

 
 

¿Hay algo qué celebrar?

Las denuncias que en su momento no fueron escuchadas por las autoridades quedaron exhibidas y el pequeño que vivía detrás de una ventana con barrotes de varilla y pedía comida a los vecinos tratando de cubrir sus heridas, esa voz débil, temerosa de ser castigado y golpeado, por fin se hizo escuchar.

Y es que los familiares de Juan David señalaron que ya habían puesto denuncias por maltrato en el DIF Municipal, pero esas denuncias no tuvieron eco solo quedaban en un registro, intento de seguimiento y un expediente más archivado, sin acciones, sin seguimiento, sin solución.

 
 

**Con información de Nayeli García e Ivonne Ortiz

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