Para ellas, hoy duele más que nunca su ausencia: las madres buscadoras de Guanajuato

Guanajuato, México.- Este 10 de mayo para las madres buscadoras de Guanajuato, difícilmente tendrán algo qué celebrar, ya que la búsqueda de sus familiares desaparecidos es una herida que no cerrará, ya sea porque les arrebaraon a sus seres queridos y aún no los encuentran o bien porque los encontraron, pero sin vida.

Desde hace cuatro años la vida de Elvira no volvió a ser la misma. Un 22 de marzo del 2019 marcó su presente y futuro, ya que ese día desapareció su nieto Elliot Janick Barrios Molina, en ese entonces de 14 años y de quien actualmente se desconoce su paradero.También hace un año las desgracias volvieron a la vida de Elvira, pues su nieto Emiliano -hermano de Elliot- falleció ahogado en un lago de Estados Unidos.

Y apenas el pasado 15 de abril, Joseph Ian -otro de sus nietos y también hermano del joven desaparecido-, fue víctima colateral de un ataque armado en la colonia Geovillas, él viajó de Texas a Celaya sólo para visitar a su abuelita y pasar unos días de vacaciones en la ciudad que lo vio nacer. Hoy Elvira platica que no hay nada que celebrar en este 10 de mayo, pues perdió a sus tres nietos que eran su razón de ser de ella y de su hija, quien resignada dice que sus tres hijos ya están juntos.

“El día de las madres no hay nada que celebrar. He buscado a Elliot sin descanso y lo seguiré buscando”, expresó la mujer que desde hace cuatro años ha recorrido de manera incansable predios y fosas buscando a su nieto.

Triste pero firme en sus palabras y en sus actos, Elvira platicó que tiene que ser fuerte por su hija y porque tiene que seguir buscando a Elliot. Tiene mucha fe en que lo encontrará.

 

 

Las desgracias le han pegado fuerte a la familia de Elvira, pues los tres hermanos ya no están y ella saca fuerzas de donde puede para darse ánimos a sí misma y a su hija.

“Son mis nietos, pero yo apoyé a mi hija a criarlos cuando estaban aquí en Celaya. Luego se fueron a Estados Unidos. Estaban en Texas Emiliano y Joseph, Elliot se quedó aquí conmigo en Celaya, los tres siempre fueron muy unidos, se querían mucho y siempre estaban comunicándose hasta que comenzaron las desgracias. Primero desapareció Elliot, luego falleció Emi poco tiempo después de que vino a visitarme a Celaya y regresó (a Estados Unidos) y ahora lo que pasó con Joseph”, contó.

Joseph de 21 años, fue víctima de un ataque armado la noche del 15 de abril cuando estaba en compañía de un familiar en la colonia Geovillas, a quien fue a visitar, ya que se regresaría a Estados Unidos dos días después. Ese día no imaginó que a su tío lo buscarían para asesinarlo y justo en ese momento estaría el joven con él, quien también fue atacado a balazos.

 

 

La historia de Elvira conmocionó a sus familiares, amigos y conocidos ya que en sólo cuatro años perdió a sus tres nietos a los que crio desde pequeños. Incluso en redes sociales surgió una publicación titulada “Me dueles Celaya, me dueles”.

“Hoy escribo por mi querida amiga Elvira. Su nieto mayor fue víctima de personas sin corazón que le arrebataron la vida, su único error fue estar en el lugar, el momento equivocado, y con las personas equivocadas, el chico solo vino de vacaciones, él era residente estadounidense, nacido aquí en Celaya la tierra que lo vio la nacer, es la misma tierra en la que en unos días será sepultado. Dejando una madre desconsolada y una abuelita afligida, con el corazón hecho añicos.

“No pido más que poder salir a la calle a caminar, y volver a sentirme tranquila, pero eso al parecer y con toda la tristeza de mi corazón, mis ojos no lo volverán a ver. Ese derecho natural que todo individuo debería de tener, nos fue arrebatado desde hace algún tiempo y cada vez lo desarraigan más de nuestras vidas”, escribió Yolanda y cuya publicación se hizo viral hace tres semanas.

La historia de Elliot

Actualmente Elvira es buscadora independiente, sí tiene relación con otras buscadoras y colectivos, pero decidió emprender sola su camino para buscar a su nieto Elliot Janick Barrios Molina, quien desapareció un 22 de marzo del 2019.

Al momento de su desaparición, Elliot tenía 14 años, ese día sólo salió a visitar a su tío que vivía en la colonia Tresguerras pero ya no regresó a casa debido a que un comando armado atacó a su familiar y a otras dos personas que estaban con él en su domicilio, pero del menor no se volvió a saber.

 

 

Elliot Janick Barrios Molina fue a la casa de su tío justo a la hora en que ocurrió el ataque, en un primer momento a sus familiares les dijeron que era una de las personas asesinadas, con el paso de las horas se comprobó que el joven no estaba entre ellos. Pero tampoco se supo qué pasó con él, sin que hasta la fecha aparezca.

Su familia, sobre todo su abuela materna no ha dejado de buscarlo desde el día que desapareció.

No hay día que sus allegados no publiquen en redes sociales el añoro que tienen para que Elliot Janick vuelva a casa. También han hecho búsqueda en campo junto con colectivos de personas desaparecidas y búsqueda en vida en Ceresos y han recurrido en varias ocasiones a la Fiscalía General del Estado, además se han mandado oficios de colaboración a otros estados, sin embargo, no se le ha encontrado.

Su mamá y su abuela de Elliot tienen fe en que esté vivo en algún lugar, es por ello que siguen buscándolo y no pararán de buscarlo hasta encontrarlo.

Y aunque la Alerta Amber sigue activa no se sabe nada de él, sólo se supo que al momento de su desaparición iba en una bicicleta roja.

El 10 de mayo Damiana no celebra: busca a sus dos hijas desaparecidas

Damiana Jiménez es una madre que este 10 de mayo, como todos los días, experimenta un doble dolor: sus dos hijas, Alejandra Ana y Cristina desparecieron hace un año. Ella no celebra. Lo único que desea es volver a verlas. Ha sido como una madre para sus dos nietas, aunque asegura que nada sustituirá al vacío que deja una madre. Este caso se dio en San Francisco del Rincón.

Ambas desaparecieron el 26 de febrero del año pasado. No iban juntas. Alejandra estaba en el centro de rehabilitación del Maguey. Tenía dos semanas de haber ingresado. La primera versión que se le dio, fue que Alejandra, de 32 años, había escapado. Pero pasaron los días, y no regresó tampoco a su casa. Después, señala la propia madre, se le dio la versión que la habían dejado ir.

"Hasta ahorita, a pesar de que está la denuncia, la Fiscalía se quedó con esa versión, porque ya no se han hecho investigaciones. No hay resultados. El centro no tenía videos ni nada que aportar a la Fiscalía.

"Si mi hija se escapó y se pensaba ir, yo me pregunto: ¿por qué no se llevó su ropa? La poquita ropa que tenía me la entregaron a mí. Si mi hija se iba a escapar, ¿por qué no llevaba tenis y chamarra?", dijo.

Ese mismo día, Ana Cristina tomó su moto alrededor de las seis de la tarde y salió de su vivienda, en el predio Río Santiago. Fue a realizar unos pagos a Elektra, pero ya no regresó. Fue la última vez que la vieron.

"Policía Ministerial tiene muchos indicios, tiene videos, tiene material para trabajar, pero no se recibe una respuesta. Siempre que voy me dicen todos mis derechos, pero ¿dónde están?".

Cuando se refiere al 10 de mayo. Se le quiebra la voz. Dice que no hay palabras para describir el dolor de una madre "a la que le han arrancado el alma. Es muy difícil, no nada más el 10 de mayo, sino todos los días".
Las búsquedas y las manifestaciones no paran. Pero no ven resultados. Por eso Damiana no se detiene. Este 10 de mayo, lejos de celebrar, ella estará en la Manifestación de la Dignidad Nacional, Madres Buscando a sus Hijos e Hijas.

Esta iniciará a las 12 del día en la Glorieta de Bomberos, y se señalará el repudio al asesinato de la madre Buscadora Teresa Mayahuel, recientemente en Celaya.

El 1º de mayo del año 2018 cambió la vida para Alma Lilia Martínez; ese día hombres armados se llevaron a su hijo Daryl, del puesto de comida que atendía en el municipio de Villagrán; hoy ha dejado todo para buscarlo y encontrarlo, ha pasado los festejos de cumpleaños, navidades, año nuevo día de la madre y demás recorriendo, buscando y organizando a más familias que como ella tienen algún desaparecido:

“Esos festejos han quedado olvidados, no hay nada que festejar, no hay ganas de fiestas”, dijo.

Paso por las calles y veo como en las casas están festejando, me remueve el recuerdo, mis tiempos de cuando estaba mi hijo, ahora ya no hay nadie, ahora el festejo es con marchas, yendo a los penales, buscando a la gente; esperando que pase ese día y nos duele igual que el primer día que ya no supimos de ellos.

“Cuando llegan estas fechas si nos da para abajo, los cumpleaños, los festejos de las familias, pero el más doloroso y más fuerte, es el día de las madres. Incluso aquellas que tienen más hijos, no viven igual que antes, cuando sabían dónde estaban sus hijos, porque ninguno otro suple u ocupa el lugar del que está desaparecido, cada hijo es diferente y ocupa un lugar en la vida de las mamás”, recordó.

Martínez busca desde el 2 de mayo del 2018 a su hijo Gustavo Daryl Gómez, desapareció desde el 1o de mayo de ese año en Villagrán, se lo llevaron de su negocio:

“Desde entonces no sé nada de mi hijo, son 5 años que han pasado, pero como desde el primer día seguimos adelante, no se pierde el interés, no se pierde la fe, el dolor disminuye, estamos igual que el primer día, aquí seguimos”, dijo.

La líder del colectivo Salmantinos Unidos Buscando Desaparecidos, dijo que tienen apoyo psicológico de las autoridades, pero aún con todo lo que les ofrecen, asistencia médica, de todos modos el dolor sigue presente, si nos ayuda porque de lo contrario andaríamos peor, “en mi caso desde el día que mi hijo ya no regresó a casa hay una angustia en el pecho todos los días a cada rato, cada que es de noche, en las madrugadas me despierto pensado en dónde estará, como estará y todo eso.

"A veces me pregunto cómo le haga para levantarme, para agarrar fuerzas y vuelvo a darme ánimos sola para volver a empezar, 5 años he vivido con la esperanza en cada día, de que éste será mi día; nunca pensé que andaría en estos temas, era maestra de educación física, tenía mi gimnasio, he dejado todo; nunca pensé que iba a andar escarbando y así seguirá hasta encontrarlo”.

Dijo que este movimiento que inició con este colectivo ha valido la pena, “aunque quizás no he encontrado a mi hijo, el trabajo que se ha hecho ha logrado que otras familias encuentren a sus hijos y eso nos alimenta el alma”, dijo.

Alma Lilia Martínez se da tiempo para pedir a las mamás que están pasando por la misma situación que no pierdan la fe, que no desistir, no bajar la guardia y seguir hasta conseguir lo que se quiere; porque cada día es una nueva oportunidad para seguir buscando.

“En mi caso no he encontrado a mi hijo, pero seguiré buscando como una aguja en un pajar, pero no desistiré; no me voy a rajar; no me voy a rendir, lo único que busco es traerlo a casa de la manera que sea; si lo encuentro con vida se acabaría el sufrimiento de tanto años de que no está y si llegase de otra forma, también, para mí sería como una bendición porque él descansaría en paz y yo también".

 

"Hoy tengo guardado muchos abrazos para ellos; todos los días lo recuerdo, era muy latoso me llegaba a molestar tantas llamadas y mensajes; ahora quisiera, aunque sea un mensaje; voy a seguir buscando a mi hijo hasta encontrarlo”, concluyó.

Sandra Mercado Sánchez, representante del colectivo De Pie Hasta Encontrarte Guanajuato, del municipio de Silao, fue una madre de familia que tuvo desaparecida a su hija durante 4 años, afortunadamente la encontró con vida, pero ahora busca justicia, además de ayudar a otras madres a localizar a sus hijos.

Mercado Sánchez es la impulsora y gestora de las búsquedas dentro de los penales del Estado, para desde ahí tocar el corazón de los presos y si tienen alguna información que la compartan para localizar a los desaparecidos.

Del día de la madre dice:

“Cuando estamos en esta situación no hay nada que festejar, aunque tengamos más hijos, aunque haya más familias, porque las personas que están desaparecidas, son las que necesitamos encontrar para que completar la familia. Por ello a las que están pasando por una situación así, se les pide que sigan luchando, no hay que decaer, hay que tener muchas fuerzas para poder luchar con todo, con las autoridades y todo lo que se nos venga encima, porque siempre somos revictimizadas y eso no se vale", explicó.

Del caso de su hija, no quiso abundar más; pero dijo:

“El colectivo se formó de Pie Hasta Encontrarte y es Verdad y Justicia, en mi caso estoy en busca de Justicia y como hay muchas mamás”.

La activista destacó que lamentablemente siguen las desapariciones:

“No sabemos un modus operandi; pero las mujeres necesitamos ser buscadas de forma diferente, porque una mujer pode ser víctima de trata o mucha de las veces sufre violencia familiar y hay que hacer un línea de investigación. En caso seguiré hasta que las compañeras me permitan seguir aquí, estarlas acompañando y ser su vocera; dado que actualmente este este colectivo se han agrupado unas 70 familias que tienen desaparecidos y vienen de Acámbaro, Jerécuaro, Apaseo el Alto, Apaseo el Grande, Celaya, León, San Francisco del Rincón y Jaral del Progreso”, dijo.

Finalmente dijo que el amor de madre las llama a seguir en la lucha, que nada los detendrá hasta encontrarlos.

“Estamos muertas desde que se los llevaron”: la lucha de las madres buscadoras de Guanajuato

Norma Patricia Barrón ya no le tiene miedo a nada. El temor se fue cuando su hijo Kevin Damián Martínez Barrón, de 17 años, fue secuestrado y posteriormente desaparecido en Irapuato. “Estamos muertas desde que se los llevaron”, dice para referirse al dolor que ella, como muchas madres buscadoras de Guanajuato sufren. Un dolor que se siente aún más previo al Día de las Madres.

Norma es una madre que se convirtió en abogada, investigadora, líder y buscadora a raíz del secuestro de su hijo Kevin, de 17 años, además de su esposo Juan Rodríguez, el 1 de junio del 2019. Ese día, hombres armados llegaron a su domicilio, encañonaron a las víctimas y se las llevaron en camionetas.

Cuatro años después del terrible hecho, Norma, del colectivo Una Luz en el Camino, no ha localizado a su esposo y a su hijo, a pesar de haber pagado un millón de pesos de rescate a integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación, quienes le hicieron creer que se trataba de un secuestro.

Con la voz entrecortada, la madre buscadora de Irapuato dio su testimonio junto a otras tres madres que viven la misma situación en Guanajuato, y que pertenecen a diferentes colectivos de búsqueda. Ante una Jornada Académica de la Universidad de Guanajuato, las madres contaron la intención que las une y las hermana: buscar a sus hijos hasta encontrarlos.

“Duré dos meses confiando en la autoridad, pudimos obtener ese pago, sin embargo, no fueron liberados. Llega un momento de tensión, por donde quiera pides ayuda. Mi hijo era muy querido, era estudiante del CBTIS. Amigos de ellos me hicieron una colecta, eso es lo que tengo en mi corazón y agradezco a esas personas. Que también como hay gente mala en la sociedad, hay gente buena”, contó Norma Patricia Barrón.

Previo al Día de las Madres, ellas no tienen nada que celebrar. Son fechas en las que el dolor y perdida, que en el día festivo reviven aún más.

De odontóloga a policía federal, investigadora y abogada, así fue el radical cambio de Norma. La lucha por la búsqueda de sus seres queridos rebasó su formación académica y profesional. Recuerda que incluso revisaba piezas dentales de restos, para ver si coincidían con las de su hijo y su esposo. A cuatro años de la búsqueda continúa en la lucha.

 

Norma conoció de cerca a los presuntos responsables de la desaparición de su hijo y su esposo. Llegó a tal nivel de información que ahora vive con un mecanismo de protección. Camina vigilada por elementos de la Guardia Nacional.

 

“Me enfrenté a una Fiscalía omisa, sin una investigación seria, sin una investigación pronta. Me enfrenté a los mismos delincuentes, yo fui personalmente a la casa del secuestrador de mi hijo a pedirle que me lo devolviera, tanto a él como a mi pareja. Justo me hizo una llamada telefónica que me ayudó en el juicio para poderlo condenar a 70 años de prisión”, dijo la buscadora.

Historias como la de Norma causaron impacto y sensibilización en los estudiantes de Derecho de la Universidad de Guanajuato. Tres madres buscadoras, además de ella, contaron su historia. Pertenecientes a colectivos de búsqueda independientes como Una Promesa Por Cumplir y Hasta Encontrarte, rememoraron a su compañera Teresa Magueyal, la madre buscadora que fue asesinada el 2 de mayo, en Celaya. La víctima buscaba a su hijo José Luis Apaseo Magueyal, desaparecido el 6 de abril del 2020.

Las madres pidieron al Gobierno de Guanajuato la garantía de seguridad a la hora de hacer sus búsquedas, así como la pronta respuesta y eficiencia a la Fiscalía General del Estado y a la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas. Los recursos económicos fueron otro tema que salió en el conversatorio, pues la mayoría de las madres se quedan sin recursos al abandonar sus trabajos por priorizar la búsqueda de sus hijos o familiares desaparecidos.

"¡No tenemos nada qué festejar!"

Madres de personas desaparecidas en los municipios de los Pueblos del Rincón se reunieron este 10 de mayo para exigir la localización de sus hijos. Las 22 familias que representan el colectivo Buscando Pablitos se encontraron desde las 12:00 p.m., en la glorieta de Bomberos, de San Francisco del Rincón.

Ahí, expresaron que una vez más viven un día de las madres ni nada que celebrar, pues acumulan ya varios meses de no poder ver a sus hijos. El colectivo busca conjuntar esfuerzos con los presidentes municipales de Manuel Doblado, Blanca Preciado; San Francisco del Rincón, Antonio Marún, y de Purísima del Rincón, Roberto García Urbano. Hasta el momento solamente han tenido un encuentro con el presidente municipal purisimense.

"Nos falta una persona en la mesa. Nos falta un hijo, nos falta una hija. Nos falta una mamá. Nos falta un papá, nos falta un hermano, nos falta una hermana", exclamó una de las asistentes.

Exigen reunión con alcalde de San Francisco del Rincón 

"No tenemos nada qué festejar. No tenemos regalos por parte del alcalde, porque sí, el alcalde (de San Francisco del Rincón) estuvo dando regalos el día domingo, pero la atención que hemos venido solicitando, nuestra reunión para atender a las familias de desaparecidos, nosotros no importamos".

Exigieron que haya una respuesta de las autoridades ante la situación que las familias de estos municipios han vivido.

El calor no fue impedimento para que las madres y familiares permanecieran en la glorieta para manifestar consignas, pues consideran que son solo "una estadística más".

"Vinimos a decirles a estas papás, mamás, que pierdan el miedo a buscarlos. Vamos a buscarlos nosotros, porque las autoridades no lo van a hacer, para ellos son una carpeta mas", expresaron.

**Con información de: Luz Zárate, Jonathan Juárez, Cuca Domínguez e Ivonne Ortiz