Yerbamala
1.- En la cúpula: Mario y Citlalli
El conflicto entre parceleros logró a la larga que Morena consiguiera la selección de su presidente y secretaria general, en un proceso que, sin ser democrático por medio del voto universal y secreto, las encuestas, aplicadas y avaladas por el Instituto Nacional Electoral (INE), le dieron credibilidad. Luego de tres aplicaciones -una de desempate-, el vencedor es Mario Delgado Carrillo, diputado federal muy cercano al presidente, Andrés M. López Obrador y al canciller Marcelo Ebrard; lo último “marca” su periodo que pasará por las presidenciales del 2024.
El nuevo dirigente nacional, Delgado Carrillo y la secretaria general, senadora Citlalli Hernández Mora, tienen “un gran reto”: además de la construcción de los acuerdos internos: lograr que el Movimiento de Regeneración Nacional -sin cortes de uñas-, sea un partido político disciplinado y capaz de gobernar con sentido de Estado. El egresado del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), itamita, será el conductor de un partido de izquierda, al momento, la gran crítica.
Para los morenos en Guanajuato, se podría asegurar que antes del desempate, casi todos los grupos ya estaban con él, lo cual permite a Mario Delgado contar con las senadoras, Martha Lucía Micher y Antares Vázquez; el diputado federal, Miguel Ángel Chico; la dirigente estatal, Alma Alcaraz y hasta el diputado local Ernesto Prieto Gallardo. Caso especial de Ricardo Sheffield Padilla, titular de la Profeco, quien no estuvo con Mario y Citalli, pero no los desafío y podría signar un pacto de conveniencia y unir esfuerzos por Guanajuato.
2.- Naranja a la vista
El abandono de la población de las medidas preventivas para contener la expansión de la pandemia de COVID-19 en el estado de Guanajuato, en conjunto con el relajamiento de las autoridades municipales para imponer la sana distancia y el uso del cubrebocas, así como evitar concentraciones masivas, permitió que, luego de la declaratoria del amarillo en el semáforo epidemiológico, en 23 municipios se incrementaran los contagios.
Daniel Alberto Díaz Martínez, secretario de Salud estatal, sostendrá el semáforo amarillo en los próximos días. Esto, permitirá no suspender actividades económicas relacionadas con Día de Muertos. La jugada es una alta apuesta, pues se ponen las fichas en la capacidad de atención hospitalaria disponible. Sólo se pasará al naranja cuando se rebase el tercio de la capacidad de ocupación, hoy no llegaba al 20 por ciento.
En Celaya, Guillermo Caballero Mendoza, delegado del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), alertó que en las últimas dos semanas aumentó al doble la cantidad de pacientes de COVID en sus hospitales.
Noviembre será un mes de pronóstico reservado, luego de que rebasemos los 50 mil contagios. Ayer en un solo día tuvimos 409 confirmados más y sumamos 48 mil 23 infectados. Los muertos ya suman 3 mil 210. En el mapa nacional dado a conocer anoche, Guanajuato es un punto amarillo sitiado de naranja por todos lados.
3.- El sacrificio tricolor
El Partido Revolucionario Institucional, tercera fuerza estatal, está en un proceso de articulación de sus órganos municipales, lo cual le ha permitido ir sondeando qué perfiles podrían ser lanzados como candidatos para las elecciones de junio de 2021. De entrada, de los once alcaldes con que cuenta, dos ya se descartan por imposibilidad de reelección: los de Jaral del Progreso y Pueblo Nuevo. De los nueve restantes, hombres, por los cánones de igualdad de género que marcan las leyes y los acuerdos del Instituto Electoral del Estado de Guanajuato (IEEG) -los bloques de competencia-, al menos dos, eso es seguro, deberán ceder la candidatura a una mujer priista.
Todo esto podría modificarse luego de que el 14 de noviembre los partidos políticos anuncien al IEEG sus intenciones de coalición, lo que formaría un nuevo balance para la entrega de candidaturas por género. En tanto, este próximo martes el Consejo Político Estatal del PRI determinará el método de elección de sus candidatos, apertura o no de coaliciones, órganos de postulación y más. Con ello, los aspirantes a una candidatura deberán mover sus fichas.
Por ahora entre los primeros nombres que podrían anotarse en el tricolor para las municipales está Francisco “Curro” Rivera para San Diego de la Unión; en el Corredor Industrial: Coral Valencia en Salamanca; Francisco Velázquez para Silao; Claudia Navarrete, Fulgencio Hinojosa, Arcelia González, Yulma Rocha y Eduardo Nieto para Irapuato; en León, Martín Ortiz, Pablo López Marún, Alfonso Orozco, Vanessa Montes de Oca y bajo la manga… José Arturo Sánchez Castellanos. En Celaya, suena Mauricio Hernández.
De la Valija. Lucha frente a El Cubilete
Convencidos de que las decisiones de las candidaturas a los puestos de elección popular vendrán de la nomenclatura del PAN y que todavía falta tiempo, los buscadores se siguen anotando. En Silao, la “candidatura” por la alcaldía para la diputada federal, Melanie Murillo Chávez, creó polémica y le pusieron de opositor a José Antonio Patlán Amaro, de la Secretaría de Desarrollo Social estatal; y al distrito federal 9 que hoy representa la diputada, lo pretende Sixto Zetina Soto.
Los panistas no tienen duda que las definiciones de posiciones serán por rigurosa “designación”, por ello la lucha interna está pasando del deseo manifiesto a la posibilidad latente. En ese sentido se planteó la reconsideración, tomando en cuenta la fuerza del alcalde Antonio Trejo -se reelija o no-, empatarla con los otros esfuerzos. En esa coyuntura se inscribió Sixto Zetina, proponerse en el distrito divido entre Silao e Irapuato, donde fue alcalde. Lo federal, se define con Marko Cortés.
Andrés Manuel López Obrador
Como en marzo, el residente del Palacio Nacional afirma tener todo bajo control y que su gobierno está preparado para enfrentar, ahora, la segunda ola de contagios de COVID-19, aunque matiza y añade que, en esta ocasión, su preocupación ya no está en tener camas ocupadas o no, sino en el número de muertes que se puedan evitar.
Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República, parece asimilar, al fin, que detrás de cada deceso hay una familia dolida e indignada por la pérdida, luego de ocho meses consecutivos de una retórica de oídos sordos de la 4T al reconocimiento de la alta letalidad de la enfermedad, la carencia escandalosa de pruebas entre la población y el rechazo a recomendaciones nacionales e internacionales.
La preocupación por las muertes, acto sensible, de parte de López Obrador, se opacó más tarde con su grandilocuencia “… se garantizó que ningún enfermo de COVID se quedara sin ser atendido, sin tener una cama, un médico, una enfermera”. Los enfermos y sus familias ya dirán si fue así.