Diócesis de Celaya desconocía si ‘Padre Gume’ recibió amenazas

Luz Zárate

Celaya.- El asesinato del sacerdote Gumersindo Cortés González, consternó a todos los que integran la Diócesis de Celaya y los exhorta a seguir trabajando y orando a favor de la paz y la seguridad en la entidad.

Así lo manifestó el vocero de la Diócesis de Celaya, el sacerdote José de Jesús Palacios, quien confirmó que el padre Gumersindo Cortés González, fue asesinado el pasado sábado y manifestó que no tenían información o indicios de que el ‘Padre Gume’ hubiera sido amenazado, secuestrado, extorsionado o víctima de algún delito.

Jesús Palacios destacó que serán las autoridades de la Fiscalía General del Estado quienes informen el móvil del asesinato.

El sacerdote señaló que sabían que Gumersindo Cortés estaba desaparecido desde el sábado pasado porque no llegó a oficiar las misas de ese día y del domingo, pero nunca se imaginaron que hubiera sido víctima de una ejecución.

“Estamos consternados, no nos esperábamos una cosa así. Y tampoco sabemos el motivo (del asesinato), a lo mejor con esa confianza que tenía con los amigos sacerdotes hubiera dicho una cosa al respecto, pero al parecer no había tenido amenazas”, señaló el sacerdote Jesús Palacios.

El sacerdote de 63 años, estaba al frente de la Parroquia de Cristo Rey, de la comunidad Mesa de López, en Dolores Hidalgo, y fue localizado el sábado asesinado y con huellas de violencia que indican que podría haber sido torturado. Su cuerpo fue encontrado con heridas de bala  y a un lado de su camioneta en un camino de terracería entre las comunidades de Cerrito de Guadalupe y San Antonio de la Minas, en Dolores Hidalgo.

Jesús Palacios informó que el sábado le informaron que apareció el cuerpo de un hombre con las características físicas del ‘Padre Gume’ pero no se imaginaron que se tratara de él, hasta que se confirmó su identidad.

“Recibimos la noticia con consternación, con dolor y no solo por ser el padre Gume, sino porque es la pérdida de una vida humana. Nos cala hondo y recuerda que debemos seguir promoviendo el respeto a la vida humana. Es el primer caso de un sacerdote que muere en tales circunstancias aquí en nuestra Diócesis”, mencionó.

Jesús Palacios destacó que les duele la muerte de su compañero sacerdote, pero no piden un trato distinto al del resto de los ciudadanos, pues este hecho delictivo duele del mismo modo que afecta en el ánimo los asesinatos de amas de casa, estudiantes, profesionistas, comerciantes, entre otros. Dijo que en general “la inseguridad y violencia duele”.

Gumersindo Cortés era originario de Dolores Hidalgo, fue director de la Santa Casa de Ejercicios de Atotonilco; fue párroco de la Asunción, en el Barrio del Zapote en Celaya; nació el 13 de enero de 1957 y fue ordenado presbítero en Celaya el 9 de marzo de 1983.

Tenía 38 años de sacerdocio, era “amiguero, trabajador, participativo y siempre entregado a su trabajo de pastoral”, destacó el vocero de la Diócesis de Celaya.

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SZ