Sequía impacta en parques de Guanajuato Capital, así lucen ahora

Guanajuato, Guanajuato.- La mayoría de parques y jardínes en la ciudad de Guanajuato se encuentran bastante afectados por la sequía; Florencio Antillón, Jardín Embajadoras y de la Unión son los únicos que conservan verdor en su follaje mientras que El Cantador, Pastitos y Paseo Asland, los más visitados por los habitantes locales, están entre los más afectados. 

El equipo de Periódico Correo realizó un recorrido por los principales parques y jardines de la ciudad para revisar el estado en el que se encuentran para recibir tanto a visitantes locales como de fuera de la ciudad; de entre los espacios visitados el parque Florencio Antillón destaca no sólo porque la mayoría de su mobiliario se encuentra en perfecto estado y en sus pasillos puede encontrarse poca basura: allí los árboles y la vegetación de verde intenso crean una atmósfera que refresca tanto como revitaliza. 

En un estado similar se encuentra el Jardín Embajadoras. Si bien puede encontrarse el piso polvoso en algunas secciones, la sombra de los árboles, la cercanía de lugares donde comprar comida, bebida y los amplios pasillos todavía permiten que el calor allí no sea sofocante. Lo mismo puede decirse del Jardín de la Unión, frente al teatro Juárez. 

El parque de Las Acacias a pesar de estar a apenas unos metros del Florencio Antillón no ha corrido con la misma suerte: en muchas secciones donde debería haber césped sólo queda polvo y tierra resquebrajada de lo seca que está. La actual administración en años recientes invirtió en la repoblación de este parque con distintas plantas pero de aquel esfuerzo sólo queda una lona de recuerdo. 

Fotografía de la comunidad disfrutando del Jardín Embajadoras, resaltando su importancia como espacio de recreación. oto: Josué Castillo

La situación de los parques de Pastitos, el paseo Ashland y el jardín El Cantador es análoga: aunque no puede decirse que estos espacios estén tan secos que sea incómodo estar allí es notable que no se ha hecho nada por evitar que la falta de agua genere mayores problemas. Algunas hojas se aferran a las ramas de los árboles pero la polvareda que levanta la tierra indica que no se han regado lo suficiente y que más pronto que tarde estos árboles se secarán. La infraestructura de estos lugares, desde los botes de basura hasta los juegos infantiles, persiste pero también revela que el interés por darles mantenimiento ha sido mínimo. 

Los parques de Pastitos, Paseo Ashland y El Cantador no sólo son importantes pulmones del centro de la ciudad; son fundamentales para la vida de muchos guanajuatenses que allí hacen ejercicio, aprenden alguna disciplina deportiva con alguno de los instructores que allí da clases por precios módicos; los juegos infantiles de Pastitos que tanto mantenimiento requieren son la única opción de diversión para muchas niños y niños de las colonias vecinas y la poca sombra que aún dan los árboles de la zona el único descanso entre turnos de muchos trabajadores del centro de la ciudad. 

El contraste entre el estado de unos y otros parques llama más la atención cuando consideramos que aquellos que más atención han recibido por parte del ayuntamiento y en los cuáles se han ocupado de que la falta de agua no haga disminuir su belleza son a su vez los más visitados por los turistas. Situaciones como esta y  los cada vez más comunes cortes a la circulación en la ciudad con motivo de algún evento turístico o deportivo han generado en la ciudadanía la percepción de que en la actual administración los intereses de la industria turística se ponen por encima del de los guanajuatenses. 

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