Sí hubo una más: Cruel feminicidio de Claudia Cano en Valle de Santiago
Valle de Santiago, Guanajuato.- A menos de una semana del 8M, varias víctimas de feminicidio han sido reportadas como desparecidas o se han hecho públicas sus formas de ser asesinadas. Tal parece que las crueles maneras se normalizan cada vez más y esto pone un foco rojo para las autoridades. Como el caso de Claudia Cano en Valle de Santiago, en el cual su cuerpo viajaba como copiloto. Este acto lo realizó su feminicida ‘Enrique N.’ quien viajaba con el cuerpo para no ser detenido por las autoridades.
Pasada media hora de la medianoche, a las 00:30 horas, de este lunes, policías preventivos identificaron una camioneta tipo Silverado roja sobre la calle Insurgentes casi esquina con calle Hidalgo de la colonia El Socorro. El conductor al verlos realizó movimientos evasivos.
Al ver dicha actitud los elementos, de inmediato se acercaron y pidieron al conductor de la unidad detuviera el motor. Le pidieron que descendiera y el conductor se identificó como Enrique ‘N’. de 24 años. Pero dentro de la camioneta en el asiento del copiloto, estaba recostada una mujer que mostraba sangre en cabeza y manos.
Claudia Cano y su feminicida venían de jaripeo
Los uniformados solicitaron apoyo de los paramédicos y al llegar elementos del cuerpo de Bomberos voluntarios, checaron signos vitales y dijeron que la mujer ya había fallecido. Enrique explicó que ella se llamaba Claudia Cano Ramírez, que venían por la carretera federal Salamanca-Valle de Santiago. Durante el transcurso de viaje y después de haber discutido, aseguró que Claudia se salió de la camioneta por la ventana, esto le dejó varias heridas y golpes, según la versión de Enrique.
Enrique N. fue detenido de forma inmediata y se dio parte a las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) Guanajuato, para que se realicen las investigaciones que les den a conocer qué fue lo que ocurrió en realidad y se deslinden las responsabilidades que haya lugar.
Tenía pocos meses de haberse mudado con ella
Su familia responsabiliza a su pareja Enrique 'N' con quien tenía 2 meses viviendo y a quien policías de Valle de Santiago detuvieron cuando viajaba en su camioneta a exceso de velocidad la madrugada del domingo por una colonia de aquel municipio. En ese momento, se dieron cuenta que llevaba a la joven mujer si vida.
Indignación y dolor en la familia de Claudia Cano en Valle de Santiago
En entrevista para Periódico Correo, su hermana señaló:
“La policía nos dijo que está detenido, por pura casualidad lo detuvieron en Valle de Santiago, por ir a exceso de velocidad, ahí se dieron cuenta que Claudia iba de copiloto, pero ya iba muerta. La forense nos dijo que murió por muerte craneoencefálica, de ahí en más no sabemos nada; pero él (Enrique) la mató, ¿quién más pudo ser?”, dijo la mujer.
El tío de Claudia, aseguró que su rabia y su indignación para encontrar justicia para su sobrina le llevarán hasta las últimas consecuencias:
"No era mi hija, pero vivió conmigo desde los 6 meses, era mi sobrina, mi ahijada, duele mucho y estamos pasando un momento difícil, por eso no quiero que esto quede impune, vamos a ir hasta las últimas consecuencias; el fiscal no hace nada, está de adorno, solo es el parapeto de delincuentes”, concluyó.
Solo 20% de los feminicidios obtienen sentencia condenatoria
Según las cifras de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (CONAVIM), por lo que muchas veces, esta rabia y búsqueda de justicia por parte de los familiares de las víctimas es una carga adicional para las familias.
El sistema de justicia mexicano, ocasiona que las personas cercanas a las mujeres víctimas de feminicidio, se conviertan en una especie de ‘segunda víctima’ ya que comienzan su peregrinar por este para que los casos no queden impunes. Las personas muchas veces afrontan negligencias, burocracia pesada, omisiones y hasta comportamientos violentos por parte de ministerios públicos, fiscalías y procuradurías estatales.
Deficiencias en el sistema de justicia mexicano
Las negativas para atender las denuncias, así como los trámites engorrosos y la obligatoria espera al momento de una desaparición para comenzar a buscar a la víctima hace que encontrar a las mujeres y detener a los culpables sea difícil. Asimismo, el impedimento de las autoridades para que las familias accedan a las carpetas de investigación (de las cuales no hay motivo para negarlas, ya que forma parte de los derechos del denunciante), impiden a los familiares tener justicia para sus víctimas
Asimismo, estos impedimentos tienen un impacto económico y psicológico en las familias, ya que hay que realizar inversiones que no se tenían consideradas: contrato de abogados privados, traslados, copias de documentos y en algunos casos, contratación de seguridad ante las amenazas por investigación. Por otra parte, al requerir tiempo para seguir los largos procesos burocráticos, muchos de ellos terminan por renunciar a sus trabajos o son despedidos.
Esto impacta en la salud psicológica de la familia, quienes sufren las consecuencias de un sistema ineficiente y corrupto que no permite el reparo de justicia para las familias.
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