Trabajan tras el telón y sin ellos la OSUG no podría funcionar; conoce quiénes son

Además de los músicos, hay personal de la OSUG que trabaja tras bambalinas para que todo salga perfecto en los conciertos

Alejandro Sandoval

Guanajuato.-No tocan ningún instrumento en la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato (OSUG), pero su trabajo es indispensable para que se escuche. 

Y es que el mayor reto de esta orquesta es el trabajo en equipo, no solo en la parte artística, sino detrás del escenario, con la labor de gente que no se ve. Son trabajadores que ponen su talento y conocimientos para que la OSUG pueda tocar. Sus labores abarcan desde la importante organización de las partituras, hasta la contratación de solistas, administración, producción y gerencia de la orquesta. 

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Nunca nadie les reconoce, aunque el trabajo de la orquesta sería imposible sin ellos. El concierto que disfruta el público es el resultado final de una ardua labor que inicia semanas o meses atrás, cuando se eligen las piezas o el programa para el concierto.

Pues desde hacer la invitación a músicos, conseguir los instrumentos y atender las peticiones de los artistas. También hay que estrechar las relaciones públicas, alistar partituras para los ensayos, entre otras cosas que no están en un manual y son indispensables. El día de una presentación, horas antes se afinan los últimos detalles.

Una labor invisible

Beatriz Adriana González Pérez es coordinadora de Relaciones Públicas y Vinculación Artística de la OSUG. Ella tiene la responsabilidad de hacer un seguimiento a los músicos invitados. Desde invitarlos formalmente, asegurarse de que lleguen de la mejor manera. Además de que se les hospede y atienda para que, a la hora de subir al escenario, lo hagan con tranquilidad y sin preocuparse más que por tocar.

“Nosotros somos como una maquinaria de engranes. Si un engrane se hace lento o se deteriora, los otros ya no funcionan”, comenta.

El rol de Beatriz tiene que ver con incluso lo emocional. Ella es una pieza invaluable que ayuda al buen desempeño de un artista. Por ello, la coordinación de Relaciones Públicas es uno de los pilares de la Orquesta.

Coordinación del personal

Carolina Pérez Cortez es coordinadora de Personal de la orquesta y se encarga de ser el vínculo para que todos los integrantes de la OSUG siempre están informados, “coadyuvamos todos para que las actividades de la orquesta funcionen, nuestro objetivo es que los conciertos estén listos”.

Entre sus funciones particulares, está asegurarse de que la plantilla de músicos esté completa. Además, busca a músicos de otros lugares del país que puedan participar con la OSUG. Envía cartas de invitación, hace contratos con los solistas e invitados hasta que se les pague.

En la Sinfonía de los mil de Malher, fue un importante reto para ella, puesto que hubo 51 músicos invitados, de diferentes áreas.

“A cada uno hay que atenderlo, el tema de las cuestiones logísticas y administrativas, alimentos, contratos, pagos; pero, sobre todo mantener informada a la orquesta…Más allá de los pronunciamientos que han hecho para mejorar las condiciones laborales de la orquesta, Carolina Pérez Cortez dice que existe un compromiso con la música y a enfocarse a trabajar, “entender que la sustancia de la orquesta es el arte. Yo percibo muchísimo el compromiso con el arte, independientemente de las otras cuestiones”.

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La producción de la OSUG

Lilian Bello Suazo es coordinadora de Producción de la OSUG y su trabajo tiene que ver con que esté todo listo en el escenario. Si se requiere de algún instrumento que no tienen, habrá que conseguirlo, algunos son de lo más extraño.

La improvisación puede suceder en algún momento. Aunque su labor es tratar que todo esté en orden y el concierto se desarrolle conforme al plan. Por lo anterior, el área de producción tiene que ver con mucha creatividad, para resolver cualquier complicación que se presenta, antes y durante el concierto. Eso sí, siempre en función del arte.

“Cada viernes de concierto es un premio, el escuchar la orquesta y que todo se llevó a cabo como lo planeamos, o no, pero lo pudimos resolver, ese es el premio…Tenemos un compromiso con la música, con el arte, es la fuerza que nos impulsa, el amor a la música y al arte”, concluye.

Las partituras siempre en orden

Juan Carlos Urdapilleta Muñoz es el coordinador de Biblioteca de la OSUG desde hace 30 años, tiene un reconocimiento nacional por su trabajo y se encarga de proveer las partituras. Ello de diferentes maneras como, comprarlas, rentarlas, mandarlas hacer, hasta pedirlas prestadas.

“Cada semana son programas diferentes, son obras muy complejas. No son canciones de 3 minutos, sino son obras de una hora, una hora y media, casi imposible de memorizar”, comenta.

Ya que se consiguen los materiales, se preparan y se entregan a los músicos. Otra de las funciones es extraer cierta información de la propia partitura. Esto lo comparten con las coordinaciones, por ejemplo, qué instrumentos lleva tal sinfonía, “esa información se la paso a la Coordinación de Personal, para que ella vea si necesita contratar un músico extra o no, quién descansa, si la sección de cuerdas se tiene que repasar, etc”.

Todo es una cadena

Juan Carlos también extrae datos específicos sobre los instrumentos, esta es una actividad que hace con sumo cuidado, pues hay que revisar si tienen en la bodega de la orquesta, o bien hay que comprarlos o rentarlos. Además, su trabajo sirve a la información que se pone en el programa de mano. Esto es: el nombre exacto de la obra, la duración, los movimientos, si se tocan juntos o hay una pausa.

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El trabajo de biblioteca es muy anticipado, pues siempre hay que pensar en los siguientes programas. De acuerdo con el coordinador de biblioteca, a quienes trabajan en la OSUG los une el gusto por la música; pero, también una hermandad.

Entender el mismo idioma

Alejandro Guzmán Rojas es el gerente de la OSUG. Su incorporación es relativamente nueva, ya que fue en abril de este año. 

El considera que hay un equipo muy cohesionado, efectivo en sus laborales, donde siempre hay una manera de resolver las cosas. Él es un enlace entre la orquesta y la Universidad de Guanajuato a través de su Extensión de Cultura.

Una de las ventajas de Alejandro Guzmán es que también es músico, por lo que habla el mismo idioma que los integrantes de la OSUG, “la Universidad de Guanajuato está haciendo todo lo posible, todo lo que puede hacer para atender las necesidades de la orquesta”.

También dijo que el aumento autorizado recientemente, es un esfuerzo institucional de la Universidad. Manifestó su disposición de trabajar en armonía, además de destacar que el capital humano es muy bueno. Asimismo, agradeció al maestro Roberto Beltrán Zavala, director de la orquesta, por reconocer el trabajo de las personas que no se ven.

MJSP