LA REFORMA DEL NOTARIADO: UN MORENISTA EN CONTRA

DETALLE. Llamó la atención en la maratónica sesión del pleno del Congreso del Estado de ayer la votación del dictamen de la reforma a la Ley del Notariado que trae en rebelión a algunos notarios de la vieja guardia y a varios de los notarios auxiliares que están en contra de algo que consideran inequitativo.

SOLITARIO. Y es que en el pleno, el único que votó en contra de la reforma cuya iniciativa fue del gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo resultó ser el morenista David Martínez Mendizábal. Nadie más en su bancada le apoyó en su lance.

VOCERO. Y es que, en la discusión previa en la comisión de Justicia, la única postura hasta cierto punto discordante, había sido del priista Adolfo Alfaro quien ni siquiera se opuso abiertamente. Solo advirtió que de acuerdo a comentarios del gremio notarial, si se aprobaba la reforma sin un transitorio que abonara a favor de los notarios auxiliares, se enfrentaba el riesgo de la judicialización.

LIMITADO. Hasta ahí llegó la advertencia del priista que ni siquiera estaba en contra del dictamen. Solo fue el portavoz de una preocupación que ni le importó a la aplanadora panista que la sacó adelante sin problema. Digamos que el priista quedó bien como vocero pero hasta ahí. Cero compromisos.

TÁNDEM. Pero David Martínez sí votó en contra de la reforma pero sólo él. Nadie más de su bancada. Los malpensados afirman que su rechazo tiene una motivación adicional. Uno de los más entusiastas críticos de la reforma al notariado ha sido el presidente del Colegio de Abogados de León, Marcelino Trejo.

CASUALIDADES. Y bueno, Trejo, desde su calidad de notario auxiliar ha cuestionado la reforma aprobada ayer. En la coyuntura político-electoral, Trejo está apoyando desde su trinchera, las aspiraciones de Marcelo Ebrard, el canciller que quiere ser presidente de la república.

DUDA. ¿Será demasiada especulación pensar que David Martínez fue el único en votar en contra de la reforma multicitada como una cortesía al notario auxiliar Trejo que respalda a su corcholata preferida y también de su esposa, la senadora Martha Lucía Micher Camarena?

PRIMERA VEZ. Es que ya hemos visto que los morenistas voten divididos pero que la mayoría dejen solo con su voto a uno de los 8 diputados y diputadas, no se había visto antes.

LA DEL ESTRIBO…

A propósito de David Martínez, el diputado morenista se comunica a este espacio para aclararme que en efecto, forma parte de los diputados viajeros a Salamanca, España pero que él paga todos sus gastos.

Que ni el curso, ni el hotel ni los pasajes de avión son financiados con dinero público. Servido.

ERNESTO PRIETO: TODO POR SERVIR, SE ACABA

Hace 3 años, quien ya para entonces era diputado local de Morena, Ernesto Prieto Gallardo, daba la batalla para regresar a la dirigencia estatal de su partido luego de que, solicitó licencia y Alma Alcaraz ya no lo dejó retomar el cargo.

Justo un día como hoy, la sala Monterrey le daba palo a un reclamo de Prieto que pedía su reinstalación y esa instancia le decía que la decisión le correspondía en ejercicio de su autodeterminación y auto organización a Morena y que los órganos electorales no podían invadir esa esfera.

El poder entonces, se mantenía en manos de Alma Alcaraz quien todavía debía librar otra afrenta de los afines a Prieto que convocaron a una sesión del consejo y elegían a un nuevo presidente.

Alcaraz ya había impugnado, la decisión. Así estaba Morena a finales de 2019. De la greña y con su guerra de tribus. Ocurría a nivel nacional en donde Yeidckol Polevnsky se mantenía con las uñas en la dirigencia nacional pese a las críticas.

Pero también pasaba en Guanajuato donde Alma Alcaraz y Ernesto Prieto rompieron la alianza que los puso como el binomio que dominaba al morenismo en Guanajuato.

Prieto intentaba de todas formas. En un intento desesperado, convocó al consejo estatal para elegir a Antonio Chaurand, personaje afín a él como presidente de esta instancia.

Luego, el propio Chaurand y 7 miembros del comité estatal de Morena emitieron un comunicado en el que descalificaban un comunicado previo de Alma Alcaraz y los miembros afines a ella en el comité estatal del partido en el que descalificaron la renovación del consejo estatal.

Así estaba entonces la vida institucional de Morena. Inestable, cuando no rota.

A 3 años de distancia, algo positivo ha ocurrido en Morena que ya no padece la inestabilidad de su vida interna. Hace un buen rato que terminó el pleito entre Alcaraz y Prieto.

Hoy, de hecho, la vida institucional de la segunda fuerza política más importante del estado, goza de cabal salud con una dirigencia legalmente establecida.

Y no es que Morena haya terminado ya con sus pleitos internos y la guerra de tribus. Nada de eso. Simple y sencillamente que esos pleitos ya no se dan de manera abierta ni llegan a los tribunales.

Se dan de manera soterrada y en silencio lo cual ya es una ventaja. Ricardo Sheffield y Mauricio Hernández Núñez armaron una alianza para llevar a una dirigente que no tiene los blasones que sus antecesores.

Derrotaron a la corriente de Ernesto Prieto y Hades Aguilar quienes ahora son los opositores y el bronx. En otras palabras, Prieto está en el otro extremo de la cima que ocupaba hace algunos años. Justo cuando la apuesta es a llevar a su papá, Ernesto Prieto Ortega, a la candidatura a gobernador.

PRESUPUESTO LGBTI: PATERNIDADES, EGOS Y MÁS

Desde luego que, así de botepronto, uno escucha el mensaje del diputado del partido Verde Gerardo Fernández en redes sociales y no hay duda que promueve que la medalla del presupuesto de 7 millones de pesos para la comunidad LGBTI es solo de su partido y de nadie más.

“Hoy es un día histórico para Guanajuato, logramos que haya presupuesto para la comunidad LGBT. Después de mucho trabajo y diálogo, logramos conciliar el interés de la comunidad y la resistencia que había en gobierno del estado con la finalidad de que haya presupuesto que garantice las necesidades que hay en la comunidad”.

Así lo ratifica cuando replica, el reclamo que le hizo el dirigente de Amicus, Juan Pablo Delgado en Twitter.

“Estimado diputado Gerardo Fernández, la elaboración del diagnóstico es el resultado de un cumplimiento de una sentencia de amparo que obliga al Congreso a asignar presupuestos políticas que beneficien a las personas LGBTIQ+. No es un logro partidista. Una lástima que lo comuniques así”.

De inmediato, el propio diputado Fernández atajó: “ningún sesgo. La presentó el Verde y se aprobó por unanimidad. Saludos”, repuso.

¿En qué momento y por qué razones, MC y Verde llevaron innecesariamente a un ring, un asunto en el que podrían (debían) compartir el logro?

En efecto, la reserva que se aprobó ayer en el pleno para destinar recursos para la atención de la comunidad de la diversidad sexual fue fraguada, ideada y concretada por el diputado Fernández. Ese es su mérito.

Pero es evidente que sin amparo ganado en tribunales por Amicus, era difícil pensar que la mayoría panista iba a aceptar que se destinaran recursos para esa comunidad.

La aplanadora azul dio muestras una y otra vez de sus resistencias para ejecutar la sentencia en el Congreso local. Volvamos al punto. Extraña el tono de disputa entre Verde y MC, confirmado en el discurso que dio en tribuna, la diputada Dessiré Angel quien apoyó la reserva que presentó el diputado del partido Verde pero con un reclamo clarísimo.

“Que hoy pensemos en presupuesto focalizado para las personas LGBTQ es una conquista suya y de nadie más. Costó, hay que recordarlo, 2 juicios de amparo, protestas, diálogos y negociaciones. Que así se recuerde. No como una victoria de partidos políticos sino como una lucha incansable de personas defensoras de derechos humanos”.

Hace un año, la misma diputada había presentado una reserva para que se destinara presupuesto para la comunidad de la diversidad sexual. Y el PAN, bateó su propuesta porque los azules no regalan nada.

Ayer, Gerardo Fernández la vendió como una victoria del partido Verde. Un exceso a todas luces.

Y claro, desde su posición privilegiada el PAN disfruta la guerra de egos en la chiquillada. Divide y vencerás.

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