Mundo paralelo: batazo a la ley electoral

1.- Mundo paralelo: batazo a la ley electoral

No cabe duda de que para las hegemonías políticas, en México no importa que partido ostente el poder mayoritario. Cuando hay oportunidad de ejercerla en un tema tan crucial como lo electoral, se hace sin cortapisas. Tal vez lo sano es que se están encontrando vías para frenar o al menos contrarrestar esos mecanismos de la cultura política nacional.

Como quiera que sea, no deja de ser una paradoja que los mismos argumentos legales con los que que el PAN impugnara la propuesta de Plan B de Morena en materia política y electoral, hayan sido los mismos que Morena presentó para impugnar la Ley Electoral que el PAN y el PRI aprobaron en el Congreso Local en fast track.

Se trata de una estampa que evidencia que no hay buenos ni malos, simplemente partidos cometiendo excesos cuando tienen el poder y enfrentándose cuando son oposición.

En este caso la vía de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha resultado fundamental. Concretamente en este proceso que nos ocupa, basta decir que hace escasa una semana, la propia ministra presidenta Norma Piña Hernández, advirtió que se encontraron por lo menos tres irregularidades en el proceso legislativo.

Eso le debe poner hielo a los festejos contra la reforma electoral prianista de Guanajuato. Su invalidez es en forma más no en fondo, de manera que no afecta las fechas planteadas para el proceso electoral. Lo que en realidad se obliga es a reprocesar la ley para dar participación plena a las diferentes fracciones. Legitimarla pues.

Así que ya se puede esperar que el grupo parlamentario del PAN, que presume de tranquilidad, nuevamente aplique su mayoría para reiterarla y solo cumplir con los faltantes en el proceso legislativo. La pregunta más bien sería si la oposición tomará medidas extra para aprovechar la ventana y convalidar una verdadera reforma.

Lo que es cierto, es que una parte de la reforma incluía la digitalización de los registros de los eventuales candidatos ante el Instituto Estatal Electoral de Guanajuato (IEEG). Toda la parte que abarca la modernización tecnológica del órgano que sí era bien vista por más de dos bancadas. Esa es la que se podría lamentar.

Ya en el campo de la política partidaria, se podría reconocer que por excepcional ocasión hubo cierta unanimidad y unión en Morena para impugnar la ley. Una de las pocas acciones en equipo que se le conocen con un efecto certero y que sólo esperaríamos no motive una nuevo debate por ver quien se asume como artífice.

En tanto, el PRI -que secundó los deseos del PAN para emitir esta reforma-, nuevamente queda exhibido como un simple comparsa que se prestó para el mayoriteo, pensando en una alianza electoral que sigue sin ser un hecho consumado.

 

 

2.- Morena: paradójica fiebre de aspirantes

Este es sin duda un claro ejemplo del gen morenista. Puede ser que haya casi unanimidad y cierre de filas en torno a su liderazgo nacional, pero cuando se trata de los procesos estatales no hay un verdadero liderazgo definido.

Así pasó con los interesados en buscar la candidatura de Morena a la gubernatura de Guanajuato. Finalmente se registró la friolera de 19 interesados, que superaron por mucho la previsión de cinco o hasta seis aspirantes que accedieron a la encuesta para definir al o a la abanderada.

Por supuesto, estuvieron los cinco aspirantes más notables: Antares Vázquez Alatorre, Alma Alcaraz Hernández, Bárbara Botello Santibañez, Ricardo Sheffield Padilla y Ernesto Prieto Ortega. Junto a ellos otros 14 ciudadanos y militantes se apuntaron con motivos insospechados, al final esa calidad les duraría poco.

Tal cual marcaron en la convocatoria, por la tarde noche se celebró la sesión del Consejo Político Estatal, que funge como el primer filtro para cerrar la baraja de posibilidades a dos mujeres y dos hombres. Ahí se dejó fuera a Botello que deberá adaptarse a la práctica morenista, todavía tiene posibilidad de repechaje.

Los votos para los primeros cuatro participantes que se medirán en encuesta resultaron ilustrativos del control del consejo: Sheffield con 85, Prieto con 57, Alma Alcaraz con 62 y Antares con 60.

Con la magia que les caracteriza, todavía el CEN podría integrar a una mujer y un hombre que consideren con un perfil rentable. Ahí es donde cabe Botello y el delegado de programas federales Mauricio Hernández Núñez. Quien sabe, todo puede pasar, incluso que no haya más pasajeros.

Por lo pronto ya hay cuatro aspirantes que realizarán el trámite de la medición, entre los que se esperan más golpes debajo de la mesa, como los espectaculares en negro que fueron colocados en avenidas importantes de León con la leyenda “Ernesto Pietro es un peligro para Guanajuato”.

No sabemos qué intención tendrían con esa frase que hace recordar la guerra sucia de la que fue objeto Andrés Manuel López Obrador en 2006, pero lo que es un hecho es que prueba fielmente el arranque del proceso interno morenista, tan caótico como se los permitan sus estructuras.

 

 

3.- Salamanca: otra zona rural minada por el crimen

Las señales de una zona conurbada o rural en Salamanca dominada por el crimen organizado, es más seria de lo que parece. Su ejemplo, es más cercano al de Celaya, cuyas comunidades registran actividad criminal rodeando prácticamente toda la mancha urbana de la cabecera municipal.

Así ocurre en Salamanca, donde desde antier los pobladores de Mancera, Los Prieto, El Cajón, Loma de San Antonio y La Capilla al poniente, viven con el alma en un hilo con recientes enfrentamientos entre grupos delincuenciales rivales, ante la ausencia de la Guardia Nacional y de las corporaciones de seguridad.

El escenario de violencia no se hizo esperar. La vida diaria de industrias y escuelas se ha visto seriamente perturbada, como los casos registrados en otras comunidades como Barrón y Valtierrilla.

La respuesta del municipio ante estos focos de inseguridad ha sido de vulneración tras vulneración. Desde el gobierno de Antonio Arredondo Muñoz (2015-2018) se apostó por  disolver la policía municipal para entregarse al Mando Único; Beatriz Hernández Cruz (2018-2021) llegó con aires de renovación pero poco avanzó en reinstalarla.

Con Cesar Prieto Gallardo no hay mejores señales. Dependiente de la Guardia Nacional, ha perdido poder de despliegue, así como trabajo de inteligencia, para detectar e intervenir en estas zonas que parecen ocupadas por los grupos criminales en una preocupante ingobernabilidad.

Por ello, lo que ocurre en la zona rural de Salamanca no debe minimizarse. Es efecto de la vulnerabilidad que se acumuló sin una corporación propia, pero también el foco de preocupaciones de la ciudad petrolera que se suponía blindada por las fuerzas federales.

 

 

CONTRA RETRATO

Alvar Cabeza de Vaca Appendini

Consciente de que su cargo es completamente removible, el secretario de seguridad pública del estado, Alvar Cabeza de Vaca Appendini, se centra en vender la conveniencia de darle continuidad a las política de seguridad, aún cuando sus once años en el puesto no han hecho mucha diferencia en el panorama general de criminalidad de Guanajuato.

Cuestionado al respecto ayer tras participar en el desfile de la toma de la Alhóndiga de Granaditas, apeló a la estoica postura de la resignación al afirmar que así como su cargo es de designación directa, también lo es de “remoción directa”.

Pero el tema va más allá de la voluntad de la gobernadora o gobernador en turno. Se trata de cambiar una visión de la seguridad pública, que ayer mostró la distancia a la que están de entender la naturaleza de la violencia, al vestir a un infante de elemento de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado con una aparente arma larga.

La bochornosa escena hace recordar el escándalo que provocó en una secundaria de Purísima del Rincón, donde sus elementos mostraron sus armas a los alumnos, incluso dejándolos portarlas. Sólo que esta vez fue peor al tratarse de un desfile en un evento oficial. Con toda la premeditación y ventaja.

Es entonces donde se cuestiona si se tiene al secretario adecuado, o este mantiene una visión más bélica de la seguridad, donde los excesos son parte de una normalidad o incluso de un costo social que es necesario pagar. Ayer Alvar, mostró su perspectiva.