No hay jugada
Las condiciones extremas que está viviendo León con el alza de contagios de Covid-19 y los pronósticos de que esta situación se alargará aún varias semanas, dado el poco respeto a las medidas de prevención y confinamiento social para bloquear la cadena de infecciones, ha comenzado a limitar el margen de maniobra para que se desarrolle una serie de eventos en condiciones presenciales.
La Feria Estatal de León, el gran evento anual en la capital del calzado, que usualmente cubre poco más de tres semanas de fiesta, no ha podido realizarse y ha quedado ya sin fecha tentativa para su celebración. Previamente se había pensado llevarla a cabo en la última semana de febrero y las dos primeras de marzo, sustituyendo la atención del Campeonato Mundial de Rally que fue suspendido, también por causa de la pandemia, para este año.
Sin embargo, la medida habría hecho imposible realizar SAPICA en las fechas usuales para la temporada otoño-invierno, que se presenta en la primera o segunda semana de marzo. Los zapateros han programado su feria en modo mixto, es decir, con eventos virtuales y presenciales. La colocación de la feria obligaría a ajustes en su evento, que también es revisado con lupa.
El síndico e integrante del Consejo del Patronato de la Feria, Christian Cruz Villegas, freno de mano del alcalde Héctor López Santillana para el fallido aspirante a la presidencia leonesa por el PAN y titular del patronato, Juan Carlos Muñoz Márquez, dejó en claro que todos los supuestos se han derrumbado. No hay certezas y será mejor esperar a la evolución de la pandemia en la capital económica del estado de Guanajuato para definir la mejor fecha para la celebración de la feria.
Quienes piensan que podría ser para abril o para mayo, olvidan que el ajuste también deberá hacerse respecto a la conveniencia de no empatar con otras grandes ferias nacionales. Por eso hay un ojo en Aguascalientes, para conciliar con la de San Marcos, pues también se necesita ajustar convenios con las empresas que proporcionarán los juegos mecánicos y otras atracciones, así como los expositores que ya han sufragado en muchos de los casos, sus cuotas por participar. Un problema que también arde en manos del patronato, según se asegura desde dentro del Ayuntamiento leonés.
Así, se cita que la feria leonesa podría celebrarse en un impasse de eventos en la localidad, en el verano.
Una salida para restauranteros cuevanenses
La emergencia dicta medidas extremas. Las negociaciones que se han registrado en la ciudad de México entre el sector restaurantero y las autoridades para que puedan tener más posibilidades de venta en sitio, ha abierto la oportunidad de que abran terrazas y se instalen con mesas y sillas al exterior de sus negocios.
La medida será exclusivamente durante la crisis y al regreso a la normalidad, todos deberán regresar con su mobiliario a interiores.
En Guanajuato capital donde los restauranteros y los bares sufren por las mismas condiciones, con efectos concatenados en el sector turístico, el ejemplo podría abrir una opción para que se sostengan negocios y empleos.
La delegación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) deberá tener altura de miras en este momento, como lo está teniendo en la CDMX y ser flexible para que sean ocupados sitios públicos, mientras que el alcalde de Guanajuato Capital, Alejandro Navarro Saldaña, con las potestades que le permiten los reglamentos, bien podría encontrar una vía de desahogo para un sector tan importante y en crisis en varias partes de La Cañada.
La lógica es que, con la atención en sitios abiertos, disminuyen los riesgos de contagio en los restaurantes. Una medida emergente, que no es para quedarse. Eso sí, tapar la vista del Teatro Juárez, debe ser imposible…